Videla denunció a ex dirigentes de Montoneros
|El Tribunal Oral Federal número uno que juzga al ex dictador por delitos de lesa humanidad lo autorizó a abandonar la sala del proceso para realizar la denuncia ante la Justicia Federal.
Videla fue autorizado esta mañana por el Tribunal Oral Federal número uno a abandonar la sala donde se lo juzga junto a otros 30 represores, por crímenes de lesa humanidad cometidos en la última dictadura.
El dictador subió al noveno piso, donde dos empleados de la Fiscalía Federal número tres, a cargo de Graciela López de Filoñuk, le tomaron esta mañana declaración.
En la sala sólo quedó el acusado Miguel “Gato” Gómez, mientras el resto se trasladó a una sala contigua donde pueden seguir el juicio a través de un circuito cerrado de televisión.
Videla había dicho el martes pasado durante la audiencia del juicio en su contra que se sentía “intimidado”por las declaraciones de ex dirigentes de Montoneros, en un acto en el que estuvo presente Luis Baronetto, actual secretario de Derechos Humanos de la Municipalidad de Córdoba.
El dirigente Guillermo Martínez Agüero, cuñado de Mario Firmenich, uno de los líderes de Montoneros, había dicho al diario La Voz del Interior que “no es el momento para las armas, lo cual no quiere decir que las armas no sean un elemento de poder”.
“Defendemos la democracia y la justicia social, pero no queremos que los compañeros pasemos al olvido. No hemos enterrado las armas, pero creemos que es una opción para cuando las condiciones lo hagan necesario”, sostuvo Martínez Agüero.
En ese marco fue que Videla denunció hoy por supuestas “amenazas” e “intimidación pública” a los dirigentes montoneros.
Videla, en la audiencia del martes, se había considerado un “preso político” y afirmado que sentía “preocupación” por su familia que “no tiene la protección”.
Baronetto difundió hoy un comunicado en el que se despegó de lo manifestado por Agüero y Roberto Perdía.
Este último aseguró al diario provincial que “Firmenich es una figura respetable”.
El funcionario municipal puntualizó que esos dichos no fueron mencionados durante el acto del que participó y que se llevó a cabo en la sede de ATE.
Además, aseguró que de su parte había un “total desacuerdo con los conceptos políticos que los dos antiguos dirigentes” vertieron en la entrevista.
Dijo que la reivindicación de la lucha armada era “una seria equivocación, carente de la necesaria autocrítica” sobre una “metodología fracasada”.
Baronetto, cuya esposa Marta Juana González es una de las víctimas cuyo caso es analizado en este juicio, dijo además que Videla, “otrora dueño de vida y muerte de miles de argentinos, ha urdido su maniobra victimizándose al extremo del ridículo, para eludir su responsabilidad en los crímenes y destino de los desaparecidos”.