Peñarol le hizo precio a Sionista
ESPECIAL.- Peñarol llegó a sacarle 18 de máxima a Sionista y promediando el último chico se imponía por no menos de 12 puntos. El coach del campeón mandó a descansar a sus máximas figuras, apostó a los relevos, confió en ellos aún en la adversidad, y sacó un triunfo finalmente complejo por 87-83. El “Islas Malvinas” lució casi despoblado. Galería de fotos.
En el primer cuarto Peñarol manejó distancia promedio de 5/6 puntos con máxima de 8 a los 4 y medio (15-7), concluyendo por 5 (24-19).
En el 2°, el “Milrrayita” controló a los de Paraná con diferencia promedio de 7/9 puntos y llegó a sacar 11 (36-25), cerrando el período por 6 (44-38) con parcial ceñido de 20-19.
En el 3°, los de La Feliz aplastaron a los entrerrianos con un parcial de 23-13 que dejó el tablero 67-51 (por 16), habiendo tomado máxima de 18 y un margen promedio de 12/14 puntos.
Ya en el último período, hasta el minuto 6, Peñarol ganaba holgadamente con brecha promedio de 14 puntos. A partir de allí, en 2 minutos, Sionista colocó parcial de 0-10 para ponerse a 6 con todos los titulares del local descansando. No obstante el campeón cerró mejor y se adueñó de la victoria.
Martín Osimani, 16 puntos (2/2 en Libres, 4/8 de Dos, 2/3 de Tres, 7 rebotes y 6 asistencias) fue el mejor jugador del vencedor.
Otras piezas de clara valía: Luciano Massarelli, 17 puntos (5/5 en Libres, 6/10 de Dos); Martín Leiva, 12 puntos (6/9 de Dos y 7 rebotes); Leo Gutiérrez, 12 puntos; y Alejandro Diez, 10 puntos, y 6 rebotes.
Darren Phillip, 15 puntos y 10 rebotes, fue lo más destacable del vencido aunque lanzó un pobrísimo 4/13 de Dos.
¿Otros valores de la visita? Marcos Saglietti, 13 puntos; Jeremías Sandrini, 11 puntos; y Scott Rodgers, 14 puntos, aunque con un 4/10 de Campo.
Volver a empezar para el monarca
Peñarol salió decidido a reivindicarse por todos los males expuestos en los últimos cuatro juegos con decepciones incluidas. Rivero planteó una defensa dura que cerró caminos internos a Sionista y forzó situaciones de los paranaenses.
La consigna era contener, limitar a Darren Phillip. Clarísimo. Sebastián Svetliza, no demoró en leer ello y pidió minuto al escaparse a 6 el anfitrión de la mano de su dupla distintiva Leo Gutierrez y Martín Leiva.
La determinación tuvo eco en sus orientados y Sionista varió la actitud como la manera de atacar el cesto ajeno, en especial, evitando el tiro externo y poniendo énfasis en meter la bola abajo todo lo posible, teniendo por guía al pibe Jeremías Sandrini.
Claro que, enfrente estaba el monarca y en su feudo. Peñarol reforzó la clausura de sendas interiores y todo volvió a complicarse para los del litoral, creciendo el protagonismo de Adrián Boccia y el liderazgo de Martín Osimani.
Un triple de Ale Konsztadt pareció reafirmar la supremacía, sin embargo Phillip y Marcos Saglietti hallaron espacios para dañar.
El oficio de Ale Diez y Leiva sentenció el Capítulo 1 con un 24-19 que daba la sensación de ser elevado premio para los visitantes.
Se mueven los bancos
Fernando Rivero apeló a la rotación para evitar mayores desgastes pensando en lo que viene y su colega lo imitó, aunque el “Tulo” también resolvió apostar al “Laboratorio”.
Inicialmente, Diez y Massarelli promovieron brecha de 11, imponiendo claramente condiciones el Rey de Copas, no obstante las pruebas, los ensayos le jugaron en contra al coach que supo probar con una doble base (Osimani-Fabián Sahdi) y los forasteros, con la rebeldía de Saglietti, Martín Melo y Phillip, se acercaron peligrosamente.
El retorno de Gutiérrez y Leiva a priori no pudo frenar la sublevación paranaenses, hasta que sí regresó el rosarino Boccia y se asoció al goleador mítico cordobés para cortar con la avanzada del Centro Juventud, poniéndole el telón a los 20 con un 44-38 que esta vez sí ponía cerca con justicia a los de Entre Ríos.
Ya basta de experimentos…
Rivero se percató que necesitaba de nuevo a todos sus iniciales y entre Osimani, Leo y Leiva, más tributos de Massarelli promovieron la producción más aceitada de Peñarol en el partido.
Sandrini ya no era tan eficaz, Rodgers insinuaba pero no aparecía a pleno y Seba Uranga daba lo mejor, como siempre aunque ello era poco ante un adversario que cuando se decidía a arrasar, arrasaba, primero con una defensa de vigor y rigor puro, y luego con amplio repertorio aunque en especial con bombas de alto poder destructivo desde el perímetro.
El 23-13 en la etapa que cumplimentaba la media hora, transformaba el tablero en un 67-51. Eran 16 los puntos que debía descontar la visita para evitar otro revés y un cierre de Serie Regular como visitante realmente paupérrimo.
Casi, casi…
Hasta los primeros seis minutos, con Osimani y Massarelli de “Guardianes”, Peñarol controló cualquier propósito sedicioso de Sionista, que se apoyaba en Melo y Saglietti, o en la garra de Uranga y en un sagaz Juan Pablo Cantero que hasta allí poco había creado.
Rodgers se cargó el equipo al hombro y con 7 puntos consecutivos encendió la alarma en el banco de Rivero al acercarse Sionista a 6 con poco menos de 3 minutos para intentar la hazaña.
De todas maneras, Peñarol reaccionó a tiempo gracias a Diez, las corridas de Massarelli, el talento físico-técnico de Giorgetti en los dos costados (incluyendo un par de tapas sensacionales), más puntos oportunos de Konsztadt cuando Phillips se había juntado con Rodgers anunciando una revolución a la cual le faltó tiempo ya que el reloj le dio la derecha al campeón.
El 20-32 con el cual se finiquitó este capítulo dejó preocupado a Rivero por las diferencias que tiene en cuanto a su formación titular y sus sustitutos.
Para Svetliza la sensación de saber que SE PUEDE ajustar algunos detalles y aspirar a algo más que ser el PEOR en la Conferencia Norte.
Podrá haberle hecho precio Peñarol con los movimientos de Rivero, de hombres y tácticos, pero al menos afloró esa actitud CORPORATIVA que si se exhibiera con MAYOR REGULARIDAD le otorgará mejores resultados que las ambiciones SINGULARES y egoístas con las que a veces se ataca el aro ajeno.
¿Y Pau?… Cinco minutos. Muy poco tiempo en el cual no se vio nada de lo que ENTERO podría brindar. ¿Cómo llegará a los Playoffs? Sería estupendo que el coach lo clarifique.
Homenaje a Leo
Una de las notas destacadas de la noche fue el homenaje realizado a Leonardo Gutiérrez antes del comienzo. Domingo Robles y Jorge Muzzio, presidente y vice de Peñarol, acompañados por la esposa y los hijos del jugador, le entregaron sendas camisetas “Milrayitas” encuadradas.
Una con el número 1.000 bien visible, en referencia a los cotejos de Liga que cumplió el último fin de semana, y otra con el 2.000 en relieve, en alusión a la cantidad de triples que superó también frente a La Unión de Formosa.
La síntesis
PEÑAROL (Mar del Plata) 87 – SIONISTA (Paraná) 83
Peñarol (87): Martín Osimani 16, Alejandro Konsztadt 7, Adrián Boccia 8, Leonardo Gutiérrez 12 y Martín Leiva 12 (FI); Alejandro Diez 10, Luciano Massarelli 17, Gabriel Fernández 2, Fabián Sahdi 0, Franco Giorgetti 3. DT: Fernando Rivero.
Sionista (83): Jeremías Sandrini 11, John Millsap 7, Lucas Goldemberg 5, Sebastián Uranga 5 y Darren Phillip 15 (FI) Scott Rodgers 14, Marcos Saglietti 13, Juan Pablo Cantero 8, Martín Melo 5 y Ariel Pau 0. DT Sebastián Svetliza
Parciales: 24-19, 44-38 y 67-51. Árbitros: Pablo Estevez y Javier Sánchez. Estadio: Polideportivo “Islas Malvinas”.
Fuente: Gentileza de Sebastián Miliffi. Fotos Gentileza Demian Schleider / Prensa Peñarol y Carlos De Vita.-