La vocal del CGE, Susana Cogno, afirmó que la decisión que impide calificar con menos de 4 “fue debatida políticamente”
|La vocal del Consejo General de Educación (CGE), Susana Cogno, afirmó que la resolución que impide calificar con menos de 4 a estudiantes de escuelas secundarias “fue debatida políticamente”. “Una nota no define lo que un estudiante aprende o no aprende, el problema es mucho más grave”, señaló refiriéndose al anuncio de Bordet sobre la anulación de tal resolución.
El gobernador Gustavo Bordet anunció que dio “expresas instrucciones” al presidente del Consejo General de Educación (CGE), Martín Müller, para que “anule” la resolución que impide calificar con menos de 4 a estudiantes de escuelas secundarias.
Al respecto, la vocal del CGE y dirigente de Agmer, Susana Cogno, afirmó que dicha resolución es producto de una decisión “construida y debatida. No es que una firma algo sin mirar. Hubo un debate y políticamente se tomó esta decisión”.
“En nuestro caso, como trabajadores, hemos fundamentado que en el contexto en el cual estamos, una nota no define lo que un estudiante aprende o no aprende. El problema es mucho más grave”, advirtió.
“La firma que yo pongo en la resolución es una firma a conciencia porque entendemos que el sistema de evaluación es inherente al proceso pedagógico”, dijo luego y agregó: “La firmé a conciencia aun sabiendo que podía hacer ruido en algunos sectores que creen que la nota está vinculada a la meritocracia”.
“Firmé en función del criterio histórico que tiene Agmer: que nadie aprende repitiendo, que nadie aprende aplazado, que el proceso pedagógico es trayectoria y que la nota es una convención para asignar una valoración al proceso de aprendizaje”, explicó Susana Cogno.
“Pero tener una nota no responde al problema pedagógico que tiene la provincia, sobre todo en la educación secundaria, donde tenemos muchos menos estudiantes de los que deberíamos tener. Y eso no se va a arreglar con una nota”, apuntó.
Para la dirigente gremial, “la prioridad de la política de Estado de este gobierno debería ser la integración de los estudiantes al sistema educativo, acompañar las trayectorias escolares y definir que el proceso pedagógico no se basa en un número. Si le pusiéramos un número a las gestiones políticas, varios funcionarios estarían en graves problemas”, aseguró.
La dirigente Susana Cogno consideró que “la cuestión pedagógica de la evaluación -entendida como un proceso integral- es algo que los trabajadores de la educación hace muchos años que estamos debatiendo”.
“Sabemos perfectamente que en el contexto en el cual desarrollamos nuestra tarea, la evaluación es un proceso inherente al oficio del trabajador de la educación”, señaló. En este sentido, dijo que “muchas instituciones a lo largo de los años han establecido acuerdos en relación a cómo se puede llevar adelante el proceso de asignar una nota”.
“La nota es una convención, un punto de acuerdo entre los que trabajamos en el sistema educativo para poder asignar al proceso pedagógico una valoración”, indicó, al tiempo que calificó como “extremadamente deficiente” al sistema de notas porque “ningún número puede explicar cómo se vincula el estudiante con el mundo del conocimiento”.
Y enseguida manifestó que “estamos en el marco de transiciones normativas que son producto de la pandemia: durante el 2020 y el 2021 las notas fueron conceptuales porque estábamos en un proceso en el no se podían llevar adelante evaluaciones en los términos en los que se había hecho hasta el momento”.
“Hemos pasado por todo tipo de evaluaciones: hemos calificado con conceptos, hemos puesto muy bueno, sobresaliente, alcanzó, no alcanzó, aprobó, no aprobó. Hemos pasado de la nota al concepto y del concepto a la nota nuevamente a lo largo del tiempo”. En este marco, recordó que “en el 2021 tuvimos dos trimestres con valoraciones conceptuales y uno con nota, que fue el tercero”.
“Lo numérico es una concepción pedagógica que tiene sus pro y sus contras, y que ha sido discutido a lo largo de los años por los trabajadores de la educación. De hecho, muchas instituciones secundarias tienen sus acuerdos pedagógicos internos y no ponen aplazos en el primer trimestre. Eso es una decisión que es producto de los contextos”.
“En las escuelas de mayor vulnerabilidad los estudiantes tiene trayectorias de baja intensidad, interrumpidas y la nota no da cuenta de los procesos pedagógicos de esos estudiantes”, acotó y advirtió que “ser Gobierno y hacer responsable a la escuela del contexto en el que está es vergonzoso”.