“Zo” Wade nueva ficha en Sionista
De acuerdo a un parte de prensa, Lorrenzo Wade ha sido confirmado como nuevo extranjero en el Centro Juventud Sionista. El alero mide 1m98 y acaba de cumplir 27 años. Se sumará a su nuevo equipo el 2 de enero. Aparte de pasos por Grecia, Israel, y México, “Zo” dejó una buena imagen en la Argentina con su paso por Lanús, donde sufrió una seria lesión en la rodilla izquierda.
Sus primeros pasos en el básquet los dio en el Cheyenne High School North de Las Vegas, Nevada, y de allí pasó a la Hargrave Military Academy en Virginia. Posteriormente jugó para Cardinal Louisville y de allí fue transferido a San Diego State.
El debut en el profesionalismo se cumplió en Grecia, vistiendo la casaca de el Ek Kavala. De allí pasó al Hapoel Lev Hasharon de Israel, mientras que en México se destacó en Abejas de Guanajuato, Rayos de Hermosillo y Soles de Mexicalli.
Wade se lució en la Liga Nacional de Basquetbol durante la pasada temporada, donde en Lanús sufrió un desgarro del ligamento cruzado anterior, más un desgarro del cuerno posterior del menisco interno, asociado a un edema óseo del condilo femoral externo y del platillo tibial externo, en rodilla izquierda.
La lesión de Wade se originó en el primer punto de la serie de Cuartos de Final, cuando en un movimiento desafortunado padeció un esguince de rodilla. Esa dolencia inicial fue tratada con terapias de kinesiología y el norteamericano siempre manifestó la voluntad de jugar. Empero, la situación se fue agravando con el correr de los encuentros, hasta llegar desafortunadamente a este estado.
El alero disputó 13 partidos en Lanús, donde arribó como reemplazo de Derrick Roland. En su recorrido con la camiseta granate promedió 9.6 puntos, 1.8 rebotes, 1.2 asistencias, 42.5% en dobles, 47.6% en triples, 84.6% en libres y 22 minutos.
Mediante distintos highlights apreciados ANTES DE SU LESIÓN, “Zo” posee grandes aptitudes atléticas. Para ser un “3” cuenta con una altura correcta, brazos largos y positiva cuota de saltabilidad y explosividad.
No es un consistente defensa. La mejor faceta en ello son las tapas. Demuestra cierta tendencia a la desconcentración y logra más rebotes en ataque que bajo su cesto.
En ataque no ejecuta un posteo brillante, pero se defiende. Ataca el tablero con sagacidad y enorme potencia. Sus definiciones son precisamente con dribbling usufructuando la capacidad atlética. Las volcadas son una especialidad, en especial las vía contragolpes.
Su déficit es el lanzamiento externo y su poca adecuación a pasar la bola, calificándoselo como un jugador RESOLUTIVO, NO PARTICIPATIVO o adaptado al funcionamiento cohesionado por sistemas, y con permanente búsqueda de correr y penetrar.
Tres dudas: ¿cómo llega físicamente?… ¿se conformará a ser un jugador “de rol” y acomodarse o ajustarse a un esquema de orden táctico?… ¿O provocará una mayor anarquía que tanto daño le hizo al Centro en ésta temporada?