Maran Suites & Towers

TNA: si lo dice el Memo…

Según Paraná Deportes, Román Rodríguez llegó a un acuerdo y es otro que sigue en Echagüe. De esta manera, el AEC sumó otra ficha mayor para la temporada que viene en el TNA: Además de Rodríguez ya están Rostchy, Oviedo, Negri y Sepúlveda. Hasta las 14.20 de éste martes la noticia no fue oficializada por el club. ¿Alguien nos puede explicar dónde está la base de la cual habla el Memo y hasta algunos colegas?

 

“Hoy arreglé con Echagüe, muy contento de poder seguir en Paraná jugando” dijo el basquetbolista en declaraciones al programa radial “Tribuna Deportiva (AM LT 14), para luego agregar: “Hable con Ricardo (De Cecco) por la conformación del plantel. Hablamos de mi continuidad y que me tenía en cuenta, así que estoy muy feliz por jugar en Echagüe y por saber quienes serán mis compañeros para la próxima campaña”.

 

Del plantel pasado, Echagüe logró retener a David Oviedo y ahora Román Rodríguez, quienes se suman a los nuevos: Mauro Rostchy (escolta), Mauro Negri (pivot) y   Carlos Sepúlveda (alero).

 

En sí, Román Rodríguez tiene una relación muy particular con Echagüe. Además de sentirse identificado con el club, dirige algunas divisiones menores como así también la Reserva: “En el club estoy muy bien, muy cómodo. Echagüe y Paraná me sientan muy bien. Entro al club y me parece que estoy ingresando a Sportivo Pilar, mi club de barrio. Todo esto lo deja a uno tranquilo, de que está haciendo bien las cosas”, dijo el Memo, en nota que a su vez reproduce el Portal amigo, Paraná Deportes.

 

Cabe agregar que ésta noticia no fue oficializada por Echagüe, o al menos no se remitió a nuestra casilla de correo información desde la institución al respecto.

 

¿De qué “base” se habla?

 

“Siempre es una ventaja mantener una base. Los proyectos a largo plazo, en algún momento, dan sus frutos. Cambiar nueve jugadores todas las temporadas no sirve de nada. Los que estamos quedando nos sentimos muy cómodos y esto también ayuda a los que vienen de afuera. Inclusive es bueno lo de Ricardo (De Cecco), ya que también sabe lo que es el club”, expresó también el Memo pero en diálogo con EL DIARIO… Ahora bien… O nos falla la memoria y no recordamos que se hubiesen ratificado a más jugadores que él u Oviedo, o Rodríguez sabe que se vienen otros acuerdos con jugadores de la última temporada.

De no ser así, entendemos que mantener una base es sumar un par de refuerzos y un buen extranjero. No sumar tres fichas nuevas y seguir demorando el resto.

Lo que es más… Si la idea era mantener a otras piezas del paso por la B, deberían haber sido las primeras en definir por lo que dieron anteriormente, y porque OBVIAMENTE no tienen un valor igual o superior a las pretensiones de jugadores que ya venían participando del TNA o de la A.

No es LÓGICO, a último momento, terminar de armar con lo que ya estaba a mano y se podía convenir antes y hasta empezar a trabajar con mayor anticipación.

Lo reiteramos… Y nos duele señalarlo por el aprecio que tenemos por algunos dirigentes del AEC: éste comienzo huele a una dosis de falta de previsión. Lo que nos cuesta interpretar es quien es el responsable de esto, y paradójicamente, aunque nos cueste admitirlo por segunda vez, fue De Cecco quien avisó PÚBLICAMENTE cuáles eran sus pretensiones y al parecer lo está cumpliendo, pidiendo que se contrate lo que se amolde a su metodología de trabajo sin respetar lo que se denomina “la base” en la transición de una a otra temporada.

Él fue claro en su momento en charla con EL DIARIO, y presuntamente, lo está cumpliendo. Lo de Oviedo sí fue bastante espontáneo. Lo de Rodríguez costó. Llegaron ya tres fichas pedidas por él. Faltan dos y tenemos el combo preanunciado y del que se nos dijo (¿cuántas veces lo hemos repetido?) “De Cecco se ajustará al proyecto de mantener la base de la temporada pasada y sumar dos o tres refuerzos más el extranjero, todo ello dentro de un presupuesto limitado”.

Es evidente que, por ahora, la pulseada la gana el técnico salteño. ¿Cómo terminará todo?… Ojalá que bárbaro, pero… es inevitable dudarlo viendo cómo y cuándo se armó el resto. Nuestro deseo más profundo es que, pese a tan intrincado comienzo el entrenador logre juntar un grupo de jugadores consustanciados con su filosofía y básicamente, no sufrir en la meta primaria de salvar la categoría.