Que de las manos… de Altamirano…
|“Vení, vení, cantá conmigo, que un amigo vas a encontrar, que de la mano, de Altamirano, todos la vuelta vamos a dar”, atronó la tribuna del “Malvinas Argentinas” mendocino, tras la epopeya de Patronato en la Copa Argentina. Es que el nacido en Rojas, hace 26 años, se ganó el amor de los hinchas al erigirse en el máximo estandarte de esta última parte del año, con performances brillantes.
El portero banfileño, que descolló ante River y Boca, en la noche de este domingo conjuró varias acciones de riesgo creadas por Talleres de Córdoba, y por eso, más allá del gol inédito de Banega, de la solvencia de Quintana o de la capacidad y carisma de Facundo Sava, Facundo Altamirano sobresalió por la protección que le otorgó a la valla “Santa”.
La curiosidad es que al Patrón la incorporación de Facundo Altamirano le salió “gratis”. Es que Banfield, dueño de su ficha, lo cedió sin cargo y con opción de compra, para que adquiriera continuidad. Y vaya si aprovechó la oportunidad, más allá del descenso, que no se debió al rendimiento del plantel que dirige Facundo Sava en la presente temporada (finalizó décimo en la Liga que ganó, precisamente, su derrotado Boca).
De 1m89 centímetros y 26 años, Altamirano surgió de la cantera del Taladro, en el que hizo su debut en la élite en 2017, en un duelo ante River Plate. Estuvo un año a préstamo en Estudiantes de Caseros, regresó a Banfield, tuvo rodaje, pero no se terminó de convertir en indiscutible. Por eso aceptó la mudanza a Paraná, en busca de continuidad. No sólo la logró, sino que además exhibió un gran nivel, con el bonus track de los penales.
Por Copa Argentina, contuvo dos remates en la serie ante el “Sabalero”, el decisivo a Matías Suárez frente al River de Gallardo y tres ante Boca. Y dentro de los 90 minutos no pudieron batirlo varias figuras de notable predicamento y de altísima cotización frente al humilde presupuesto “Rojinegro”.
Tras la hazaña en Mendoza, Altamirano expresó: “Quedó demostrado que tenemos lo que hay que tener para conseguir logros. Salimos campeones porque dejamos todo, más allá del rival, arriesgamos en el juego y salimos campeones. Y de la jugada final, dijo: “Por suerte pude contener la pelota al final”.
Y en cuanto a su continuidad, confesó: “La verdad que no depende de mí. Pero estoy muy agradecido a Patronato, fue el mejor año de mi vida futbolísticamente”.