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Sudáfrica 2010: la FIFA no cambia más…

Aquellos que lo vieron de cerca frente la TV dijeron que la única reacción del árbitro uruguayo Jorge Larrionda fue un “oh, mi Dios”, cuando se dio cuenta de que la pelota entró unos 40 centímetros en el arco de Alemania, tras el remate del inglés Frank Lampard. Algo parecido ocurrió cuando el italiano Roberto Rosetti se enteró de que Carlos Tévez estaba en posición adelantada tras plasmar la apertura argentina; es más, hasta les habría reconocido la equivocación a algunos integrantes del seleccionado mexicano. Fueron dos casos, puntuales y decisivos, que reabrieron el largo, casi eterno, debate sobre el uso de la tecnología en el fútbol.

La FIFA emitió un comunicado y, como siempre en estos casos, no evaluó en público a los jueces. “No se hará ningún comentario sobre las decisiones del árbitro en el partido”, se leyó después de la victoria de Alemania. Sin embargo, el secretario general de la entidad, Jerome Valcke, admitió: “Se adoptaron algunas decisiones que no fueron buenas. No tenemos tiempo para instrumentar cambios de inmediato. Eso puede ocurrir para el Mundial de 2014”. Aunque, rápidamente, Valcke descartó el uso del video o de una pelota con chip: “Eso no es objeto de discusión”.

Lampard clamó a viva voz por el uso de la tecnología. “La posición adelantada se ve muy clara en la repetición. Un gol en los octavos de final es mucha diferencia”, dijo el argentino nacionalizado mexicano Guillermo Franco. Pero todo indica que la FIFA mantendrá su posición. Según trascendió, seguirán durante el año las pruebas con los “árbitros de meta” ubicados al lado del arco. Tras los ensayos en la Liga de Europa, las pruebas continuarán en la próxima Liga de Campeones y en las eliminatorias para la Eurocopa 2012.

La jugada de Larrionda no dejó dudas. La de Rosetti estalló cuando se repitió el gol argentino por las pantallas del estadio, sobre todo en el cuerpo técnico de México. El reglamento dice que no pueden emitirse las jugadas controvertidas, pero sí los goles… Así se volvió todo más explosivo.

Precisamente, los medios italianos fueron de los más duros con su compatriota. “Rosetti se equivoca, Argentina no”, publicó en su sitio La Gazzetta dello Sport , que calificó como un “verdadero regalo” el primer gol del seleccionado albiceleste. Corriere dello Sport unió los casos: “Escándalo Mundial”. Y también habló de la “tempestad sobre los árbitros”. “No se animaron a dar marcha atrás”, dijo Tuttosport sobre el árbitro Rosetti y el asistente de línea Stefano Ayroldi.

Hubo repercusiones por todas partes. Si hasta tomó la palabra Javier Castrilli: “La responsabilidad es de la FIFA. Ahora se dan cuenta…”. Y el ex árbitro argentino se detuvo en el gol que no le cobraron a Inglaterra. “Tampoco el asistente puede ver el gol porque es un remate de media distancia y él no llega a ubicarse en la línea de gol antes que la pelota. Tiene que ver en diagonal y, ante la duda, no puede dar el gol.”

Las miradas se detuvieron sobre ellos. Larrionda llegó como uno de los mejores árbitros en América del Sur. Rosetti había dirigido la final de la Eurocopa. La FIFA sabe que el tema es más profundo, mucho más profundo.