Es un buen momento para reformular el futuro del Parque Berduc
ESPECIAL (por Francisco Pancho Calderón).- No seguimos el vóley de Liga Argentina, sin embargo, hoy nos hacemos eco de una coyuntura que, si bien afecta al plantel Superior de Echagüe, dignísimo representante entrerriano en las Series Finales de la LAF, en realidad ha causado una pronunciada convulsión en el ambiente deportivo de la capital provincial. Una noticia volcada en El Diario, reformuló viejas críticas hacia la administración del Parque Escolar Enrique Berduc.
El medio gráfico paranaense divulgó un informe en el cual se narra que las jugadoras de alto rendimiento de Echagüe no pudieron entrenarse porque la directora del Parque Escolar Enrique Berduc se lo impidió.
Según el entrenador Fernando Zapata, dialogó con Ana Montero, directora del Establecimiento infructuosamente. “Le hice mención a que desde el club se presentó la nota de solicitud correspondiente y que nunca tuvimos inconvenientes hasta ahora; también que nosotros pagamos por usar el lugar. Ella se cerró en su postura y nos trató de muy mala manera”, relató el coach.
“Nos dijo que si no teníamos llave no podíamos entrar, le contesté que nunca tuvimos una, que nos abrían los encargados del lugar. También le expliqué que nos estamos jugando cosas importantes para el voleibol de la ciudad, a lo que respondió con más bajeza”, amplió Zapata.
Ante esta situación, las jugadoras se retiraron del lugar e intentaron, en vano, comunicarse con el titular de la APV, Jorge Ruiz Díaz, y encontrar un lugar en su club. Finalmente, a cuatro días de viajar a jugar los Playoffs, se quedaron sin entrenarse en un hecho vergonzoso que deja mal parada a la precitada funcionaria, a la misma Asociación, e indirectamente al Consejo General de Educación.
Ruiz Díaz minimizó la problemática expresando “debió haber un malentendido” y acotó una frase peculiar: “Seguramente Ana tuvo un día complicado y no reparó en que las chicas tienen autorización para entrenarse en ese horario”, dijo, en charla con los colegas de El Diario. Increíble, pero veraz.
Ana Montero tiene la palabra. Pero no solo ante esta compleja situación planteada: a) la negativa a que las chicas del AEC entrenen; b) el presunto MAL TRATO al entrenador Zapata; c) el desconocimiento a la metodología instrumentada para cumplimentar el acuerdo preexistente.
Es que por lo propagado a nivel periodístico y luego reproducido en Redes Sociales como Facebook, Montero termina siendo depositaria de durísimas críticas hacia su gestión, inclusive, concomitantes al uso del Parque (o abuso) en materia de eventos políticos.
No queda la menor duda que la profesora deberá salir a la palestra para DEFENDERSE y ACLARAR todo este confuso panorama.
Reflexión
Hoy, se inculpa a Ana Montero. Lo que en realidad debería plantearse la comunidad deportiva paranaense es QUÉ PASÓ con tantos proyectos, con tantas ideas, con tantos ANUNCIOS de MUY VIEJA data en cuanto a la creación de un Centro de Alto Rendimiento Deportivo en el Parque Escolar Enrique Berduc, con la reinstalación de organismos gubernamentales del Deporte Municipal y Provincial.
Pasaron funcionarios y NADA se hizo. Solo algunas inversiones importantes de REACONDICIONAMIENTO y TODO siguió IGUAL.
Es paradójico que hace pocos días se haya lanzado la Federación Entrerriana de Deportes y en tantos años ACLUDEPA no haya podido siquiera INFLUIR en que se concreten tantas vanas PROMESAS.
Basta repasar archivos de los últimos 15 años para observar cuántos anuncios hubo, y NADA se cristalizó en cuanto a los mismos. Sí, repetimos, hubo REFACCIONES, BÁSICO MANTENIMIENTO, pero ni siquiera se logró desterrar DEFINITIVAMENTE la INSEGURIDAD de ese sector ubicado a escasas cuadras del microcentro de Paraná.
Admitimos, reconocemos, los esfuerzos aislados, las voluntades, las predisposiciones, pero SOLUCIONES DE FONDO NO HUBO, MUCHO MENOS TRANSFORMACIONES como las lanzadas en un par de oportunidades con bombos y platillos.
¿Qué quedó de esos proyectos? ¿De esos estudios? ¿Fueron palabras VANAS?
“Dios y la Patria os lo demanden…”. Ya es tiempo que el PUEBLO demande a quienes prometen Y NO CUMPLEN. Y más grave todavía, a los que NO PONEN LA CARA Y HABLAN CLARO.