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La imbecilidad de ciertos humanos: sacaron del mar a un tiburoncito para tomarse fotos

Una señora, indignada, decidió devolver al mar a un tiburón bebé que había sido sacado del agua por turistas en las playas de Santa Teresita durante un fin de semana de verano bastante tranquilo en 2024. El curioso incidente, capturado en un video que se volvió viral en las redes sociales, mostraba cómo los visitantes se acercaban al pequeño tiburón para tomarse fotos.

La multitud rodeaba al animal marino, pero la situación tomó un giro inesperado cuando una mujer presente en la escena expresó su molestia y solicitó en repetidas ocasiones que devolvieran al tiburón al mar. Finalmente, ante la falta de respuesta, ella misma tomó la iniciativa y arrojó al tiburón de nuevo al agua.

El evento recordó a muchos el trágico suceso de 2016, cuando en la misma localidad de Santa Teresita, un delfín perdió la vida debido a la irresponsabilidad de un grupo de turistas que lo sacaron del agua con el único propósito de tomarse una selfie con el indefenso animal. La comparación entre ambos incidentes generó revuelo en las redes sociales y resaltó la importancia de la conciencia y el respeto hacia la vida marina durante las actividades recreativas en la playa.

El trágico incidente del delfín en Santa Teresita tuvo lugar el 17 de febrero de 2016, cuando un delfín bebé de la especie franciscana perdió la vida en las playas de Santa Teresita. El cetáceo, también conocido como delfín del Plata, es nativo del extenso estuario del Río de la Plata y de las costas del océano Atlántico en Sudamérica.

La lamentable situación se desencadenó cuando un grupo de turistas decidió sacar al delfín del agua con el fin de tocarlo y tomar fotografías, ignorando por completo las necesidades y fragilidades de esta especie marina.

A diferencia de otros delfines, la Franciscana no puede permanecer mucho tiempo fuera del agua. Su piel gruesa y grasosa le brinda calor, pero la exposición prolongada a la intemperie resulta en deshidratación rápida y, en última instancia, en la muerte del animal. En aquel momento, la Fundación Vida Silvestre destacó la imprudencia de los turistas y subrayó la importancia de respetar las características y hábitos naturales de la vida marina para evitar tragedias como esta.

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