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Chicos santiagueños trabajaban en cosecha de arándano

La presencia de menores en el lugar fue detectada por un inspector del Sindicato de la Fruta, quien aseguró a un diario de la mencionada provincia que los niños llegan engañados desde otras provincias y utilizan documentos falsos para intentar eludir los controles.

Carlos Velásquez, inspector de fiscalización del Sindicato Obrero de la Fruta, reveló que “hay detectados más de 10” chicos cuya identidad fue falseada para cosechar arándanos sin problemas con los controles estatales; pero estimó en “más de un centenar” la cantidad de menores de edad trabajando en esa condiciones”.

“Estos operativos comenzaron hace muy pocos días y se van a seguir realizando todo el año porque la temporada del arándano son dos meses y medio donde más preocupa; pero también existe en el trabajo cítrico, los que van a la poda, la gente que utiliza a estos menores para los trabajos en las zonas rurales”, anunció Velásquez. Apuntó que en esas zonas “ellos (por los empresarios) se creen que la mano de la Justicia, de los organismos, no va a llegar”.

El inspector sindical detalló que en los operativos se habrían encontrado con chicos de las provincias de Misiones, Chaco y Santiago del Estero. Indicó que los adolescentes “lamentablemente no saben dónde están; los cargaron en un colectivo, en un camión y los trajeron acá y los abandonaron, los hacen trabajar”. Precisó que “el mismo que los trae les vende la comida”, planteando que “es total esclavitud”.

“Por las líneas investigativas que estamos tomando, en este momento no podemos dar información de donde se realizó el operativo. Esta es una investigación que tiene más de un año”, dijo el inspector.

Agregó que “se ha pedido a la Justicia Federal para que libre exhorto” y que de esa manera “seguir con los operativos y producirse allanamientos en los próximo días”, anunció.

No obstante, en declaraciones al sitio Diario Río Uruguay, indicó que los operativos fueron en fincas, donde los contratistas habrían reclutado a menores de 15 años para ponerlos a trabajar bajo una doble identidad. Dichas empresas contratistas “están por fuera de la ley, no pagan la obra social, no pagan los aportes a la AFIP, no pagan nada”, remarcó Velásquez.

Teniendo a los adolescentes con una doble identidad, al momento de afrontar una inspección de control laboral “dan una identidad falsa, con una edad falsa, dicen que son mayores”, detalló.

A ello sumó que “en los momentos del operativo los tienen amenazados a los chicos y por eso que se nos hace más difícil”. Expresó además que las víctimas “lamentablemente, son criaturas de muy bajos recursos”.

Finalmente, consideró que “el Estado tiene que ser muy rígido con estos delincuentes que están usando a las criaturas con doble identidad para sacar recursos económicos”.