Mundial de Rugby: Los Pumas mejoran en lo anímico pensando en Samoa
Pese al esfuerzo demostrado en los dicursos desde la caída en el debut ante Inglaterra, Los Pumas tardaron bastante más que las mencionadas 24 horas en sacarse de la cabeza el primer partido del Mundial. En términos de preparación física, la jornada de entrenamientos enfocados en Samoa comenzará el domingo y tendrá continuidad hasta el viernes, el día del partido. Lo mental sigue siendo una batalla de difícil tránsito.
“Costó más de 24 horas, pero creo que podemos decir que tenemos la cabeza 100 por ciento puesta en Samoa”, indicó el entrenador asistente Juan Martín Fernández Lobbe. Inglaterra quedó como un fantasma que ronda en el grupo y que los entrenadores intentan despejar.
A esta altura lo que quedó del partido ante La Rosa, además de las conclusiones, son los dos lesionados. Por un lado Juan Cruz Mallía, que entrena a la par aunque todavía la inflamación en el globo ocular derecho no desapareció y tiene algunos puntos por cicatrizar, llegaría sin inconvenientes y todo parece indicar que seguirá siendo el fullback del equipo.
De momento completa los entrenamientos con una camiseta rosa que se distingue en el primer golpe de vista: funciona como advertencia para evitar el contacto fuerte, ya que no está al 100 por ciento.
Distinta es la situación de Joel Sclavi. El pilar tiene una pequeña ruptura del cartílago en la zona intercostal y entrena en el gimnasio y comparte la entrada en calor con sus compañeros y algunos ejercicios de los que coordina el preparador físico Bradley Harrington. Utiliza una protección que de poco sirve en un partido.
Si el juego ante Samoa fuese este fin de semana, el Toro no llegaría ni a sentarse en el banco. Pero al contar con otra semana por delante confían en que podrá llegar en condiciones para los últimos 10 o 12 minutos del encuentro.
Los Pumas ensayaron el viernes, volverán a tener un día de descanso el sábado, y retomarán el domingo iniciando ese día la semana de preparación específica para trabajar el encuentro ante Samoa, pensando en las características del rival y en el planteo que llevará la Selección a Saint Etienne, donde no solo jugará su segundo partido en el Mundial, sino que además deberá procurar ganar para sostener las chances de clasificarse a cuartos de final.
Lo que evaluará Cheika desde el domingo es la posibilidad de meter mano en el XV que saque a jugar ante Samoa. Sin demasiadas novedades en la primera línea, acaso la posibilidad de que cambie el pilar izquierdo con el ingreso de Eduardo Bello.
Conforme con los segunda líneas, el australiano no modificaría ese sector y dispondría el ingreso en la tercera línea de Facundo Isa. Luego, hay al menos otros tres jugadores con posibilidades de ser titulares: Rodrigo Isgró y Juan Imhoff pelean un lugar entre los wingers y Lucio Cinti, para el centro.
El gran interrogante tiene que ver con el 9 y 10. Cheika involucró en la conducción a Santiago Carreras, un fullback reconvertido en apertura. De hecho ve con bueno ojos a Mallía para ese rol. Sin embargo el único de los 33 en ese puesto es Nicolás Sánchez, quien al borde de los 100 caps no tienen necesidad de demostrar su capacidad.
La incógnita es saber a qué altura está de su nivel y si podría sostener un partido completo. Carreras puede cumplir -aunque en ocasiones no pueda dar más que eso-, pero la imagen del último partido, con amarilla incluída por una entrada tardía, puede relegarlo al banco y ser la opción de reemplazo de Sánchez.
En ese sector, Gonzalo Bertranou tampoco estuvo fino a la hora de abrir el juego y la opción de reemplazo podría ser Tomás Cubelli, con una dinámica menos ordenada, pero aún más experiencia y una conexión con Sánchez que podría influir para el cambio completo de la pareja.