UCA: Pobreza y escolaridad, el gran golpe a la infancia en pandemia
|El Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (ODSA UCA) presentó el 10 de diciembre el Informe de avance del Barómetro de la Deuda Social de la Infancia 2010-2020: “Efectos del ASPO Covid-19 en el desarrollo humano de las infancias argentinas”.
La presentación estuvo a cargo de Ianina Tuñon, investigadora responsable del ODSA y contó las contribuciones de Marcelo Miniati, director ejecutivo de Fundación Cimientos y Mariana Parola, directora Ejecutiva de Fundación Haciendo Camino. Moderó Carlos March, director de Inteligencia Colaborativa en Fundación Avina.
El estudio revela que la pobreza llega al 44,2% de la población total y al 64,1% del segmento de niños y adolescentes, mientras que el 15,5% de los menores de 18 años sufrieron inseguridad alimentaria severa en el último año. Forman parte de los 4,5 millones de niños y adolescentes de entre 0 y 17 años que viven en hogares en los cuales, por problemas económicos, se redujo la cantidad de alimentos consumidos.
Según el relevamiento del ODSA UCA, los adolescentes de entre 13 y 17 años son los que más han sufrido episodios de hambre. La inseguridad alimentaria severa llega en ese caso al 18,9%, mientras que en 2019 era de 14,4%. El índice es de 16,7% entre los niños de 5 a 12 años (15,1% el año pasado) y de 9,5% en el grupo de niños de 0 a 4 años (en este caso hubo una disminución respecto del 11,9% de 2019).
Tuñón estimó que hay 4,5 millones de niño con insuficiencia alimentaria total y, dentro de esa población, 2,04 millones con insuficiencia severa.
“La Tarjeta Alimentar tuvo un efecto positivo y protector de la primera infancia en el espacio de la alimentación”, afirma el estudio, y sostiene que sin ese programa la pobreza entre los menores de 19 años hubiera sido de 66% en lugar del 64,1%, en tanto que la indigencia hubiera trepado al 19,1% en lugar del índice de 16% registrado.
El informe del ODSA UCA también muestra que un 2,2% de los estudiantes no mantuvo ningún contacto con sus docentes durante el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO) y que la probabilidad de haber quedado afuera de las clases remotas aumenta a medida que el estrato socioeconómico de los hogares disminuye. En las capas más bajas, llega al 5%.
El relevamiento del ODSA UCA incluyó a 5.728 hogares en los que viven 17.920 personas, de las cuales 4.220 son niños. El relevamiento abarca a los centros urbanos con 80.000 habitantes o más e incluye a la ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense, Gran Rosario, Gran Córdoba, San Miguel de Tucumán – Tafí Viejo, Gran Mendoza, Mar del Plata, Gran Salta, Gran Paraná, Gran Resistencia, Gran San Juan, Neuquén-Plottier-Cipoletti, Zárate, La Rioja, Goya, San Rafael, Comodoro Rivadavia y Ushuaia Río Grande.
El informe completo puede contemplarse en “Efectos del ASPO Covid-19 en el desarrollo humano de las infancias argentinas“.