¡Unifiquemos criterios jueces AAAB!

En una cancha se pita una cosa, en otras se aplica disímil criterio… Así, árbitros del básquet paranaense, lamentablemente, confunden a los chicos de U13 y U15. O las instrucciones son duales o la interpretación es incorrecta. Comenzamos la Preliguilla contemplando arbitrajes rigurosos y con el correr de las fechas los pitos se ablandaron. ¿En qué quedamos? Galería de fotos.

 

Vamos a insistir en contar una anécdota… Instancias finales de la Liga Provincial U13 FeBER, año 2012. En una cancha, un juez NO PARANAENSE -desafortunadamente- nos admitió con mordacidad: “Uds. se quejan porque no tienen idea cómo se juega en el Interior. Es a hacha y tiza… Más te quejás, más te pegan. En Paraná se equivocan los árbitros intentando pitar todo. Los pibes llegan acá y esperan que se dirija igual, pero no… Acá no jugamos a la mancha…”

 

Una vergüenza esa expresión y de un juez NO tan joven, conocido… Primero por “pegarles” a los árbitros de la APB y segundo por admitir que en el interior de Entre Ríos se puede sacar ventaja de contactos ilegales.

 

Uno cuenta con varios aprecios en el seno del cuerpo de árbitros que se desempeñan en las categorías Formativas/Menores de la APB y charla asiduamente con ellos, contándoles vivencias en diversos escenarios y transmitiendo nuestras consideraciones acerca de lo que observamos en las canchas locales respecto al arbitraje.

 

Y por ello seguimos reforzando la idea. Lo fundamental es que los chicos aprendan a defender, reciban firmes enseñanzas acerca de cómo mover piernas y brazos, cómo controlar sus cuerpos, qué es legal y qué no. Lo que no se inculca en cada entidad no se puede instruir por parte de los árbitros.

 

Las autoridades sí pueden (y deben en Menores) expresar claramente lo que sancionan, pero ellos NO SON CULPABLES de lo mal que se defiende, lo poco coordinados que se ven muchos jugadores entre 12 y 15 años, manejando sus cuerpos inestablemente y en algunos casos con extrema vehemencia.

 

Y aún más grave… Varios pibes que, o por virtud propia o por enseñanzas ajenas, ya saben qué artimañas evidenciar para sacar ventaja de agarrones, empujones, y otras artimañas que los más ingenuos padecen.

 

No queremos jueces que “cuelguen” con faltas a todos en el primer cuarto, pero sí que esgriman un arbitraje riguroso desde el vamos para evitar esos contactos ilícitos pues luego, con el correr del partido, las fricciones se incrementan y en encuentros parejos puede implicar que se gesten micro-climas adversos.

 

Si en el Interior están acostumbrados a que se juegue “a puro huevo”, si se permiten batallas físicas por sobre el básquet, ya veremos con el correr de los años en qué quedan esos jugadores, adónde llegarán. Y ojo… Enunciamos ellos por la palabra de ese árbitro, aludiendo al tipo de arbitraje en la capital entrerriana.

 

Es una pena que no se pongan de acuerdo entre ambas costas y zona centro. Sería muy bueno. Mientras, nos conformamos con que en Paraná no exista esa dualidad y se cuide más el evitar roces innecesarios.

Claro… repetimos… esto va también para los técnicos en cuanto a que dejen de culpar de todo a los jueces, sin formularse una profunda autocrítica. Guste o no lo que aquí decimos, hace mucho, pero muchos años venimos apreciando cómo se confunde el vigor con el rigor, el defender duro con el agarrar, el empujar y ni que hablar cuántos vicios y/o carencias existen en lo inherente a fundamentación.

 

Para la próxima… Nos referiremos a la falta de respeto que evidencian algunos chicos de U13, de U15 y de U17. Intolerable actitud, sin lugar a dudas…