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Zielinski no dejará un buen recuerdo

Tiene todo el derecho del mundo. Es un profesional y punto. Sean cuales fueren sus “códigos”, él no dirige por “sentimiento”. Lo hace por plata y cuanta más sea mejor, al igual que las condiciones de trabajo. Cuanta más calidad se le ofrezca, mayor su interés. Guste o no, esa es la realidad. Ricardo Zielinski dejó a Patronato, sin vueltas y sin importarle lo que opinen de él. Belgrano o cualquier otro club debe saberlo. Le puede pasar lo mismo. Él invocó “ciclo cumplido”. La experiencia sirve.

“Hay un desgaste lógico”, expresó Ricardo Zielinski. “Patronato debe seguir creciendo en el Nacional B, porque tiene gente para lograrlo. No tengo más que agradecimientos para la gente de Patronato; siempre hicieron el esfuerzo para resolver los problemas y trataron de armar un equipo para ser protagonista del torneo, más allá de las limitaciones presupuestarias que existieron, como sucede con cualquier club del interior que se suma a una categoría difícil y compleja”, añadió el dimitente.

“Me voy yo, pero queda un buen plantel, con gente sana, trabajadora y ganas de crecer en el Nacional B, en un torneo complicado, donde todos pueden ser rivales de temer. En poco tiempo le demostramos a los clubes del torneo de ascenso que Patronato es un rival de respeto, que está dispuesto a pelear los lugares de vanguardia y ese es el mejor legado que dejamos. Como sucede muchas veces en el fútbol argentino, los ciclos tienen un comienzo y un fin. Considero que mi etapa está cumplida en Patronato y no tengo más que agradecimientos a la dirigencia y al hincha que siempre nos acompañó. Y, humildemente, pido que lo sigan haciendo con el nuevo equipo técnico que asuma, porque Patronato se merece lo mejor, para seguir creciendo. Este es un equipo con futuro y solamente hay que demostrarlo”, consignó el desertor.

Sobre su nuevo equipo afirmó: “Si se hacen las cosas bien, ganando tres partidos seguidos, subís en la tabla. Hay una diferencia que no es enorme porque el torneo es muy irregular y nadie saca ventajas”.

Al mismo tiempo destacó: “Trataré de respetar la historia de Belgrano. La idea madre es respetar el plantel que viene jugando”.

Cabe acotar que Rubén Flotta (ayudante de campo) y Alfonso Meoni (preparador Físico) también se sumarán a Zielinski.

Primera reflexión en torno a ésta conducta del “Ruso”…Lo que pasó, pasó…Ya está… Esperemos que los dirigentes de Patronato hayan madurado de golpe (o a los golpes, como éste…), y que el próximo contratado no sea un “vende humo” u otro “ultra” profesional como Zielinski. Las experiencias deben servir. No se puede tropezar dos veces con la misma piedra. De lo contrario, sonará a obstinación, a terquedad, conductas que solo traen aparejados fracasos, a la corta, o a la larga…

Párrafo final para el gran negociado del fútbol argentino (o en sí mundial…). Uno, que no tiene la “cintura” de los dirigentes cordobeses, o que mamó otra formación en cuanto a principios, a valores, no logra entender como se puede contratar a un DT que abandona a otro equipo. Es como aquella paradója del amante que termina con la mujer del otro y tarde o temprano es engañado como en su momento él fue parte directa de la infidelidad inicial.

Es tan asombroso como ridículo. Respetamos a Zielinski. Pero está claro que si pudiera hacerlo, lo haría otra vez pues él concibe que su accionar se contempla a través de cláusulas, sean éstas valederas o no…Y el hincha, el aficionado, o hasta sus mismos jugadores ven como deja todo a mitad de camino sin ningún tipo de pudor. Clarísimo. Él es así. Y punto. Lo toman o lo dejan, opinión al margen.