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Paro bancario

El secretario general de la Asociación Bancaria, Juan Carlos Navarro, confirmó que este jueves no habrá actividad bancaria debido a una medida de fuerza que llevarán a cabo los trabajadores del sector.

 

El paro se definió ante “la falta de respuestas” en la negociación salarial, dijeron, al tiempo que adelantaron que este viernes resolverán las medidas de fuerza que instrumentarán la semana próxima. No acatarán la conciliación obligatoria que dictó el Ministerio de Trabajo de la Nación.

 

Los bancarios anunciaron la medida de fuerza en reclamo de que las entidades financieras realicen una oferta de incremento salarial “acorde con el 41 por ciento de aumento que registraron sus ganancias promedio” en el año, indicó el secretario general de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo, durante una reunión de gremialistas realizada en la sede de la Asociación Bancaria.

 

A su vez, indicó que “hay tres cuestiones principales” que generaron la medida de fuerza: el retraso salarial por la inflación, la decisión oficial de no elevar mínimo no imponible de Ganancias y las “ganancias siderales” de los bancos, que estimó en un 41 por ciento.

 

“Desde el 15 de noviembre que tratamos de evitar esta situación, pero nos vemos obligados ante la falta de un marco institucional adecuado que nos debería ofrecer el Ministerio de Trabajo” para negociar las paritarias, sostuvo, al tiempo que cuestionó “la “intransigencia” del sector patronal, que -aseguró- no accede a dar el aumento que reclaman los bancarios “pese a las extraordinarias ganancias que han obtenido, que fueron de un 41 por ciento”.

 

“Las cámaras empresarias no acercaron siquiera una propuesta. Queremos una suma de 1.800 pesos a cuenta de lo que se acuerde en paritarias”, sostuvo Palazzo, quien estuvo acompañado por el secretario de Prensa de La Bancaria, Eduardo Berrozpe.

 

Anuncio del Ministerio de Trabajo

 

Minutos después del anuncio del paro bancario, el Ministerio de Trabajo de la Nación dictó la conciliación obligatoria, pero Palazzo la consideró absurda y se mostró reacio a obedecerla.

 

“Es insólito que nos dicten la conciliación obligatoria, sobre una reunión a la que ellos mismos no convocaron. No la vamos a acatar”, adelantó el gremialista.

 

“La decisión (de la cartera laboral) es extemporánea e improcedente, mucho más cuando está en falta grave por haber suspendido las reuniones paritarias”, concluyó.