El gran fracaso de Arduh
ESPECIAL.- Al “Turco” Osvaldo Arduh le dieron todos los gustos en San Francisco, le armaron uno de los planteles más caros del TNA y el objetivo de lograr el ascenso para San Isidro quedó trunco con la inesperada y dura caída en el primer cruce de Playoffs ante Echagüe. Lo del “Señor Ascenso” y terminó de manera abrupta y rápida la temporada 2015/2016 del TNA como el “Señor Fracaso”.
El entrenador arribó al club de calle Corrientes con todos sus pergaminos, que no le sirvieron de nada ya que el equipo nunca tuvo una identidad de juego definida y los cambios en la “reestructuración” del plantel no dieron resultado.
En síntesis: una dolorosa eliminación en cuartos de final frente a Echagüe, que se impuso 3-1, y dejó fuera de combate a los “Halcones Rojos”, que vieron como el sueño ascender se esfumó demasiado rápido.
Arduh -uno de los técnicos mejores pagos en la Segunda División del básquetbol argentino- entró en la historia el club “Santo” ya que realizó la peor campaña desde el regreso de San Isidro al TNA, con el pequeño detalle que armó una de las mejores plantillas de la categoría, con jugadores de jerarquía.
Cuando se obtienen resultados positivos o se logran ascensos, el mérito siempre es repartido, como así también cuando se fracasa en el intento de lograr el ascenso a la Liga A -el gran objetivo de San Isidro-.
Por eso, los responsables de esta penosa eliminación son el cuerpo técnico, los jugadores y dirigentes. Lógicamente que repartir el porcentaje de responsabilidad de cada una de las partes es complejo y subjetivo.
Pero en esta temporada el papel del entrenador fue clave para que el “Santo” se despida pronto de los Playoffs por sus decisiones polémicas en cuanto a la reestructuración del plantel.
Desde el comienzo de temporada (hay que recordar que en la pretemporada Arduh “cortó” a José Peralta para traer a Aristu) se sabía qué el punto débil de San Isidro iba a estar en la zona pintada por la escasa altura que había dentro de la plantilla. Igualmente, los resultados acompañaron, la jerarquía de los jugadores sacaba los partidos adelante, pero con el correr del torneo el funcionamiento del equipo fue empeorando.
Unos días ante de Navidad, Arduh decidió “cortar” a Essengue -tal como había anticipado que podía llegar a suceder LA VOZ DE SAN JUSTO- pero el camerunés al final no se fue por una cláusula que tenía en su contrato.
El juego del interno -que brilló en Quilmes de Mar del Plata- fue mejorando, pero al final al “Turco” se salió con la suya y pudo “cortar” a Essengue.
Además, el DT se cargó con otra polémica y cuestionable decisión: echó al base titular Damián Palacios. Entonces se sumaron a San Isidro el joven armador Martín Cabrera, el escolta Federico Mansilla (casualmente dos ex-Instituto) y el interno Terrance King, tres buenas personas y excelentes profesionales, pero en cancha Cabrera y King no estuvieron a la altura de las circunstancias -Mansilla rindió bien algunos partidos-, los tres llegaron muy encima de los Playsoffs y quizás les costó adaptarse al juego del equipo.
Al parecer por los resultados fue una mala decisión de Arduh haber cortado a dos basquetbolistas de calidad como Essengue y Palacios aunque nunca sabremos hasta donde hubiera llegado San Isidro con ellos dentro del plantel.
Un párrafo aparte merece la situación que le tocó vivir a Daniel Pérez con Arduh.
Pérez es profesor y preparador físico histórico del club de calle Corrientes, y además de ser un excelente profesional, es una gran persona. Pero el “Turco” lo comenzó a ignorar en los entrenamientos, en el último tiempo ya ni lo dejaba realizar la entrada en calor hasta que finalmente el “Dani” Pérez terminó siendo desplazado de las prácticas del equipo de TNA y solo estaba en los partidos oficiales para firmar la planilla.
Volviendo a la competencia, llegaron los Playoffs y San Isidro, por haber terminado tercero en la Zona Norte, esperó rival de Cuartos de Final. Le tocó Echagüe, donde los “Halcones Rojos” -por plantel, campaña y jerarquía de plantel- eran los grandes candidatos para avanzar.
Pero, el “Negro” paranense ganó con gran personalidad el juego 1 en el “Severo Robledo” y luego en su estadio se hizo fuerte ante un desdibujado San Isidro -que extrañó a Bruno Barovero- y que terminó quedando eliminado de manera temprana y sorpresiva.
Hay que dejar en claro que Echagüe (terminó octavo en la Conferencia Norte) no son los Golden State Warriors de la NBA ni tampoco Lisandro Ruiz Moreno se parece a Stephen Curry. El elenco de Paraná es solo un buen equipo, nada más.
San Isidro lo enfrentó cuatro veces en la Fase Regular y le ganó tres partidos. Lo que sucedió es que los “Halcones Rojos” lo dejaron agrandar en el cruce de cuartos de final y nunca le encontraron la vuelta al elenco de Ignacio Barsanti, que se hizo muy fuerte en los rebotes con sus jugadores internos, y además del alto nivel de Ruiz Moreno, en tanto que el “Rasta” Carnovale también tuvo un positivo aporte.
Que los jugadores de San Isidro hayan dejado todo dentro de la cancha no alcanza, porque eso es algo que se da por descontado en basquetbolistas profesionales. Hay que analizar más el juego, los errores defensivos y los ofensivos, las decisiones del entrenador (Lozano jugó solo cinco minutos el último partido!), como así también el funcionamiento colectivo, que dejó mucho que desear.
Sorprendentemente el pibe Matías Gómez no fue tenido más en cuenta cuando durante la fase regular mostró personalidad y además aportó puntos y una férrea defensa cada vez que le tocó ingresar. Además, Arduh no promovió ningún juvenil del club, como por ejemplo a Ignacio Pérez o Federico Andereggen.
El “Turco” Arduh, a pesar de haber traído a medio Instituto, nunca pudo hacer funcionar a este San Isidro con aquel equipo de la “Gloria” que desplegó un básquet de alto vuelo y logró subir a la Liga Nacional A.
Los “Halcones Rojos” volaron bajito en esta temporada del TNA, donde la mayoría pensaba que iban a ser grandes protagonistas, pero se fueron rápido y el gran responsable de este fracaso deportivo fue Osvaldo Arduh.
Una pena esta eliminación de San Isidro para el deporte de la ciudad y por los hinchas del “Santo”, los que colaboran día a día y los que van a la cancha a alentar. El básquet siempre da revancha y próxima temporada se podrá ir en busca del anhelado ascenso a la Liga Nacional A.
Fuente: http://www.lavozdeportiva.com.ar/noticia/el-gran-fracaso-de-arduh-1374 Foto: Gentileza Diario La Voz de San Justo.-