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“Me quiero ir…”: Eleni Varvitsiotis y su “inolvidable” entrevista

Eleni Varvitsiotis, la periodista griega que incomodó al ministro de Economía Hernán Lorenzino al preguntarle sobre la inflación en la Argentina, habló y se mostró muy sorprendida por la actitud del funcionario, que pidió abruptamente cortar con la entrevista y le rogó a su asistente: “Me quiero ir”.

“Nunca me pasó algo así”, dijo Varvitsiotis, y contó que tras cortar la entrevista con video, el funcionario dijo que estaba muy cansado y que continuaran la entrevista otro día. “Pero al día siguiente yo viajaba”, contó.

“En la calle todos me hablaban de la inflación, de que las cosas están muy caras, de que es una de las principales preocupaciones; no hubo un agente secreto que me mandó a preguntar sobre el tema”, contó la periodista.

Y luego, al hablar telefónicamente con TN, se rió de la respuesta de Lorenzino ante su pregunta sobre la inflación. “Pensaba que un ministro de Economía podía darme una respuesta, no imaginé que se iba a ir”.

Varvitsiotis estuvo en la Argentina durante 10 días a fines del año pasado. Llegó con un equipo de la televisión griega para producir un documental sobre la crisis económica de 2001 y sus similitudes con la situación que atraviesa su país. El informe incluyó reportajes al ex presidente Fernando de la Rúa, al ex ministro Domingo Cavallo y al ex titular del Banco Central, Mario Blejer, entre otros. El único funcionario del Gobierno que aceptó sus preguntas fue Lorenzino.

El video fue publicado recién ayer en el sitio de la cadena griega de noticias Skai TV, para la que realizaba el documental. “Lo contactamos por la crisis en Grecia, que tiene muchas similitudes con lo que pasó en Argentina en 2001. Y para nosotros es importante cómo es la economía argentina ahora, para ver si seguir el mismo camino o no”, explicó.

La periodista contó también por Twitter y Facebook los momentos incómodos que hizo pasar al ministro, explicó que hasta antes de esa pregunta él había sido “muy simpático”, y que “nunca” le había pasado algo así con otro funcionario, ni argentino, ni griego ni de ningún lugar del mundo.