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Bauer defendió las asignaciones específicas para la cultura en la inauguración de la Feria del Libro

Con la presencia del ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, su par de la ciudad de Buenos Aires, Enrique Avogadro, el presidente de la Fundación El Libro, Ariel Granica, el escritor Guillermo Saccomanno, la coordinadora de objetivos y programas de La Habana, Tatiana Viera Hernández, escritoras, escritores, y editores quedó inaugura la 46ª edición de la tradicional Feria.

“Estamos verdaderamente felices de volver a compartir este irremplazable ritual de encuentro. Nuestra preocupación principal fue mantener encendida la llama de la cultura realizando una inversión histórica de más de 29.500 millones de pesos para acompañar y apoyar a artistas, trabajadoras y trabajadores de la cultura, artesanos y artesanos, centros culturales, salas de teatro y organizaciones comunitarias, y a los distintos sectores de las industrias culturales”, destacó el ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, durante el acto inaugural que se realizó el 28 de abril.

“En el caso de la industria editorial, el gobierno nacional lleva invertidos más de 3.900 millones de pesos destinados a editoriales, bibliotecas, librerías, ferias del libro, escritores, escritoras, libreros y libreras, traductores, ilustradores, imprenteros, correctoras.

“Esto expresa la decisión de seguir fomentando el desarrollo de este sector tanto por lo que significa como industria a la hora de generar puestos de trabajo y de apostar al desarrollo económico, como la importancia central que tiene para la creación de contenidos nacionales que den cuenta de nuestros lenguajes, identidades, historias y formas de vida”, subrayó Bauer.

El ministro hizo especial hincapié en “la gravedad que significaría que en diciembre de este año caduquen las asignaciones específicas destinadas a promocionar determinadas actividades culturales. “Durante el gobierno anterior, en diciembre de 2017, se modificaron los impuestos destinados a la financiación del cine, teatro, de la música y de las bibliotecas populares, fundamentales para su subsistencia y su desarrollo”.

“Queremos dejar en claro nuestro compromiso para seguir trabajando todos los días, como lo estamos haciendo, para revertir este penoso legado que resultaría gravemente perjudicial para las diversas prácticas culturales”, expresó el funcionario.

El ministro de Cultura de la ciudad de Buenos Aires, Enrique Avogadro, se refirió a la cultura, la ciudad y la Feria: “Así como es muy difícil imaginar a Buenos Aires sin su cultura, es muy difícil imaginar a nuestra cultura sin la Feria del Libro”, dijo al tiempo que resaltó el “rol central que ocupa la Feria no sólo en el sistema de libros, sino en el de la Cultura de nuestro país. Un rol central en términos culturales pero también económicos”, expresó Avogadro.

Ariel Granica, presidente de la Fundación El Libro, abrió el acto mencionando que “no alcanzan las palabras para expresar la alegría de volver a inaugurar la Feria Internacional del Libro. Alegría después de haber atravesado tanta incertidumbre. Y alegría también porque la solución que elegimos fue caminar juntos autores, editores, gráficos, libreros, distribuidores. Volvimos a apostar a las palabras y a los libros y hoy estamos aquí”, expresó.

Tatiana Viera Hernández, por La Habana, la ciudad Invitada de Honor de la Feria, señaló: “Cuba y su capital consideramos a la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires como un ejemplo muy apreciable de acción instituida en favor de los distintos actores de la cadena de valor del libro, de la literatura, de la cultura, y una de las expresiones más relevantes de ese empeño entre los hechos culturales y comerciales que alrededor del libro se organizan en Iberoamérica y el mundo”.

El discurso de cierre del acto este año estuvo a cargo del escritor Guillermo Saccomanno. “Decir Feria implica decir comercio. Esta es una Feria de la industria y no de la cultura aunque la misma se adjudique este rol. En todo caso, es representativa de una manera de entender la cultura como comercio en la que el autor, que es el actor principal del libro, como creador, cobra apenas el 10% del precio de tapa de un ejemplar”, dijo el escritor.

“La vida es breve, uno escribe contra la fugacidad. Escribir es el intento muchas veces frustrado de capturar instantes de belleza, registrarlos para que sobrevivan a pesar de la finitud. Se escribe en soledad, pero no ajeno a las contradicciones de lo social.”, dijo el autor.

La inauguración contó también con la presencia del subsecretario de Espacios Culturales, Martín Bonavetti; la directora nacional de Promoción de Proyectos Culturales, Agustina Balduzzi; el director de la Fundación El Libro, Ezequiel Martínez; los escritores y escritoras Enzo Maqueira, Ana María Shua, Silvia Schujer, María Sonia Cristoff, Natalia Zito, Inés Krimer, Canela, Alicia Genovese, Gabriela Saidon, Fabián Martínez Siccardi, Gustavo Nielsen, Silvia Plager; el exdirector de la Feria, Oche Califa.

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