Alberto Fernández: “volvimos y vamos a ser mejores”

A las 20.08, ante una plaza de Mayo colmada, luego de una jornada con múltiples bandas, Alberto Fernández subió al escenario junto a Cristina Fernández de Kirchner. Sonaba, de fondo, Deja Vu canción de la etapa solista de Gustavo Cerati. “Néstor no se murió​, Néstor vive en el pueblo”, cantaba el público.

 

A las 20.13, tomó la palabra la ex presidenta: “Muchas gracias. Gracias a todos y a todas. Déjenme contarles un poco lo que me pasó esta mañana. Esta mañana cuando me desperté y me di cuenta que hacía exactamente cuatro años atrás, me había despertado en el mismo lugar, en la casa de mi hija Florencia. ¿Se acuerdan no? Se acuerdan aquella noche maravillosa del 9 de diciembre de 2015 cuando nos despedimos en esta plaza. Aquella noche les dije que aquellos años que habíamos compartido desde 2003 hasta 2015 no hubo magia. Que no era magia. Lo que habíamos vivido era una Argentina de la solidaridad. Donde nos importaba lo que le pasaba al de al lado, aunque nosotros estuviéramos bien”.

 

“Quiero decirles que estos cuatro años sé que han sido muy duros para tantos y tantas. Trabajo, pobreza, salario, el hambre que tanto desvela hoy a nuestro presidente y que debería desvelar a todos los argentinos y argentinas bien nacidas. Fueron cuatro años muy duros. Fueron también duros para quienes fueron objeto de persecución, de quienes se los buscó que literalmente desapareciéramos como seres humanos casi, a través de la humillación y la persecución. Sin embargo, pese a todo eso hoy estamos aquí”.

 

“Y quiero decirles que estamos aquí y que estamos aquí porque no fue tampoco magia. Estamos aquí hoy porque hemos unido las voluntades no solo la voluntad individual de un dirigente, la voluntad de millones que creen que es posible vivir en un país diferente, mejor. Y esa voluntad fue ayudada por la memoria que no es más ni menos que el saber de dónde venimos. Nadie, ningún pueblo, que no tenga memoria que no sepa lo que ha pasado que no sabe de dónde viene difícilmente pueda llegar a algún lugar. Y nosotros le hemos puesto esa voluntad política del cambio”.

 

“Pero también la hemos moldeado con la humildad que debemos tener todos y cada uno de nosotros para saber que lo colectivo es más importante que lo individual. Que los dirigentes deben entender de una buena vez por todas con generosidad y humildad que es necesario que cada uno de nosotros entienda en uno. Uno es más grande cuando es parte de un todo, sino somos individualidades sueltas. Voluntad, humildad, sinceridad. Ustedes saben, yo no soy hipócrita. Puedo equivocarme, puedo cometer errores per ustedes saben que digo lo que pienso y hago lo que siento. Nunca otra cosa diferente”.

 

“Voluntad, mucha voluntad y mucha humildad, pero también coraje. Porque para llegar las cosas adelante hay que tener coraje. El coraje no se prueba en el poder, se prueba en la adversidad y en el llano. Y es necesario siempre, el coraje, la lealtad, ese valor que algunos no entienden y piensan que lealtad es a un líder político”.

 

“Amor porque en definitiva, esa voluntad esa memoria esa humildad ese coraje, tiene que tener un objetivo y es el amor, algo que siempre nos ha movido por lo menos a nosotros a nuestra plaza Mucho amor, amor al pueblo, a la patria. Amor a los que sufren, a los jóvenes, a quienes quiero abrazar esta tarde. Esos jóvenes que nunca dejaron de acompañarme siempre. Siempre me sentí tan acompañada por ustedes. Gracias”.

 

“Presidente; quiero decirle que ustedes ha iniciado su Gobierno con muy buenos augurios. Ha decidido que esta plaza a la que habían enrejado como un símbolo de división entre el pueblo y el Gobierno, usted ordenó que se retiraran las rejas, pero además, es muy buen augurio el mensaje que usted ha dado ante su pueblo”.

 

“Presidente confíe siempre en su pueblo. Solo piden que los defiendan y los representen. No se preocupe presidente, por las tapas de un diario. Preocúpese por llegar al corazón de los argentinos y ellos siempre estarán con usted. Nunca lo olvide”.

 

“Usted presidente tiene por delante una tarea muy dura. Le han dejado un país devastado. Tierra arrasada. Pero sé que usted tiene la fuerza y la convicción para cambiar esta realidad tan fea que están viviendo los argentinos. La historia, siempre la escriben los pueblos. Y sepa que este pueblo maravilloso que nunca abandona a los que se juegan por el, puede convocarlo cada que vez que se sienta solo, siempre van a estar acá. Por eso quiero decirles a todos y a todas, en nombre de todos aquellos que hoy no están, porque partieron, o porque tal vez están fuera de la Argentina, que cuenten con el apoyo y el amor y la esperanza que hemos depositado en usted. Gracias presidente, y gracias Argentina”.

 

A las 20.28 tomó la palabra Alberto Fernández… “Buenas noches Argentina. Que linda es esta noche. No saben cuánto los quiero. Que linda esta noche donde volvemos a celebrar otro día en democracia. Donde se pone fin a un tiempo y comienza otro. Donde todos disfrutamos con músicos amigos que pusieron alegría a una jornada única que estamos viviendo. Una noche esplendida para mí, donde puedo terminar con Cristina hablando con ustedes, sobre todo lo que queda por delante, lo que está por venir”.

 

“Como siempre agradeciendo a Dios, porque un día el destino me cruzó a Néstor Kirchner. Aquella noche, que fui a cenar con Néstor jamás pensé que mi vida iba a cambiar como cambió, que se me iban a abrir las puertas para acompañarlo, a la más maravillosa aventura que puede pedir un hombre que es levantar un país, levantar las banderas de la producción y del trabajo”.

 

“Pero el día aquel, tuve una alegría adicional: ese día también me crucé con Cristina. En realidad, por la locura argentina o la locura nuestra, alguna vez nos distanciamos y nos reencontramos, sabiendo que no había diferencias centrales, que nos habíamos distanciado por formar o por modos, y que solo sirvió para que este espacio se divida y vuelvan a ganar los mismos que siempre ponen piedras para que este país crezca. Los mismos que siempre aparecen en escena para endeudarnos, para dejar con hambre a las familias”.

 

“Lo importante es que en esta plaza hoy estamos Cristina, yo y todos, unidos decididos para poner la Argentina de pie. Al pasado más reciente, simplemente recordémoslo. Tengamos memoria. Nosotros aprendimos que con nuestra división ellos se hacen fuertes”.

 

“El tiempo que inicia es distinto. A la política del ‘salvate vos’, vamos a imponerle la solidaridad. Somos un movimiento político que nació en la faz de la tierra para ser solidario con el prójimo. Los que hoy la están pasando mal, los que cayeron en el pozo de la pobreza, no teman: ellos serán los únicos privilegiados en la Argentina que hoy inicia y hacia ellos dirigiremos todas nuestras políticas. Vamos a hacer la mejor epopeya que podemos hacer como sociedad, unir nuestro esfuerzo para que no falte un plato de comida a nadie. EL hambre debe avergonzarnos”.

 

“Hagamos lo que corresponde. Así como tenemos que resolver problemas en la economía, así como tenemos que preocuparnos por lo que hoy están sin trabajo, vamos a ocuparnos por vivir en una sociedad mejor, por eso quiero que todos me ayuden a que pongamos la Argentina de pie, un sistema judicial que deje de servir a los poderosos para perseguir a los opositores”.

 

“Un sistema judicial que usa la prisión preventiva para amedrentar opositores. En la Argentina que viene, se terminan los operadores judiciales, los jueces que se prenden a esos operadores y el adiestramiento mediático que todos soportamos. Lo vamos a hacer entre todos y me tienen que ayudar”.

 

“Se muy bien que con Cristina a quien estamos representando: a los que sufren, a los que se quedaron sin trabajo, a los que deambulan por esta ciudad en la noche. A todos ellos representamos. Y no tenemos dudas de donde tienen que estar puestos nuestros anhelos”.

 

“Hoy, argentinos y argentinas vamos a dar vuelta una página más de la historia. Vamos a escribir un tiempo en donde el importante es el que produce y el que trabaje y terminar con el que juega con la timba financiera en perjuicio de la Argentina”.

 

“Hoy es un día de alegría porque estamos para empezar a construir un tiempo distinto al que hemos vivido. Lo vamos a hacer todo: con cristina, con Wado, con Máximo, con Sergio y también con quienes no nos han votado y saben que lo que digo es cierto y quieren también ese país en el que yo creo”.

 

“Vamos a cuidar el bolsillo y los derechos y el bolsillo de todos ustedes. Han sido muy difíciles estos años. Cuatro años escuchamos decir que nosotros no volvíamos más, pero esta noche volvimos y vamos a ser mejor. Gracias Argentina, gracias argentinos. Aquí estamos; hemos vuelto. A trabajar. Muchas gracias”.

 

Alberto Fernández cerró a las 20.39 con la canción “Ji ji Ji”, de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota. Fue la conclusión de su primer día como presidente.