Fabricaciones militares: confirman el cierre de la planta en Azul y buscan reubicar al personal
El Gobierno busca por estas horas reubicar a un tercio del personal de la planta en Azul de Fabricaciones militares (FM). Por orden del vicejefe de Gabinete, Gustavo Lopetegui, las autoridades ya se contactaron con frigoríficos, mineras y una fabricante de lácteos con la idea de que reabsorber en principio a 75 personas de la empresa conocida como FANAzul, mientras se evalúa jubilar por “riesgo laboral” a otras 30.
Se trata de gestiones aún abiertas porque dependen no sólo de la voluntad de los privados sino también de la negociación con los sindicatos, en particular ATE, que exige la reapertura de la planta y prepara protestas.
“Estamos trabajando para preservar las fuentes de trabajo en otros lugares, porque la empresa es inviable y la destrozaron llenándola de empleados”, dijo a Clarín una fuente del Gobierno bonaerense.
El objetivo es desactivar la emergencia laboral provocada por el cierre de la fábrica, que desde hace 72 años producía explosivos y pólvora en el municipio gobernado por Hernán Bertellys (Cambiemos).
El 28 de diciembre pasado, en vísperas de las fiestas, 230 trabajadores no pudieron ingresar a sus puestos, al encontrarse con un cartel: “La fábrica permanecerá cerrada hasta el 14 de febrero por cuestiones operativas”.
La decisión no tardó en abrir un fuerte conflicto, con un acampe que aún mantienen los despedidos frente a la municipalidad y una caravana que el miércoles pasado arribó al Ministerio de Defensa. Allí Lopetegui y su equipo mantenían una reunión con el interventor de FANAzul, Luis Riva, el subsecretario de Gobierno bonaerense, Alex Campbell, y el intendente Bertellys, quien presentó un plan de reapertura de la planta, una salida que el Gabinete dio de baja.
En su lugar, Nación, Provincia y municipio acordaron reubicar el personal, al menos un parte. Según pudo saber Clarín, los funcionarios negocian con el frigorífico de la zona EFASA para tomar a 45 y con Natural Beef para absorber a otros 20. Este último, que fue visitado por Mauricio Macri en agosto pasado, podría sumarse a las empresas que exportarán carne a China. En ese caso, según el Gobierno, podría crear 300 empleos nuevos. Los chinos inspeccionarán la planta en marzo.
Otras fuentes de empleo posibles son la fabricante de lácteos Luz Azul, donde podrían derivar otros 10 despedidos de FANAzul; y se espera una reactivación de la construcción por las obras de la autopista Azul-Buenos Aires, programada para este año, y en la cementera Loma Negra, ubicada en Olavarría. La prioridad en la lista serían los trabajadores más antiguos, con 11 años de experiencia, y su incorporación según los funcionarios sería “inminente”, si bien todavía no hay ninguna confirmada.
Pero por ahora, ATE rechazó la propuesta oficial y convocó nuevas medidas de fuerza, con cortes en las rutas 51, 3 y 226 este miércoles y jueves, día en el que además habrá una marcha.
“El último sueldo se cobró el 8 de enero, ahora en febrero los trabajadores no van a tener nada porque son contratados y no tienen indemnización. No queremos reubicación, sino reapertura”, dijo a este diario la secretaria general de la seccional Azul del sindicato, Vanina Zurita.
El complejo de Fabricaciones Militares fue creado en 1941 para proveer de material para defensa a las Fuerzas Armadas y de Seguridad. Pero, según Cambiemos, arroja un déficit anual de $ 2.500 millones y en 2015 sumó 111 empleados en Azul, sin aparente justificativo. Esa es la única planta que cerró, ya que las otras cuatro fábricas, incluida la sede central, siguen activas, aunque también registraron despidos.
En Santa Fe, la planta de Fray Luis Beltrán se deshizo de 245 puestos y la de Jachal, de 36; en Córdoba, hubo 29 recortes en la planta de Río Tercero y 30 en la de Villa María; y los cuarteles centrales en Capital Federal eliminaron 140 empleos a principios del 2016.
El caso de FanAzul llegó a la Justicia tras la denuncia que hizo Zurita el 31 de diciembre pasado por la falta de personal idóneo y clave en el mantenimiento y seguridad de la fábrica. Es que desde su cierre, el establecimiento quedó a cargo de 35 empleados de planta permanente y la custodia policial, quienes no habrían seguido el protocolo, que entre otras medidas prohíbe el ingreso de radios y celulares. “Hay un fuerte riesgo de explosión por los despidos”, advirtió la sindicalista.
En su presentación, Zurita señaló que efectivos de la Policía Federal fumaron y usaron un calentador de agua para tomar mate, cerca de los polvorines, mientras que en enero hubo un corte de luz por pruebas fallidas en el tablero de control, dos sucesos que atentan contra la seguridad. Lo mismo ocurre -aseguró- con la falta de personal preparado para manejar la autobomba en caso de incendio.
A raíz de la denuncia, el juez Federal de Necochea, Bernardo Bibel, inspeccionó semanas atrás la planta junto a la Agencia Nacional de Materiales Controlados e intimó a FM y la gerencia de la empresa a cubrir los puestos clave en todos los turnos con personal adecuado. Las autoridades lo resolvieron con el traslado a Azul de personal de Beltrán, calificado para fabricar municiones y chalecos antibala. “Lo chequeamos con el interventor y no hay riesgos”, afirmaron fuentes oficiales.