Agmer advierte que discutir el régimen de licencias es abrir otro conflicto
La Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) considera contraproducente poner en discusión el régimen de licencias docentes en la provincia y dice que si el Gobierno avanza por ese camino, se abre “un conflicto enorme” cuando todavía no se ha resuelto la discusión salarial de cara al inicio del ciclo lectivo 2016, el lunes 29.
“Para nosotros es impensable que nos hagan un planteo de cambiar el régimen de licencias docentes en la provincia para instrumentar un control médico, porque sería abrir un conflicto enorme”, dice Alejandro Bernasconi, secretario adjunto de Agmer. “Acá, lo que las autoridades deben pensar es cómo instrumentan estrategias de prevención de la salud. El sindicato ya hecho reiteradas propuestas para recuperar el servicio de las clínicas escolares”, añade.
Bernasconi rechaza el calificativo de “permisivo” que le endilgó el presidente del Consejo General de Educación (CGE), José Luis Panozzo, al régimen de licencias de los docentes en Entre Ríos. “De ninguna manera es permisivo. Panozzo lo conoce bien al régimen de licencias de la provincia. Un régimen que, además, tiene algunas deficiencias importantes respecto de leyes nacionales, que deberían replicarse en la provincia”, sostiene.
Bernasconi sostiene que el régimen de licencia docente de Entre Ríos está retrasado respecto de las modificaciones legislativas y la ampliación de derechos que registran otros trabajadores. Y cita la “paradoja” de que un docente que se desempeña en la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader) y, a la vez, el Consejo de Educación tiene dos regímenes distintos. El de Uader es más beneficioso, dirá.
“Eso es una absoluta irregularidad –plantea el adjunto de Agmer–. Es más, se tiene que ampliar el régimen de licencia por paternidad, que otorga poquísimos días en comparación con otros gremios. También, hay que incorporar la cuestión de la violencia de género, lo que significa una ampliación de derechos. Es decir, el reconocimiento de derechos que ya figuran en leyes. Por eso decimos que no es un régimen permisivo; es un régimen al que le falta mucho”.
En el escenario de discusión con los maestros, el Gobierno introdujo la cuestión de las licencias docentes, y al respecto Bernasconi planteó que es un asunto que en las reuniones oficiales no se ha tratado. “No se ha puesto en el marco de esta discusión. Si se lo pone, desde ya que no lo vamos a aceptar. En esta discusión disputamos salario. No estamos discutiendo el régimen de licencias, que en realidad es una discusión sobre el control de ausentismo. Respecto de eso, nosotros tenemos un proyecto hace muchos años presentado en el Consejo de Educación, de un sistema de prevención de la salud laboral docente. De ninguna manera nos oponemos a que exista contralor. Ahora, no puede ser contralor de policía sino que tiene que ser control de salud, con políticas de prevención. Y claramente, el Estado no ha generado absolutamente nada respecto de esto”, sostiene el dirigente sindical.
Bernasconi no comparte el mismo optimismo que el titular del CGE, José Luis Panozzo, respecto del inicio del ciclo lectivo. Panozzo se esperanza en una normal vuelta a clases a partir del lunes 29. Y juzga que la discusión salarial será clave.
“El inicio del ciclo se presenta con la misma conflictividad que en años anteriores. Tal vez, a diferencia de otros años, va a tener mucha incidencia la definición de la paritaria nacional. En los últimos dos años, en Entre Ríos hemos logrado aumentos que estuvieron por encima de los pisos nacionales. Pero ahora tenemos el temor de que la Provincia nos ponga el piso que se fije en Nación. Y sabemos que el piso que está poniendo la Nación es muy bajo y es en tramos. Desde ya que va a ser rechazado a nivel nacional, por lo tanto si acá se repite ese piso, lo vamos a rechazar”, apunta.
Agmer sostiene un reclamo de incremento salarial por encima del 45%, con una “cláusula de revisión en que caso de que haya una nueva devaluación –asegura Bernasconi–. Y a cuenta de lo que se discuta, también queremos que en febrero haya un aumento de emergencia del 20%”.
En ese marco, los maestros volverán hoy a las escuelas sin haberse resuelto nada. Pero Bernasconi dice que en los últimos años el escenario ha sido, precisamente, ese. “El Gobierno nuevamente avanza con una estrategia de dilatar los tiempos, pero nosotros también jugamos con los tiempos en el sentido de que cuanto más caliente está el inicio, mayor espacio de discusión tenemos –asegura–. Y esta es la realidad. Y de hecho cuando los compañeros están en las escuelas es cuando más poder tenemos”.
El adjunto de Agmer entiende que el pensamiento mayoritario de los docentes es que “ya es tarde” para acordar salarios, “porque piensan que vuelven a las escuelas y no se arregló nada salarialmente. Pero a nosotros tampoco nos apuran los tiempos, porque el poder que tenemos para discutir ahora no es el mismo poder de cuando estás en el medio del conflicto y cuando la gente está en la escuela. El Gobierno juega con la dilación, pero también nosotros. Nadie imagina que aceptemos ahora una propuesta antes, salvo que haya una sorpresa”.
Pero entiende que “hasta que no haya definición en la paritaria nacional no habrá oferta en la provincia. “El tema es si el Gobierno se va a arriesgar a ir por encima de la paritaria nacional, más cuando depende mucho de los recursos de la Nación”, duda Bernasconi.
En ese escenario, piensa que es “altamente probable (que haya conflicto) porque va a tener mucho peso la paritaria nacional, y la paritaria nacional se discute bajísimo, y si acá no hay discusión de ir por encima, va a haber conflicto”.