Patronato debe ahondar la autocrítica
Lo presumido por varios se dio. Patronato sumó en Rafaela; de a uno, pero sumó. Sirve, no hay dudas, pero lejos está de convencer. Obvio que siguen suscitándose coyunturas en medio de un partido que en cierta forma terminan robusteciendo la tendencia de lastimar y refugiarse, acechante, en su campo aguantando todo lo posible. Eso no se discute. Pero hay puntos evidentes a evaluar y proceder en cosecuencia.
El liderazgo se mantuvo tras la batalla de Rafaela, pero el Santo no logra crecer colectivamente. Es una muy lenta y complicada evolución y el tiempo corre vertiginosamente rumbo a la parte final.
Lo peor es que un técnico de jerarquía indiscutible profesional, o en sí de innegable calidad humana como Marcelo Fuentes se mantiene algo cerrado en determinadas instancias y no apela a modificaciones oportunas que pueden mejorar el semblante del equipo.
Su firmeza tiende, subjetivamente así se interpreta, a una dosis de porfía y la historia Rojinegra delata enormes frustraciones por la terquedad de sus distintos entrenadores, en algunos casos, contemplados pasivamente por la dirigencia de turno.
La era Fuentes fue muy esperada por la afición y hasta por los medios, hoy está, y hoy vale la pena otorgarle el crédito que requiera pues bien ganado se lo tiene con su capacidad de trabajo, no obstante sería bueno que al menos escuche el clamor de la gente y se acerque al sentimiento del hincha como al razonamiento del comunicador.
Soñamos, Paraná TODA sueña, con ver a Patronato en el Nacional B de la mano de Marcelo, pero para ello debe existir una identificación homogénea y no servir solo la gente para oblar una entrada, el hincha fanático para meter color y pasión o la prensa para divulgar. Debe darse una amalgama de todos los sectores, respetándose el disenso, pero cada parte cediendo en sus derechos y/o acreencias.
Pasa en Paraná, pasa fuera del Grella… Salvo la goleada justamente en tierras rafaelinas, en cada partido que transcurre se está viendo un incipiente disgusto -por ahora tenue- en cuanto a lo que espera el público y lo que da plantel y cuerpo técnico.
Y todos, o casi todos, interpretamos las dificultades que se han presentado, pero cuesta explicarse algunas demoras en los cambios que derivan casi coincidentemente (por mala suerte, obvio…) en que tal o cual jugador que no venía bien física o psicofísicamente, o técnicamente, termine metiendo la pata o saliendo lesionado.
Sí, son casualidades, aunque es inevitable imaginarse una dosis de CAUSALIDAD. Y la manija la tiene como queremos que la siga teniendo Fuentes, un DT de Primera, que no sabemos si será por los años o qué…, ha asumido un patrón de conducta bastante intransigente en cuanto a lo que se le reclama desde afuera.
A ver… Ejemplifiquemos con nombres “x”… La gente y hasta los medios coinciden en que “Juanito” no está jugando bien… “Juanito” sigue en cancha y se lesiona o mete la pata y lo expulsan.
El simpatizante ve que nos están desbordando por los andariveles y en vez de meterse un cambio para fortalecer esa zona, la variable cubre otra posición. A los pocos minutos de esa introducción empieza un calvario para el Negro que termina refugiándose cerca de su área.
Y ya han sido varios, muchos los encuentros que terminaron con Patronato dedicado solo a contragolpear y con Bértoli como figura excluyente… Digamos con mayor firmeza: el arquero ha sido un Talismán indiscutible para que no se pierdan cotejos donde el Santo fue dominado notablemente en las segundas etapas.
No somos harto exigentes. Nos alegra de corazón que Marcelo sea el Gran DT de Patronato. Pero esperamos que baje un cambio y se acerque al sentir del hincha y del periodista que desde 1978 viene soportando una y otra decepción porque justamente, en el historial de responsables técnicos, la entidad del Padre Grella haya tenido en el banco tantos hombres tozudos, arrogantes, vanos que (amén de sus cualidades profesionales…) murieron en la suya y así perdieron increíblemente chances de estar en el fútbol grande haciéndole perder a su vez al directivo plata que mucho costó recaudar generando en la gente una paulatina desconfianza que hoy se traduce en susceptibilidad constante.
La crónica de otra tarde/noche oscilante
Soltermann sorprendió con la inclusión de Scornaienchi desde el arranque, relegando a Weissen al banco y poniendo un esquema muy similar al que había presentado D’Angelo en su era, con Andretich en una especie de media punta.
No le salió mal esa apuesta, ya que el León emprendió un comienzo lujoso, presionando de tres cuartos en adelante y llevando a Patronato a un terreno en el cual se sentía incómodo. Por eso llegó la alegría a los 5′, pero a través de una pelota parada. Excelente manejo de Andretich en la bocha detenida, pase en corto para Gómez dentro del área, giro y definición del defensa y 9 de Julio arriba. Una excelsa jugada preparada que encontraba dormida a toda la defensa del Negro.
Un rato más le duró ese buen comienzo a 9 de Julio, imponiéndose y no dejando jugar a Patronato que, por su parte, cada vez que lo podía hacer lo hacía mal.
Y sólo se remitió a llegar con pelotas detenidas, donde contó con más de media docena de tiros de esquinas y donde todos los balones iban para Müller y todo el arsenal que posee Patronato de pelota parada. A los 25′ llegó el empate.
Un buen córner de Bianchini, la bajaron en el segundo palo y Echagüe estampó otro cabezazo que finalizó en gol. Quizás el jugador que menos esperaba que cabeceara en toda la defensa juliense, pero uno de los que mejor se movió en busca del impacto de la pelota.
Los últimos 20 minutos de juego fueron bien tediosos, imprecisos y mal jugados.
En síntesis; Andretich tuvo un buen primer tiempo acompañando a Torres, que no lo hizo bien. Tampoco fue productiva la primera parte de Scornaienchi y Valli, que tuvo que entrar a los 32′ por Muñoz lo hizo bien hasta el pitazo de Arco.
El complemento
Cuando comenzaba a desarrollarse el complemento, el local contó con tres ocasiones claras de gol. Dos en los pies de Torres y una magistral de Andretich que se fue bien cerca del palo de Bértoli. Pero más allá de estas ocasiones, había que mencionar que 9 de Julio era mejor que Patronato en la primera media hora de esa mitad. Levemente superior, pero mejor al fin al establecer jugadas de riesgo y al manejar mejor la pelota.
El “Patrón” iba a los “ponchazos”, con bandazos para Jara y para Bianchini y Urresti, que recorrían por las bandas.
Por eso Fuentes movió el banco mandando a Brites y Espínola a cancha, dos jugadores importantes; uno un goleador de raza y el otro un gran mediocampista.
Malacho había hecho lo mismo minutos antes sacando a Cuello e introduciendo a Ibáñez; Scornaienchi de doble “5” y Andretich por el andarivel.
A los 35′ Andrade cometió una tontería al agredir a Andretich que estaba en el piso y Arco lo expulsó. El León afrontaba los últimos 10′ con un jugador más.
Pero la diferencia de hombres no le permitió al León establecer la diferencia ante un Patronato que se cerró y optó por rearmarse definitivamente desde atrás hacia adelante (lo explica el cambio del defensor Weisettel por Diego Jara).
Sólo un remate cruzado de Peirotti, que ingresó por Scornaienchi, en el tiempo de descuento y después el empate. Empate que le sirve a medias al León, pero que suma y que además sabe que le esperan más partidos en casa que afuera.
A los paranaenses le significa continuar como puntero en la Zona 1, pero que seguramente le deja dudas en cuanto al futuro pues sigue dejando una imagen exageradamente irregular y en la que termina otra vez como baluarte imprescindible su guardavalla Sebastián Bértoli junto a un Mariano Echagüe que se erige en lo mejor de la zona media.
Gimnasia logró un triunfo vital para sus aspiraciones
Con goles de Matías Padilla, de penal, y Mauro Quiroga, uno en cada tiempo, el Lobo venció por 2 a 0 a Sportivo Ben Hur y se afirma en los puestos de clasificación de la Zona A del Torneo Argentino A. Ante un buen marco de aficionados el equipo de la dupla Losada-Cruassar tuvo sólo algunos buenos pasajes de fútbol, los que coincidieron con los goles.
Luego de tres partidos sin victoria Gimnasia debía ganar y lo hizo para seguir prendido en zona de clasificación; pero debía jugar bien tratando de enamorar a sus hinchas pero esto lo consiguió sólo en algunos pasajes. Y en ellos fue en donde hizo la diferencia ante un rival digno en su planteo, con buenas intenciones de jugar siempre la pelota al ras del piso pero carente de peso ofensivo lo que lo privó de algo más en este partido.
El primer tiempo tuvo 35’ minutos iniciales para el bostezo. Gimnasia tenía la iniciativa y la pelota pero le costaba llegar al arco defendido por Bosio. La visita, en tanto, se conformaba con el cero en su arco y con remates de larga distancia intentaba sorprender a Gimnasia.
Muy poco de un lado y del otro teniendo en cuenta que se trataba de un partido donde los dos necesitaban los tres puntos. El Lobo para seguir en zona de clasificación y los rafaelinos para tratar de escapar del fondo en la tabla general.
Pese a esto el partido no despertaba y los minutos se hacían interminables para los aficionados que, casi en silencio, seguían lo que pasaba en el campo.
Recién a los 34’ Gimnasia tuvo su primera aproximación al arco rival. Fue con un remate de Matías Padilla que se fue lejos pero pareció ser el momento en que el 10 despertó. Se encendió Padilla y sabemos lo que sucede cuando este jugador aparece en cancha. Gimnasia tuvo 10 minutos de muy buen nivel y comenzó a crearle serios problemas al fondo de Ben Hur.
Enseguida Mauro Quiroga se escapó por derecha y Maitini obvió un claro penal que le cometió Nieva enganchándolo dese atrás. Incluso amonestó al goleador del Lobo quien así llegó a su quinta tarjeta.
Esto no molestó a Gimnasia que tuvo en los pies de Walter Bravo otra posibilidad en un tiro libre que Bossio mandó al córner no sin dificultades.
Gimnasia era una tromba sobre el arco de Bosio y en otro tiro libre llegó la posibilidad del gol. Gran ejecución de Matías Padilla pero el palo salvó a Bossio. Atropelló Quiroga pero Miranda la mandó al corner con el codo. Penal y Padilla que lo cambió por gol con muy buena ejecución. Bosio fue hacia su derecha y la pelota entró mansamente por el otro palo.
Justicia en el marcador porque, en esos 10 minutos, Gimnasia tuvo un fútbol de alto vuelo que merecía tener su premio en la red.
Lo perdonó
En el complemento pareció que Gimnasia tenía todo controlado para definir el partido, pero, el dominio del juego que tenía, no lograba plasmarlo en jugadas de riesgo. Pareció existir algo de suficiencia en algunos jugadores y entonces llegó el tiempo de Ben Hur.
Con los ingresos de Jaime y Peralta Pino la visita puso mucha gente en ataque y comenzó a controlar el juego en la misma medida que Gimnasia decaía en el rendimiento de algunos de sus jugadores, principalmente de la mitad de la cancha.
Entonces todo recayó en los tres del fondo –muy bien Fassione y Valente- y en ls respuesta de Diego Rougier cuando Ben Hur lograba sortear la firme defensa del Lobo.
Y en uno tuvo que trabajar en un gran tiro libre de Jaime que contuvo contra el palo o en un mano a mano tras gran jugada de Valiente que lo dejó de cara al gol a Baudino. El uno del Lobo tapó con gran jerarquía para salvar al Lobo.
Fue lo único de la visita que atacó mucho, tuvo también mucho en su poder la pelota pero no creó situaciones de gol en la misma medida.
Y tanto ir dejó espacios que recién en el final el Lobo pudo aprovechar. Por dos veces se lo perdió Mauro Quiroga ante perfectos achiques de Bossio. Pero la tercera fue la vencida. Corrida de Alvarez quien asistió a Mario Costa que no pudo definir pero sí tocar para la entrada de “la joya” que definió con toque suave para desatar l alegría y confirmar un resultado que el Lobo necesitaba más que nada.
Se ganó, se dedicó el triunfo al lesionado Juan Monge y se sigue en zona de clasificación entre las cosas para destacar, según se desprende de lo informado por los amigos de La Calle. El fútbol sólo apareció en cuenta gotas y eso es lo que debe preocupar.
El resto
En el otro encuentro de este domingo empataron 0 a 0 Juventud de Pergamino y Unión de Mar del Plata. Mientras que la fecha se completa este lunes con el partido que disputarán en Tandil, desde las 21, Santamarina vs. Rivadavia (Lincoln) con arbitraje de Carlos Boxler.
La tabla y lo que viene
Hasta ver qué ocurre con el duelo de bonaerenses la tabla refleja estas ubicaciones: Patronato 19; Santamarina 18; Rivadavia 17; Gimnasia 16; Ben Hur 11; 9 de Julio 9; Juventud y Unión 6.
Por la 11 fecha, se enfrentarán: Unión (Mar del Plata) vs. Rivadavia (L); Patronato vs. Santamarina; Sp. Ben Hur vs. 9 de Julio y Juventud vs. Gimnasia y Esgrima.
Ladrones en La Histórica
La delegación de Ben Hur de Rafaela sufrió el robo, previo a la partida hacia el estadio Núñez, de un bolso que contenía la documentación de los jugadores, sobre todo los carnets que deben presentarse al árbitro para la confección de la planilla.
Por tal motivo, se radicó la denuncia policial lo cual produjo que el arribo a la cancha fuera a las 19,15. Tras la consulta al olavarriense Ezequiel Maitini (que fue autorizado por el Consejo Federal a jugar el partido más allá de esta lamentable circunstancia), hubo una demora de 10 minutos en el comienzo del encuentro.