“Apagón” biotecnológico: inscripción de nuevas variedades de soja es la más baja en una década
|La falta de una ley de semillas actualizada, que “premie” a quienes invierten en el desarrollo de eventos biotecnológicos y germoplasmas, entre otros aspectos, se ha reflejado en una sensible caída de las inscripciones de nuevas variedades de soja. El Inase sólo relevó hasta ahora 21 nuevas obtenciones de soja. Hace sólo dos campañas, fueron 54.
Según un informe elaborado por RIA Consultores, a falta de una semana para que finalice 2017, el Catálogo Nacional de Cultivares del Instituto Nacional de Semillas (Inase) sólo contabiliza 21 nuevas obtenciones de soja, el valor más bajo en 10 años.
Vale recordar, en este contexto, que 2016 ya había marcado uno de los valores más bajos desde 2008, con 28 inscripciones, tras alcanzar las 54 en 2015.
Para RIA, “el mejoramiento de las especies autogámas necesita urgentemente un refresh innovador para que la Argentina retome el liderazgo que supo tener de los 90 en adelante.
Panorama
Según el estudio, normalmente las inscripciones de semillas tienen un efecto serrucho: a un año con alta cantidad de registros, le sigue otro con una caída importante. Este ejercicio quiebra esa tendencia, ya que debería haber mostrado un repunte en el volumen y no una caída como la que exhibe.
Para RIA, esta situación se puede explicar por varios motivos:
-Efecto China. Si bien se han aprobado nuevas tecnologías transgénicas, no se las ha liberado comercialmente ya que está pendiente la aprobación por parte de China. Esto limita la inscripción de cultivares que las incluyen, como sucedió con el caso de Intacta, que generó una renovación en el portfolio genético.
-Ley de Semillas. “La falta de una ley apropiada y/o su enforcement por parte del Estado constituye un gran desestímulo a la innovación”, menciona el reporte.
-Menos soja. A esto se suma un progresivo desinterés por el cultivo, que ha llevado a que la siembra de la campaña 2017/18 (16,8 millones de hectáreas) sea la menor desde 2007/08 (16,6 millones de hectáreas).
-Nuevos enfoques. “El negocio semillero se enfoca en el maíz y el trigo. Las empresas están viendo que ‘la cosa’ viene por el lado de los cereales y vuelcan sus cañones a ese rubro. Valga como ejemplo la compra de Illinois por parte del Grupo Don Mario”, agrega el documento.