Maran Suites & Towers

Alarma en el agro por el impuesto a la riqueza: “El resultado inequívoco será menos producción”

Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) aseguró este lunes que “en los sectores productivos nuevamente se encienden las señales de alarma”, en esta ocasión a raíz del proyecto que impulsan legisladores del oficialismo para establecer un “Aporte Extraordinario Solidario”.

Se trata de un “impuesto extraordinario a las grandes fortunas” o “impuesto a la riqueza” que CRA consideró un tributo contra el progreso: una alícuota de entre dos por ciento y 3,5 por ciento que pagarían todos aquellos que posean bienes cuya valuación supere los 200 millones de pesos.

En las zonas más productivas del país, con campos valuados a un precio de entre 10.000 y 15.000 dólares por hectárea, significaría que un propietario de entre 100 y 200 hectáreas ya podría empezar a pagar este tributo.

“Como siempre sucede en estos proyectos, no tiene en cuenta las características productivas del país, y no por animosidad, sino simplemente por desconocimiento. Viejas recetas, poco estudiadas, con grandes falencias técnicas y poca impronta intelectual; por decirlo fácil “flojas de papeles”, tienden a repetir errores pensando que la reedición de los mismos esta vez tendrá resultados diferentes”, se quejó CRA.

En ese sentido, no solo apuntó contra esta propuesta sino al rumor de que se podría incrementar la alícuota del Impuesto las Ganancias del 35 por ciento al 41 por ciento.

Impacto

“Este impuesto a la riqueza nuevamente no genera más que incertidumbre y falta de señalas claras para el sector. Se superpone a la tributación de bienes personales e incurre en una clara ignorancia en relación cómo se genera valor desde las cadenas agroindustriales”, alertó CRA.

Sobre este punto, recordó que en las actividades extensivas el recurso tierra tiene un alto peso en el capital invertido y no genera una rentabilidad por sí mismo acorde a su cuantía, sino que solo aporta al proceso de producción con su “costo de oportunidad”, es decir, su uso alternativo más probable que es el de alquiler.

Además, reiteró su queja de que Argentina permanece como uno de los países con mayor carga tributaria no solo de América Latina, sino a nivel mundial.

“Hay más de 168 tipos de tributaciones distintas y 35.000 normativas que generan toda clase de distorsiones desde impuestos en cascada como de Ingresos Brutos, pasando por superposiciones impositivas como la del impuesto al cheque (se paga un impuesto por pagar impuestos), hasta la falta de ajuste inflacionario en el impuesto a las Ganancias, y ahora el riego de sumar una piedra más a la pesada mochila impositiva que lleva cualquier emprendedor de cualquier sector en el país”, subrayó CRA.

Según una estimación del Departamento Económico de la entidad ruralista, con los impuestos actuales, el Estado ya se lleva el 77 por ciento del ingreso de los productores.

“Las empresas crecen de manera inversamente proporcional a los retiros; es decir, que la alta carga impositiva reduce beneficios y deja menor capital para reinversión productiva, quita capacidad de buffer frente a situaciones adversas como sequías, inundaciones e incendios como se sufrieron recientemente en muchas zonas productivas, afectando la resiliencia del productor en una industria que es a cielo abierto. Esto genera desincentivos, una pauperización de la producción”, reclamó CRA.

Esfuerzo no correspondido

Del otro lado, el problema que advierte la entidad es que los funcionarios nunca piensan en cómo achicar el gasto público ineficiente.

“Nuestros representantes, muy lejos de generar los mecanismos adecuados por parte del Estado, recurren a recetas de probada improductividad. En base a las urgencias de las necesidades de financiamiento no se toan en cuenta cómo es el mecanismo de agregado de valor en el sector agropecuario. En Argentina lo urgente se vuelve constante, los problemas de fondo nunca se solucionan, solo se emparchan y se ensayan paliativos de cuestionable eficacia”, agregó CRA.

Y continuó: “Es muy difícil de entender la impunidad de los diferentes Gobiernos frente a sus malas decisiones. Pasan los tiempos, cambian los actores, las situaciones, pero la respuesta de los gobernantes sigue siendo la misma: frente a su incapacidad de solucionar los temas estructurales, aparecen retenciones, derechos de exportación, aporte extraordinario solidario; en definitiva, más impuestos”.

Para CRA, esta es la razón por la cual Argentina hace más de una década que no crece: “choca una y otra vez con la misma piedra, y no es cierto que el Estado se esfuerce porque lo que se esfuerza es la espalda productiva del país y no la mochila”.

En medio de la idea de fomentar un plan agroexportador, CRA alertó que iniciativas como la que se están impulsando profundizan los incentivos para abandonar esquemas de alta inversión, lo que lógicamente afectará resultados productivos y el perfil comercial del país.

“Menos producción, menos granos, menos frutas, menos verdura, menos leche y menos carne. Serán los resultados inequívocos de este proyecto de impuesto al progreso”, cerró CRA.

Add a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *