Nueva celebración de Iemanjá
Este domingo tuvo lugar una nueva conmemoración por Iemanjá, dadora africana de abundancia y protectora de las familias y de los pescadores que año a año reúne más gente.
Iemanjá, orixá máxima del panteón africano es la dadora de la abundancia y protectora de las familias en general y de los pescadores en particular y a ella le han dedicado su obra, entre otros notables, Jorge Amado (en literatura), Caribé (artes plásticas), Vinicius de Moraes (poesía), Pierre Verger (fotografía), Caetano Veloso, Gal Costa y Sergio Mendes (música).
Con procedencia de la nación yorubana de África llegó a América bajo la custodia y devoción de los esclavos de los barcos colonialistas. Actualmente, su influencia y protección se extienden en el mundo y su culto ha trascendido a otras etnias, además de haber sido popularizado en numerosos largometrajes.
De hecho, en Argentina, y particularmente en Mar del Plata, ya ha sido declarado de Interés Cultural y de Interés Turístico Permanentes por la Secretaría de Cultura de General Pueyrredón y por el Ente Municipal de Turismo, como también de Interés Turístico Provincial.
Por esta relevancia a nivel cultural, su apego a la pureza de la tradición africanista y su importancia como verdadero hito religioso en la costa argentina, esta ceremonia ha sido especialmente considerada -como una de las más importantes de América y la más relevante de Argentina- en el prestigioso volumen “El don de la ubicuidad”, de la antropóloga Renée De la Torre (editorial Type, del Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología de México), así como en el libro antológico del INADI de nuestro país: “Argentina es Afro” y en artículos de reconocidos especialistas, como el antropólogo Alejandro Frigerio, sin contar con las numerosas notas de la prensa nacional y de los países limítrofes.
La últimas fiestas en honor a la Mae Iemanjá contaron con un número importantísimo de concurrentes, estimado según las estadísticas oficiales y el arqueo de los últimos años, en tres mil, sin contar con los fieles -cuyo número llega a los 400- que engalanan la Festividad, una celebración que consta de procesión, establecimiento de ofrendas en la playa, danzas y rezas, toque de batuque y entrega de las barcas al mar.
Sin embargo, este domingo, según los organizadores, alrededor de 6.000 personas homenajeron a Iemanjá. Una vez más, el número y diversidad aumentó en cuanto a procedencia geográfica, cultural y social.
La celebración que desde hace 29 años realiza en Mar del Plata el babá Hugo Watenberg, director del Centro de Estudios Africanistas Reino de Iemanjá Bomí, ha crecido hasta convertirse en la 3º más importante de América, en una serie que encabeza Salvador de Bahía (Brasil), tierra en la que habitaron los esclavos traídos en los barcos negreros.
En Mar del Plata, este verano, al igual que el 5 de febrero de 2012, la procesión partió sobre las 19,30 horas del Playón del Casino para dirigirse a la Playa Popular, a la altura de calle Rivadavia, en un atardecer que sólo necesitó de la compañía del buen tiempo para que una vez en la arena, se proceda a los espectaculares saludos al orixá.
Entre cantos y con el colorido de la ropa de las bahianas y la gala de las barcas escoltando la figura de la Iemanjá negra especialmente traída desde Nigeria, la multitud acompañó la procesión hasta llegar hasta la arena, allí, se formó la ronda para dar lugar al toque de batuques, rezas de orixás y danzas y así culminar con la entrega de barcas con ofrendas y pedidos al mar y un gran estallido de fuegos artificiales que enmarcó la foto de una postal inusual y emotiva en nuestras costas.