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El científico Pedro Scalabrini tendrá una sala especial en el Museo Serrano

Notas, manuscritos y materiales de gran valor histórico y científico pertenecientes al investigador Pedro Scalabrini, estudioso de la naturaleza de la región, fueron donados a la provincia por su nieta, Matilde Scalabrini Ortiz. Sumados a los elementos que ya existen en el Museo de Ciencias Naturales y Antropológicas Antonio Serrano, configurarán la mayor colección existente referida a quién sentó las bases del pensamiento científico en Entre Ríos. El gobierno provincial proyecta una sala especial para albergar el patrimonio.

 

“Este material tan preciado llega justo en el momento en que hemos emprendido la impostergable tarea de poner en valor todos los museos de la provincia. La semana pasada reinauguramos la sala Quirós en el Museo de Bellas Artes, dotada de tecnología de primer nivel para conservar la obra de uno de nuestros pintores emblema. Ahora, en el terreno de la ciencia incorporamos este patrimonio que generosamente nos cede Matilde, al que le asignaremos un lugar especial dentro del Museo Serrano”, expresó el ministro de Cultura y Comunicación, Pedro Báez.

 

Matilde Scalabrini Ortiz estuvo en la provincia la semana pasada, participando de la apertura de un curso de formación política denominado Constructores del Movimiento Nacional y Popular, organizado por la cartera de Cultura y Comunicación. Allí realizó un repaso sobre la obra y la lucha de su padre, el pensador Raúl Scalabrini Ortiz. Antes, de visita en el Museo Serrano, entregó copias de manuscritos y apuntes de su abuelo Pedro Scalabrini y anunció su voluntad de aportar los originales de esos documentos y otros papeles en su poder, contenidos en seis cajas que fueron halladas en la biblioteca de su padre.

 

Ese material vendrá a sumarse a elementos relacionados con el naturalista que ya existen en la institución ubicada en calle Carlos Gardel 62, en Paraná, donde gran parte del patrimonio paleontológico allí exhibido fue aportado por el propio Scalabrini. A su vez, desde el Ministerio de Cultura y Comunicación se iniciaron gestiones para incorporar otras obras del científico que actualmente están en la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader).

 

“Ya estamos trabajando para reunir todo este material y pensando en el diseño de una sala especial dentro del Museo Serrano, para que este legado pueda ser conocido y disfrutado por entrerrianos y turistas. Es una acción más para revitalizar los museos de nuestra provincia, en el camino que hemos emprendido para que no solo sean disfrutados por nuestra gente, sino también para que se conviertan en lugares de visita obligada de quienes llegan a Entre Ríos, tal como sucede con los museos de todas las ciudades del mundo”, indicó Báez.

 

“La visita de Matilde nos ha causado una gran alegría. No sólo pudimos compartir con ella, de primera mano, vivencias y pensamientos de Raúl Scalabrini Ortiz, figura admirada por todos nosotros y además inspirador de muchas de las acciones que guían a nuestro gobierno, sino que nos conectamos también con otro grande de nuestra historia como Pedro Scalabrini, que vuelve a ser noticia en Entre Ríos gracias a la generosidad de esta gran mujer”, señaló Báez.

 

La visita

 

En un acontecimiento muy importante para la historia de la institución, Matilde Scalabrini Ortiz visitó el Museo de Ciencias Naturales y Antropológicas Antonio Serrano, ávida por conocer más sobre la labor realizada por su abuelo. Acompañada por el titular de la Editorial Entre Ríos, José María Blanco, mantuvo una charla con la directora del museo, Gisela Bahler, y recorrió la sala de Paleontología, la cual remite a las investigaciones de campo llevadas adelante por el destacado naturalista.

 

Además de una intensa actividad docente, Scalabrini efectuó una voluminosa tarea de recolección, clasificación y estudio de materiales fósiles provenientes de las barrancas del Paraná y otros sitios de la provincia. Gracias a este legado, la sala de paleontología del museo puede exhibir hoy sus colecciones.

 

Matilde Scalabrini observó emocionada una caja didáctica con material fósil recogido y clasificado por su abuelo que data de 1890 y dejó su firma sobre la reliquia.

 

El legado de Scalabrini

 

Pedro Scalabrini fue un naturalista y educador que a los 20 años llegó a la Argentina desde Italia. Nació en la ciudad de Como un 21 de diciembre de 1848. Fue profesor de Historia en el Colegio Paraná entre 1868 y 1870 y luego en la Escuela Normal del Paraná, fundada por Sarmiento.

 

La importancia de su obra científica se fundamenta en haber estudiado la fauna fósil del Paraná y comprender la importancia de ese horizonte paleontológico. Gracias a sus trabajos, hasta 1886 se habían determinado 82 nuevas especies. A estas tareas las realizaba junto a Juan Bautista Ambrosetti y Toribio Ortiz.

 

El naturista fue además fundador del Museo de Entre Ríos -también conocido como Museo Scalabrini- en 1884, donde se exhibía su trabajo sobre los fósiles recolectados en la zona y todo lo que luego enumeró en sus conocidas Cartas científicas, publicadas en 1886.

 

“Transformar la enseñanza de la historia natural, generalmente abstracta y cosmopolita, en concreta y nacional, perfeccionar el espíritu de observación por el examen de los objetos y de meditación por la composición escrita, estimular la afición por las exploraciones del territorio a fin de descubrir nuevas riquezas naturales, aplicar el trabajo manual a la restauración, dibujo y molde de objetos interesantes o raros, vivificando el naciente espíritu artístico, científico o industrial de los jóvenes son, entre otros, los objetivos que he tenido en vista al formar este museo”, escribió Pedro Scalabrini. En 1890 renunció a la dirección del museo y la institución cerró en 1904. Hoy esos materiales forman parte de las importantes colecciones que conserva el Museo Antonio Serrano.