Maran Suites & Towers

Raro en él… Gabriel Heinze pecó de soberbio

Vélez fue víctima de otro batacazo de la actual Copa Argentina al perder con Central Córdoba de Rosario en los penales. Con la calentura por la eliminación aún fresca, al DT del Fortín, Gabriel Heinze, no le gustó que le preguntaran por qué el último en patear en la tanda fue el juvenil Nazareno Bazán, a quien César Taborda le atajó el quinto disparo. Y se armó un cruce picante con un periodista, donde, extrañamente, el entrenador asumió una actitud de extrema soberbia.

 

“Por una decisión absolutamente de él. Yo no le digo nada a nadie. Yo propongo, pero los que deciden son ellos, no yo. Yo no decido nada”, arrancó Heinze. Pero ante la insistencia del periodista sobre que él es el entrenador y algo debe decidir, insistió en que no: “Son ellos, los futbolistas”.

 

“Lo que hago es proponer cosas. Pero yo decidir… ¿Por qué? Si son ellos los que están en el campo de juego y son los que tienen las sensaciones o pulsaciones a mil. Yo voy a obligar a hacer a un futbolista a hacer una cosa donde…”, continuó el DT.

 

“Yo no dije que lo obligás, digo que sos el entrenador y por algo tomás responsabilidades”, interrumpió el periodista. Y ahí sí, más enojado, Heinze continuó con la respuesta. “Si estoy decidiendo sobre un futbolista donde no sé lo que está sintiendo, creo que estoy haciendo mal. ¿Te quedó claro?”, siguió.

 

“Sí, no concuerdo, pero me quedó claro”, contestó el entrevistador. “Es un problema tuyo. Lo que pasa es que nunca vas a estar ahí adentro. Eso es una diferencia tremenda, porque no vas a sentir lo que es estar en esa situación. La tenés que vivir. ¿Me entendés?”, lo chicaneó Heinze.

 

Ante otra respuesta negativa, el entrenador atacó con más fuerza: “Nunca lo va a entender tampoco. Yo tiré penales. Lo viví, erré, fracasé y también tuve éxito. Como entrenador y como jugador. Yo perdí, yo erré y yo gané. Claro que las viví. Vos seguro que no las viviste…”, concluyó con una arrogancia para nada acorde a su personalidad, a su carácter que supimos valorar.