Atención Escuelas: ¿inescrupulosos al acecho?
En columnas de acceso a un Colegio Religioso de Paraná, manos inescrupulosas colgaron los afiches que ilustran la nota. Como puede apreciarse a simple lectura, es una convocatoria a “Prueba Futbolística” a chicos en edad prudente de acometerla, pero también a gurisitos de 10 años. ¿Esto no podría configurarse como trata de personas?
Aguardamos hasta hoy para darlo a conocer pues EVITAMOS la controversia DIRECTA con el o los responsables de semejante despropósito.
No quisimos quedar como los “Justicieros” y que por allí, nuestra consideración genere tomas de conciencia, provocando que NADIE fuera a la “invitación” desde el primer día.
Pero hoy ya concebimos imperioso sembrar coherencia, congruencia, en padres y madres.
El afiche colocado sin autorización del Establecimiento Educativo solo ofrece datos que reflejan una improvisación absoluta.
Si el Consulado Internacional de Porto Alegre de Buenos Aires promueve ésta “Prueba”, ¿no debería haber tenido una resonancia, una repercusión adecuada, en la cual se otorguen precisiones a los padres respecto a metodología de la misma?
Fiel a la investidura diplomática de sus representantes, ¿no se podría haber acometido una inversión SERIA, con espacios orales, gráficos, y televisivos en los cuales se brinden detalles, especificaciones, pertinentes?
¿No podían asistir al mismo Consejo General de Educación, a la Subsecretaría de Deportes de la Provincia?
Tal vez las intenciones sean loables. Quizás los propósitos sean fecundos y sanos. Pero, lo CONCRETO es que la modalidad de convocatoria, aplicando afiches en columnas de un Colegio es patética, para nada CONFIABLE.
Se convoca a adolescentes y jóvenes de hasta 20 años, como a pequeñines de 10. Es una irracionalidad que cualquier psicólogo, psicopedagogo, o médico deportólogo puede refutar con argumentos científicos claros.
Nos preguntamos… ¿No puede actuar un Juez de Oficio? ¿No puede actuar hasta Investigaciones de la Policía de Entre Ríos para verificar la PROBIDAD de la convocatoria? Al menos, NOSOTROS, padres, tenemos que empezar a ACTUAR. PREVENIR antes que lamentar.