Voraz incendio devastó depósito del bazar El Entrerriano

ANTICIPO.- Un incendio de inmensa magnitud se desató cerca de las 20 de éste domingo en un depósito de Bazar El Entrerriano ubicado en Avenida Almafuerte N° 839 de Paraná. El fuego causó pérdidas totales en el local –que atraviesa toda la manzana hasta calle Seguí– y produjo honda zozobra en el vecindario, en especial a la firma Valmotors, a una distribuidora lindera sobre calle Derqui y a un Parri-Pollo. A la medianoche dotaciones locales de Bomberos y de localidades adyacentes aún combatían las llamas. Galería de fotos exclusivas.

Presuntamente, un cortocircuito, sumado a la alta temperatura reinante, y las características de fácil inflamabilidad de los electrodomésticos, colchones, muebles y hasta vehículos existentes en el enorme galpón que atraviesa la manzana, habría desatado el siniestro.

De acuerdo a informaciones extraoficiales, el local habría recibido en las últimas jornadas numerosos artículos, en especial aires acondicionados, ventiladores y heladeras, pero días atrás también había robustecido el stock de piletas de lona/goma y muebles, como además motos y bicicletas, teniendo en cuenta las fiestas que se avecinan. O sea, en el recinto existían tres de los cuatro tipos de potenciales sustancias combustibles y/o inflamables.

Lo cierto es que las pérdidas son millonarias para el grupo empresario y el pesar se extiende al daño que el infausto hecho podría haber ocasionado en comercios adyacentes como la citada concesionaria de autos y un Parri-Pollo, aunque -al mismo tiempo- Cuestión Entrerriana pudo recoger el testimonio de varios vecinos que nos transmitieron diversas preocupaciones.

Algunos, lógica y visiblemente consternados por el futuro de sus viviendas adyacentes al galpón, cuyas paredes habrían soportado temperaturas inconmensurables de acuerdo al informe de Bomberos, y otros con la comprensible preocupación inherente a tantas horas sin luz con las consecuentes vicisitudes.

Sin hesitar que la angustia de los residentes de la zona implica no solo la incomodidad por todas las contingencias que trae aparejada el tipo de episodio, sino por trastornos vinculados a la imposibilidad de utilizar sus propios electrodomésticos para limpieza, mantenimiento de alimentos perecederos que requieren sí o sí frío, y/o hasta pérdida de horas de trabajo por precisar utilizar computadoras o herramientas diversas y ver infructuoso ese objetivo.

Lo peor fue que algunos vecinos que intentaron inicialmente ayudar, dejaron sus motos en la esquina del galpón (sobre Seguí y Dominicana) y  cuando volvieron a sus localizaciones se las habían sustraído. Del mismo modo, se dio una particular como lamentable coyuntura entre vecinos pretendiendo prestar auxilio y un personal de la empresa o familiar entendiendo que se iba a saquear el local lo cual produjo mucho disgusto en la comunidad de la zona, especialmente de colindantes de la esquina Seguí y Dominicana.

Personal policial confirmó no obstante, hubo malvivientes que intentaron llevarse electrodomésticos en pleno incendio, pero el ilícito no se pudo perpetrar justamente por la decidida intervención de los primeros uniformados que llegaron al lugar, ratificándose la postura de vecinos que enérgicamente repudiaron la intención y posteriormente el Grupo GIA que se apersonó y acordonó la zona junto a miembros del Comando.

Amén de los inconvenientes que sufrieron los bomberos para luchar contra las llamas, en cierta forma en desventaja a raíz de dificultades motivadas por falta de un flujo de agua constante, uno de los momentos de mayor angustia que se vivieron fue cuando los empleados de la concesionaria Valmotors se vieron obligados a sacar del interior a unos 50 autos que allí se encontraban, previendo que las llamas arrasen también con la agencia. Las modernas unidades quedaron en una especie de playón improvisado frente a la Estación de Servicio de Almafuerte y Ayacucho, surgiendo el rumor en las primeras horas del lunes que pudo haberse producido en la vorágine del episodio algún hurto.

Cerca de las 22.30 se había logrado circunscribir los focos ígneos dentro del galpón, y aproximadamente a las 0.30 ya estaba controlado con técnicas de enfriamiento y sofocación, evidenciando cada uno de los bomberos, inclusive viéndose a no menos de media docena de mujeres, una enorme actitud y valentía.

Restaban solo operaciones de base para extinguir algunos focos en el interior e iniciar seguramente en las primeras horas de la mañana de éste lunes, las pericias básicas de rigor y luego sí profundizar los análisis concienzudos para arribar a una conclusión sobre el por qué sucedió semejante incendio.

 

 Aclaración y agradecimiento

Cuestión Entrerriana estuvo desde las 21 y hasta las 0.45 en la zona del suceso, especialmente junto al portón trasero que da a calle Seguí. Allí realizó una cobertura fotográfica especial, logrando cubrir su cometido con una extraordinaria deferencia por parte del personal policial allí apostado y esencialmente de los bomberos de Paraná y de localidades vecinas como Aldea Brasilera, Oro Verde y Crespo, quienes no solo se prodigaron por facilitar nuestra labor sino que en todo momento se preocuparon por nuestra integridad.

También vecinos de la zona nos ofrecieron sus viviendas desinteresadamente para tener mejores tomas, aunque la falta de luz impidió óptimos reportes gráficos los cuales esperamos completar éste lunes en el transcurso de la mañana o tarde. AMPLIAREMOS.-