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ATE, UPCN y Agmer ratificaron medidas de fuerza

Este martes los estatales nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y en la Unión Personal Civil de la Nación (UPCN) realizarán un paro de actividades. En tanto, la seccional Paraná de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) dispuso la realización de asambleas en las escuelas. Todos reclaman una recomposición salarial para los trabajadores.

 

El primer gremio en anunciar una medida de fuerza para esta semana fue ATE, que en el plenario de secretarios generales del martes pasado definió instrumentar cuatro días de paro, el primero de ellos para este martes, y los otros en octubre y noviembre.

 

A su vez, luego formalizó el pedido para que el Gobierno provincial abone a los trabajadores un aumento de emergencia de 1.500 pesos.

 

Al malestar generalizado por la negativa a otorgar una suba salarial, se sumó la decisión del gobernador Sergio Urribarri de exceptuar del pago de Ingresos Brutos a la industria, que fue duramente cuestionada tanto por ATE como por Agmer.

 

El otro gremio que también anunció un paro para este martes fue UPCN, aunque en este caso el reclamo se focalizó en el pedido de aumento salarial y no se hizo referencia a la polémica decisión de exceptuar del pago de impuestos a la industria, decisión que fue avalada por el titular del gremio, José Allende, que a su vez preside la Cámara Baja.

 

No obstante, el gremio resolvió exigir al Iafas que el próximo mes realice la retención de los impuestos al juego, ya que “son recursos que hoy no llegan a la provincia”, dijeron.

 

Por otra parte, también habrá protestas de los docentes. Si bien la comisión directiva central del sindicato todavía no realizó la convocatoria a un congreso provincial de la entidad para definir la continuidad de la lucha, en las escuelas de Paraná habrá asambleas esta semana.

 

Así lo definió en una reunión de delegados de Agmer Paraná, que resolvió realizar asambleas esta semana y una “gran movilización” la próxima, informó a esta Agencia el secretario de Prensa de la entidad, Ignacio González Lowy, quien advirtió que hay “mucha bronca” en la docencia entrerriana.

 

Cuestionamientos

El anuncio del Gobernador de exceptuar del pago de impuestos al sector industrial, que en una semana se materializó con la sanción del proyecto que en ese sentido el Ejecutivo envió a la Legislatura, profundizó el malestar que ya había entre los trabajadores por la negativa a otorgar una suba salarial.

 

“Hubo una presión de sectores de la burguesía entrerriana a la que lamentablemente el Gobierno ha decidido ceder”, aseveró en este sentido el secretario Adjunto de Agmer, Alejandro Bernasconi, quien consideró que tal decisión política impacta negativamente en la posibilidad de que haya una recomposición salarial para los trabajadores.

 

“Cuando discutimos salarios, se debaten muchas cosas que exceden la disputa entre trabajadores y un gobierno de turno. Se trata de una disputa que involucra a varios actores, entre ellos la burguesía provincial y los grandes productores ya que de esos lugares tienen que salir los recursos para sostener la salud, la educación y los derechos de la clase trabajadora”, agregó ante requisitoria de los colegas de APF.

 

En definitiva, “expresamos nuestro malestar porque se está beneficiando precisamente a los sectores a los que más habría que gravar” con impuestos, sostuvo Bernasconi.

 

En tanto, el secretario de Prensa de Agmer Paraná, Ignacio González Lowy recordó que la agrupación a la que pertenece “Rojo y Negro” no apoyó la reforma tributaria de marzo, que fue motorizada desde sectores vinculados a conducción del gremio, en el marco de la CTA Entre Ríos

 

“En su momento, desde Agmer Paraná y la agrupación Rojo y Negro no acompañamos la reforma tributaria. Y ahora se cumplió todo lo que veníamos denunciando: que los más poderosos terminan no pagándola, la paga el pueblo, y encima los ingresos que se consiguen no vuelven a los bolsillos de los trabajadores en forma de aumento salarial”, declaró.

 

También del plenario de secretarios generales de ATE surgieron duras críticas a Urribarri y repudiaron su decisión de “darle la espalda a los trabajadores, no sólo incumpliendo su promesa de diciembre del 2013 de aumento real del salario, sino que además se comprometió a otorgar exenciones a los grupos económicos que más han ganado durante estos 10 años, hasta el punto de avanzar sobre la Ley 4.035, que le otorga financiamiento a las pensiones destinadas a quienes nada tienen”.

 

Estas determinaciones decisiones desnudaron “el claro perfil político del gobernador Sergio Urribarri, que decidió estar del lado de los más poderosos, y no de las clases que más necesitan de la acción del Estado”, aseveraron desde ATE.

 

Para ATE, “se hace indispensable alertar al electorado nacional, que quien se esconde bajo el manto de políticas populares en su provincia sólo favorece a los sectores del capital más concentrado, como lo demuestra con esta acción de exceptuarlos del pago de impuestos y aportes”.