Clausura de AFA: Astrada no halla la fórmula
El Decano y el Millonario, dos de los equipos con menos goles a favor, igualaron 0-0 en un partido que se despertó sólo por momentos. Ortega desperdició dos chances muy claras para la visita, que ya suma cinco sin ganar. El local está cada vez más complicado en los promedios. Discreto 0-0 entre Banfield y el Muletto de Vélez. Lanús y Central también bajo 0 en el Sur.
Atlético Tucumán necesitaba ganar su primer partido en el Clausura para engrosar su paupérrimo promedio, mientras que River debía dejar atrás una racha adversa de cuatro derrotas consecutivas pensando en la próxima temporada y en la continuidad de Leonardo Astrada. En definitiva, dos de los peores equipos del campeonato entregaron un 0-0 que sólo fue emotivo por momentos.
El conjunto visitante tomó la iniciativa en el arranque del encuentro y se adueñó de la pelota a partir del muy buen trabajo del debutante Cirigliano y de Almeyda, y de la movilidad de Ortega, quien sin embargo se mostró algo impreciso con la bola en los pies. Los problemas del local para hacer dos pases seguidos le dieron tranquilidad al Millonario para acomodarse y jugar.
Claro que al equipo de Núñez todo le cuesta muchísimo y pese a tener bastante tiempo el control, llegó poco y nada. Se arrimó con un remate de Abelairas y con otro de Cirigliano, aunque ambos fueron controlados sin inconvenientes por Ischuk. Lo mejor de River apareció cuando se animó a cambiar el ritmo, en sólo dos o tres avances.
A los 20, Mauro Díaz salió de su laguna, encaró, chocó contra la defensa local y el rebote quedó en los pies de Ortega, quien intentó gambetear al arquero y perdió. Y a los 45, el Burrito recibió de frente al área y buscó con inteligencia al joven enganche, aunque Ischuk llegó a tiempo con el pie para cortar el pase y despejar el peligro.
La línea de tres millonaria, integrada por Nico Sánchez, Ferrero y Quiroga, trabajó muy bien y no sufrió, más allá de un zurdazo lejano de Pereyra que le quemó el pecho a Vega. Al Decano le costó horrores hacer equilibrio en el medio, asociarse arriba y generar riesgo.
La visita volvió a pararse más adelante en el inicio del complemento y a los tres minutos generó la primera de riesgo con un derechazo de Díaz que se fue muy cerca. Pero apenas fue un espejismo, ya que el Millonario se quedó físicamente y le cedió el terreno a Atlético Tucumán. ¿Qué hizo el Decano? Apretó con ganas, aunque con pocas luces.
A los 11, el ingresado Montiglio tiró un centro rasante y Gigliotti la punteó por arriba del travesaño ante un estático Vega. Y a los 23, la Pulga Rodríguez probó desde afuera del área y su disparo se perdió a un metro del poste derecho del arquero visitante. Eran sólo aproximaciones, ya que al Decano le costaba muchísimo asociarse y quebrar a la defensa visitante.
Pero en el mejor momento de los tucumanos, cuando apostó a ganador y se fue con furia arriba, se produjeron de contra las mejores chances para River. A los 27, Ortega partió habilitado y decidió picarla desde muy lejos en lugar de encarar a Ischuk, mientras que a los 28 tuvo un mano a mano inmejorable y definió sin precisión.
Sobre el cierre, Atlético fue a buscar el triunfo e inundó de centro el área de Vega, pero los centrales millonarios despejaron absolutamente todo. La última fue nuevamente de contra para la visita: a los 43, Abelairas tiró un muy buen centro desde la izquierda y Díaz, absolutamente solo en el segundo palo, cabeceó afuera. Fue 0-0. Previsible.
Banfield apenas sumó un punto ante el Vélez alternativo
El Taladro, que incluyó a todos sus titulares, igualó 0-0 ante los suplentes del Fortín en Liniers y quedó a cuatro unidades del líder Independiente. En un reñido partido, los arqueros Barovero y Lucchetti no mostraron fisuras. Somoza (ST 40m) fue expulsado en el local.
Banfield aprovechó que tendrá una semana más de descanso en la Copa Libertadores y visitó a Vélez con todos sus titulares para mantener vivo el sueño del bicampeonato local. Pese a que enfrente tuvo a una versión alternativa del Fortín, los dirigidos por Julio César Falcioni apenas pudieron empatar 0-0 y quedaron a cuatro unidades del líder Independiente. Por su parte, los de Ricardo Gareca ya pusieron la mente en el duelo del jueves ante Deportivo Italia de Venezuela.
Los planteos de ambos equipos estuvieron signados por el predominio de la presión sobre la creatividad en ataque. De esta manera, las llegadas a los arcos escasearon y la lucha en el mediocampo se presentó demasiado reñida. Vélez asumió la iniciativa y volcó todos sus avances por la franja izquierda con el adelantamiento del uruguayo Pablo Lima, pero no hubo conexión con la dupla de delanteros. A su vez, Banfield respondió con contragolpes muy poco profundos.
En ese panorama signado por la paridad, cada uno tuvo una chance clara para abrir el marcador durante la primera etapa. A los 15, Barovero le tapó un mano a mano claro a Ramírez, luego de un error en la salida del local. En tanto, a los 26 llegó el turno de Lucchetti, quien se lució al ahogarle el grito a Caruso.
En el arranque del complemento, Banfield coqueteó nuevamente con el primer tanto. El aguerrido Battión tomó una pelota en el borde del área y sacó un remate que Barovero atajó en dos tiempos. Poco después, Erviti tiró un centro desde la izquierda y Tobio estuvo cerca de hacer un gol en contra. Al visitante le sobraron las ganas para ganar, pero careció de juego asociado para destruir a la sólida estructura defensiva velezana.
Como respuesta a ese leve dominio del campeón, Gareca mandó a la cancha al zurdo Alvarez, quien le dio algo de oxígeno a los ataques tibios de Vélez. En la situación más clara del anfitrión, Lima afinó su puntería en un tiro libre y Lucchetti respondió enviando la pelota al tiro de esquina.
La expulsión de Somoza a cinco minutos del final potenció la ambición del Taladro, que soñó con esa ansiada victoria hasta el último pitazo de Pompei. Pese a tener a la mayoría de titulares disponibles, el Taladro no pudo marcar la diferencia ante un rival que guardó a sus mejores cartas para la Libertadores. La falta de fluidez para atacar y la sobria actuación de los arqueros terminaron de explicar el 0-0 en el Amalfitani.
Lanús no pudo quebrar a Central y hubo reparto de puntos
El Granate y el Canalla empataron sin goles en el Sur, en un partido de ida y vuelta que se tornó favorable para el local con la expulsión de Gervasio Núñez (ST 15m). Los de Zubeldía no pudieron prolongar la racha de cuatro victorias consecutivas, mientras que los de Madelón siguen en zona de Promoción.
Lanús y Rosario Central empataron sin goles en el Sur, por la 14ª fecha del Torneo Clausura. El Granate estuvo un poco más cerca que su rival, especialmente desde que se quedó con un jugador de más, pero no encontró los caminos y falló a la hora de la definición.
El primer tiempo fue entretenido y muy parejo, con dos equipos que se repartieron el protagonismo en el juego y que contaron con varias chances para abrir el marcador. Sin embargo, fallaron en la definición y se fueron a los vestuarios sin haber podido modificar el resultado inicial.
Los dirigidos por Luis Zubeldía exigieron en dos oportunidades a un Hernán Galíndez que respondió bien ante la arremetida de Santiago Salcedo y una media vuelta de Jorge Carrasco. El paraguayo también contó con un derechazo cruzado que salió muy cerca del palo derecho del arquero.
Los intentos de la visita fueron, en su mayoría, con disparos desde afuera. Los que estuvieron cerca fueron Gervasio Nuñez, quien además se perdió un gol con el arco libre, y Adrián De León, mientras que Agustín Marchesín se quedó con los intentos de Mario Paglialunga y Jonathan Gómez.
En el complemento las cosas cambiaron a partir de los 15 minutos, cuando Núñez se fue expulsado por un golpe sin pelota a Agustín Pelletieri. Los de Leonardo Madelón aguantaron como pudieron y sólo inquietaron con un cabezazo de Emilio Zelaya que tapó el arquero.
La obligación y la superioridad numérica hicieron que el Granate se fuera con todo hacia adelante, pero falló en la definición. Las más claras estuvieron en los pies de Marcos Aguirre, con un mano a mano que detuvo Galíndez, y un tiro libre de Salcedo que se fue muy cerca.
El empate le impidió a Lanús prolongar la racha de cuatro triunfos al hilo y lo dejó a seis de Independiente, aunque su mente está en el choque del jueves ante Universitario que definirá su pase en la Copa Libertadores. En Central el resultado no cayó mal, aunque sigue en zona de Promoción.