Confirmado: Antes de Productos Esenciales hubo aumentos hasta el 20%

Dos de cada diez productos incluidos en el listado de Productos Esenciales tuvieron un incremento superiores al 10% antes de “congelar” su precio por 180 días. Comparando precios que tenían en marzo los artículos que integran la canasta de 64 P.E., con el valor que tiene en las góndolas actualmente, el informe destaca que el 20% de los productos aumentaron hasta un 5%, mientras que el 58% de ellos tuvo incrementos entre 5% y 10%. Así, 78% de los artículos movieron sus valores por debajo del 10%.

 

Por su parte, un 7% de los 64 Productos Esenciales registró aumentos entre 10% 20% en sus precios, y el 15% restante subió más del 20%. Desde una empresa que participa del programa señalaron, en tanto, que “antes de anunciarlo dieron un aumento general promedio entre 3 y 4%”.

 

Entre los productos que más aumentaron sobresalen galletitas obleas, yogures, azúcar y aguas sin gas, mientras que en el otro lado de la escala, aquellos productos que tuvieron menos movimiento de precios fueron mermeladas, yerbas, galletitas tipo crackers y galletitas con cereales.

 

El informe de la Consultora Nielsen, experta en esta clase de análisis, agrega que de los 64 productos de la canasta sólo 45 “estaban activos” en cadenas de supermercados e hipermercados, y destaca que la venta de los Productos Esenciales sólo representa el “2,6% de la facturación del total de las categorías en las que están incluidos”.

 

Productos Esenciales, que se desarrolla en el marco de Precios Cuidados, comenzó el pasado lunes 29 de abril, con “muy buen cumplimiento”, según señaló el secretario de Comercio Interior, Ignacio Werner. El primer día del programa los fiscalizadores oficiales indicaron que hubo un cumplimiento del 72,3%, que se supone fue mejorando con el correr de los días, a partir de un abastecimiento cada vez más aceitado.

 

“Lo que ocurrió la semana pasada y ésta es que los pedidos de los supermercados crecieron notablemente, casi que se duplicaron”, señaló una fuente de una industria alimenticia. La explicación es que los supermercados “están queriendo armar su propio stock para no depender de qué pase con los proveedores, por lo menos durante este primer mes” de Productos Esenciales.

 

En parte, según El Cronista, esto respondió también a la estrategia de la Secretaría de Comercio Interior, de juntarse con cada industria y los supermercados y pedirles que “el arranque tiene que ser exitoso”.