Más de 200 argentinos viajaron como observadores a la elección de EE.UU.
Cerca de 200 argentinos llegaron a los Estados Unidos entre domingo y lunes en calidad de observadores y veedores electores para experimentar las elecciones presidenciales en las que la vicepresidenta Kamala Harris o el ex presidente Donald Trump liderarán la primera potencia occidental.
Constituyen una de las mayores delegaciones extranjeras que en cada elección vienen a ver en persona la votación, que desde 2016 se exhibe como uno de los comicios más polarizados del planeta y que se espejan en lo que sucede en la Argentina.
Las organizaciones más importantes y con delegaciones más numerosas son el Diálogo Argentino Americano, que encabeza su presidente Luis Ruvira; la Fundación Universitaria del Río de la Plata (FURP), que llegó con su presidente, Francisco Quintana, y la American Chamber (AmCham), con su CEO, Alejandro Díaz, al frente.
A diferencia de las representaciones, por ejemplo, que envían masivamente dirigentes a las elecciones en Venezuela, los representantes de la política, del sector privado y de la sociedad argentina que están en Estados Unidos no requieren militancia partidaria, afinidad con el chavismo, o filtro ideológico. Su pertenencia es variada incluso para el sector empresarial.
“Los viajes de la Fundación son como observadores, no somos veedores como más de uno dice, la observación, que además es con autorización a los centros de votación, son realizados desde el 2012”, dijo Ruvira a este diario sobre los viajes que en los que también van miembros del poder legislativo, gobernadores, gremialistas y hombres de negocio.
Con la Fundación de Ruvira viaja quizás una de las delegaciones más jóvenes, entre ellos el hijo de Hugo Moyano y Liliana Zulet. Jerónimo es el séptimo hijo del patriarca gremial, y ex presidente de Independiente. De apenas 25 años, es secretario de Juventud de la Federación de Camioneros y Secretario de Formación Político Sindical del Sindicato de Camioneros. Trabaja también como asistente de su padre.
Otro de los jóvenes, que está por su lado es el legislador misionero Pedro Puerta, hijo del ex senador y embajador, Ramón Puerta.
El modelo de viaje suele ser similar en todas las delegaciones, con visitas al Departamento de Estado, al de Comercio, al Ministerio de Defensa, y a una serie de instituciones como el Congreso, donde son los senadores y representantes abren las puertas de sus despachos para los argentinos, que también recorrían los centros de votación este martes 5.
Los participantes recorrieron varias instituciones como el Wilson Center, la Heritage Foundation y el IRI (Instituto Republicano Internacional).
Por su parte, Francisco Quintana, de FURP lleva adelante uno de los proyectos más antiguos de los que se considera una “networking” de observadores y veedores que trabaja con la International Foundation for Electoral Studies.
La FURP, que tiene 55 años de vida viene a Estados Unidos con varios objetivos. Por un lado a “escuchar las dos campanas” locales y por el otro lado a empaparse de lo que piensan aquí de la relación con la región y la Argentina. Y a tender relaciones con organismos que tienen sus cuarteles aquí: la OEA, el BID, el Banco Mundial, el FMI.
Para todas las delegaciones hubo cambio de planes con el repentino nombramiento de Gerardo Werthein, hasta el viernes embajador en los Estados Unidos, como Canciller. A todas las delegaciones, a los 65 de FURP, a los casi 40 de Diálogo Argentino Americano, a los casi 30 de AmCham y otras delegaciones menos conocidas pero no menos numerosas los fue recibiendo el hoy encargado de negocios de la embajada argentina Juan Corteletti.
A todos se le hizo difícil explicar la Argentina en un Estados Unidos concentrado en su propia política interna. Además, ni el equipo de Trump, ni el de Harris han mostrado quiénes serán sus encargados de hablar y conectar a Estados Unidos con la región y con Argentina.
“Promoviendo el diálogo publico y privado”, dice por ejemplo la agenda de la AmCham, que tiene entre sus invitados, y que pagaron de su propio bolsillo el viaje al presidente del Centro de Estudios Americanos, Luis Savino; al senador de la UCR, Maximiliano Abad; a los diputados Laspina, María Laura Rodríguez Machado, De Loredo, entre Damián Arabia, entre otros. También a Rolandi y Ritondo. Con la FURP también está Daniela Vilar, la ministra de Medio Ambiente del gobernador Axel Kicillof.
Entre los empresarios están Pablo Gowland y Santiago Cofone, de Consulting Group Argentina. Con AmCham, por su lado, vinieron Daniel Morelli, gerente de Asuntos Gubernamentales de Biopharma; y el director de Relaciones Institucionales de Vista Energy, Manuel Aguirre.
Con Diálogo Argentino Americana hay siete diputados, como la radical Soledad Carrizo, la ex senadora por La Rioja, Clara Vega, y el enlace con el Congreso, Sergio Polite. Varios de lo observadores que han pasado por las elecciones de los Estados Unidos tienen importantes cargos políticos o los han tenido.
En el grupo de los que más veces vinieron se encuentra el abogado Aníbal Julio Asseff, ex senador y director de Seguros de Retiro del Banco Nación. Y está el especialista en temas agrarios Javier Reigada.
Así como algunos de estos “observadores” se pagan su propio viaje, otros reciben ayudas para hacerlo de sus propios partidos políticos, organizaciones a las que pertenecen o son financiados por quienes los invitan.