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Boca acusa, Independiente aclara

El dirigente de Boca José Beraldi reprobó la actuación de la Policía en Independiente. Dijo que los incidentes se podrían haber evitado y ratificó que harán una denuncia. Independiente admitió que usó barras para tareas de “seguridad”.

José Beraldi fue uno de los dirigentes que ayer sufrió la agresión de los hinchas de Independiente cuando intentaban salir por la única puerta disponible del estadio Libertadores de América para los hinchas de Boca -unos 4mil- producto del mal accionar de la policía de Avellaneda.

En diálogo con radio La Red calificó como “una locura” lo sucedido y ratificó la palabra del presidente de Boca, Jorge Amor Ameal, cuando dijo que denunciarán lo ocurrido.

Los dirigentes mencionados más Marcelo London y Juan Carlos Crespi sufrieron las pedrardas de los hinchas del “Rojo”, situación que terminó con varios heridos, autos marcados por los proyectiles y la tensión en su punto máximo.

Independiente ha sido protagonista la última semana por la violencia de sus hinchas en dos oportunidades, porque a lo ocurrido ayer se le suma el profundo corte en la cabeza del arquero Martín Silva, de Defensor Sporting, luego de que lo conectara una piedra lanzada desde la tribuna en instancias de la Copa Sudamericana.

En este sentido, Beraldi dijo que en Boca controlan a los violentos: “Nosotros no estamos teniendo problemas porque la gente no los genera. El día que tengamos uno tomaremos las medidas que tengamos que correspondan”, aseguró.

Y agregó: “La responsabilidad de que ingresen los barras es de la policía, si ellos los dejan entrar, que no nos pidan que los saquemos”.

Aclaración desde Independiente

El dirigente Cristian Matera dijo que Independiente contrató siete hinchas para vigilar los accesos en el partido ante Defensor Sporting. Acusó al Coprosede por la deficiencia en los controles y aceptó que la medida de convocar a los barras es “criticable”.

Matera argumentó por el canal TyC Sports que Independiente tiene “una capacidad limitada de acción” en materia de seguridad y acusó de la situación violenta a que “mucho tiene que ver con poderes del Estado que a veces no son lo rigurosos que debieran ser y no actúan con el todo el peso de la norma”.