Un diputado del PRO plantea cerrar la ex ESMA y crear un centro de formación militar
En un nuevo aniversario del golpe de Estado de 1976, el diputado del PRO por Santa Fe, Gabriel Chumpitaz propuso cerrar la ex Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) porque “divide a los argentinos” y los “impregna de odio y pasado”. El legislador aspira reemplazar el espacio de Memoria y Derechos Humanos por “un centro de capacitación especializado en emergencias y catástrofes”, con el objetivo de “entrenar a las Fuerzas Armadas y los bomberos”.
“¿Sabías que el predio de la ex ESMA ocupa más de 17 hectáreas en una de las zonas más estratégicas de la Ciudad de Buenos Aires?”, preguntó el diputado en sus redes sociales, al tiempo en el que propuso que la Legislatura porteña ceda ese espacio a las Fuerzas.
Puso como ejemplo la situación de Bahía Blanca: “Cuando se inundó, las Fuerzas Armadas y los bomberos fueron fundamentales para rescatar y asistir a los vecinos”. “Transporte, logística, estrategias, tácticas operacionales, administración de recursos deberían ser algunas de las especialidades”, enumeró.
Actualmente, en el predio funciona un Museo Sitio de Memoria, en donde se realizan visitas guiadas y tareas de investigación y conservación documental de archivos vinculados a la última dictadura militar en Argentina.
En 2023, fue declarado Patrimonio Mundial de la Unesco por ser considerado el centro clandestino de detención más importante que funcionó en Argentina entre 1976 y 1983. Esto quiere decir que la entidad es considerada un sitio de “valor universal excepcional” y está protegida con medidas internacionales para fomentar su preservación y mantenimiento.
Se estima que alrededor de 5.000 personas fueron secuestradas y detenidas ilegalmente en la ESMA durante el golpe de Estado, en donde se aplicaron torturas sistemáticas. Allí también se organizaron los llamados “vuelos de la muerte”, en los cuales los detenidos eran arrojados al mar o al Río de la Plata. Por allí pasaron las Madres de Plaza de Mayo secuestradas en la Iglesia de la Santa Cruz, Rodolfo Walsh y las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet.