En el último año los despidos se multiplicaron por seis
Diciembre cerró con un nuevo impulso de los despidos de personal en el agregado de todo el país: “se incrementaron 49,9% anual. La mayor parte, el 62%, se localizó en el sector privado, en un amplio abanico de actividades, como la industria, el petróleo, el comercio, la construcción, el transporte, la prensa y las comunicaciones”, informó la consultora Tendencias Económicas y Financieras que dirige el economista José Luis Blanco.
El relevamiento, alimentado por denuncias sindicales informadas por los medios gráficos de mayor circulación del país, registró 8.157 desvinculaciones de personal de las empresas y organismos del Estado, 2.700 más que las detectadas en igual período del año previo.
Explica el informe privado que dentro de la industria, se destacaron las cesantías en alimentos, química, textiles y calzado, los cuales junto a los ocurridos en el área de los servicios particulares representaron el 62% del total. El 38% restante se localizó en el sector público, principalmente en la administración pública y en menor medida en comunicaciones y municipios.
Del listado de las cesantías en el último mes del año sobresalen dos casos: 3.000 en el Ministerio de Educación, de los cuales aclara en nota al pie que “2.600 corresponden a contratos temporarios a término de tutores” y 1.700 de petroleros que se desempeñaban en YPF Neuquén.
Después de una brusca desaceleración del ritmo de los despidos en una economía que nunca terminó de despegar, pese a la eliminación de la mayor parte de las ataduras que tenía en el plano doméstico, desde los picos alcanzados en el primer bimestre de 2016, hasta el comienzo del tercer trimestre, se asistió a un nuevo impulso, aunque claramente concentrado en pocos rubros.
De ahí que el año concluyó, según Tendencias, con poco más de 194.500 cesantías, que significaron multiplicar por 6,1 los registros de 2015, cuando afectaron a unas 32.000 personas.
De todas formas, en el Ministerio de Trabajo, que no sólo cuenta con datos de las desvinculaciones de personal, sino también de las incorporaciones en la economía en su conjunto, resaltan que sobre una nómina total registrada de 12 millones de personas hasta octubre, se destruyeron poco más de 26.000 puestos. De ahí surge que prácticamente se reubicaron unas 170.000 personas en el curso del período.