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Sube y baja como en ascensor… Echagüe se cae otra vez

Luego de tres derrotas en cadena, Sarmiento pudo ganar. En el último cuarto aprovechó los bajísimos porcentajes de Echagüe y se impuso por 75 a 70 con un parcial de 22 a 10 mediante. A pesar del triunfo el equipo de Resistencia todavía no consiguió despegarse de la última posición de la Zona Norte, ubicación la cual implicará quedar eliminado de forma prematura. Al respecto quedó medio punto debajo de Comunicaciones ante quien mantiene ventaja. Los de Entre Ríos bajaron al 9° peldaño.

 

El venezolano Miguel Ruiz aportó doble figura (15+14+4 robos) y fue uno de los destacados de Sarmiento junto con Néstor Serantes (17) y Sergio Rupil (17). La diferente producción de las bancas de suplentes resultó una de las claves. En ese rubro Sarmiento se impuso 27 a 3.

 

Echagüe tuvo el arranque soñado. Con defensa consistente y ofensiva tan inteligente como eficaz, logró sacar en menos de 3 minutos 7 puntos de luz.

González, Carnovale, Murray y Stival reafirmaban la tendencia esperada de enhebrar un ataque variado, con amplia participación en las resoluciones, manejando tiempos y velocidades de ejecución.

 

El 0-7 motivo un prematuro pedido de Tiempo Muerto para el coach local, detención tras la cual, Acevedo cortó una esterilidad de casi 4 minutos.

La reacción fue efímera, en segundos, Murray clavó un triple y luego González volvió a influir abajo para que la brecha sea de 11 promediando este primer cuarto.

 

El venezolano Ruiz intentó que germine una sublevación chaqueña, sin embargo el equipo de Paraná, respondía como tal, colectivamente impecable e implacable. De hecho, Carnovale y Stival ampliaron a 13 la máxima ante un rival sin respuestas anímicas, ni técnicas.

Con el trámite controlado y una altísima temperatura en el gimnasio, Barsanti vio la diferencia de 14 y apeló a modificaciones.

 

Mandó a la cancha a Morales y a Cabello para que descansen Carnovale y Murray. El colega del “Titi” también promovió mutaciones y sacó al base titular (Insaurralde) dándole paso a Ferreyra.

Si bien aparecieron Rupil y Acevedo con gol externo para bajar el margen, la irrupción en escena de Zustovich con Bola de Tres puso en el epílogo calma para los de Entre Ríos.

 

En la clausura de estos primeros 10, Serantes colaboró con la causa “Aurirroja” para sentenciar un 14-24 que disimulaba el mal trance de Sarmiento en el comienzo del juego.

Echagüe fue de mayor a menor. Apertura tremenda y paulatinamente, se resintieron estados físicos como en sí se alteró la formación tan homogénea que había abierto la contienda.

 

Un 5-0 mediante manos de Rupil bajó a 6 la distancia y causó alarma a Barsanti quien primero regresó al rectángulo a Stival y a Murray, y después a Carnovale.

Si bien Serantes causó mayor preocupación colocando a Sarmiento a 3, Murray se destapó con un 0-7 y otorgó 10 de luz a Echagüe.

 

Otro Time Out de Castro y más cambios en el dueño de casa. El “Stop” impuesto por el técnico del anfitrión surtió efecto. Parcial de 4-0 de la dupla Ru-Ru (Ruiz/Rupil) y se redujo la brecha a 5.

Ahora era Barsanti el confundido y molesto por los altibajos de sus dirigidos, amén de las virtudes ajenas.

 

El coach de Paraná apeló a nuevas variantes, aunque el destino le era cruel… La sociedad Rupil-Ruiz era ingobernable, indominable, y Sarmiento pasó a ganar por 5.

En el pase a vestuarios volvió a aparecer Ruiz Moreno, hasta allí poco influyente, y al menos achicó a 3 la desventaja. 36-33.  Un 22-9 inquietante. ¿Cuál era la verdadera cara del AEC?

 

Del recreo largo, Sarmiento volvió inicialmente encendido. Triple de Acevedo y doble de Rupil para ampliar ventaja de 8.

Pero bastó que se pongan de acuerdo González y Ruiz Moreno, como que luego se sume Murray, para establecer un parcial de 0-11 con el cual Echagüe volvió a marcar hegemonía ante un estupefacto adversario, que en segundos, se cayó a pedazos.

 

Acevedo y Ferreyra no bajaron los brazos y promovieron otra insurrección, aunque la rebeldía chaqueña fue sofocada por González, Murray y Ruiz Moreno para entrar a los 3 finales con 4 de luz.

Serantes bajó a 2 la luz, pero Carnovale al 100 % desde la línea y Ruiz Moreno de Tres sembraron margen de 7 entrando al último minuto de la media hora.

 

El 12-22 de este capítulo reedificó un triunfo transitorio visitante por 48-55. Daba la sensación que cuando quería, cuando se lo proponía, Echagüe jugaba con coherencia y era eficaz. Pero a la vez, esa sagacidad para atacar el aro por el lado más conveniente, se traducía en defensas equilibradas que impedían correr y tomar tan cómodos tiros a su oponente.

La percepción es que Echagüe dependía de sí mismo…

 

¿Qué decíamos? ¿Qué pensábamos? ¡Qué Echagüe podía ganar tranquilo si no se apresuraba, si no caía en individualismos tontos, si seleccionaba las manos acordes para definir y si en el retorno a su costado, defendía con actitud, con atención, cerrando las vías más “calientes” de su rival.

Comenzó el 4° tiempo y entre Ruiz y Serantes aplicaron un correctivo. Parcial de 9-0 y Sarmiento arriba por 2. Increíble. Se desequilibró ante el pickandroll, no se controló el rebote ofensivo y menos las penetraciones.

 

Para colmo, frente o bajo el aro local se lanzaba sin cortinas previas o se apelaba a tiros poco confortables, o los que se lanzaban cómodos luego de una correcta distribución se tomaban con mano desacertada. Hasta hubo bandejas alocadas y pese a rebotes ofensivos no se consiguió revertir el mal momento. Todos erraban.

El tiempo muerto luego de un triple local era irreversible, y Barsanti buscó que sus hombres recuperen la memoria.

 

El DT de nuestra ciudad apeló a otra transformación del quinteto. Stival, Carnovale y Murray a la cancha. La innovación no trajo frutos. El estadounidense y Ruiz Moreno desperdiciaron dos acciones al hilo y Rupil resurgió para que la distancia sea de 4 en el acceso a los 6 finales.

Carnovale, de nuevo al 100 % en Libres y un triplón de Ruiz Moreno le devolvieron la vida a Echagüe que pasó arriba por uno con un 0-5, francamente a esta altura inesperado.

 

Obviamente… Minuto de Castro. Sarmiento desconcertado. Pero esa confusión duró poco. El head coach del elenco de Resistencia hizo lo suyo y sus jugadores le respondieron más allá de un susto por otra bomba de Ruiz Moreno.

En otra reacción “Aurirroja” tuvieron implicancia neta Luna con 4 puntos y Ruiz con un doble. Sarmiento arriba por 2 faltando poco menos de 3 minutos.

 

Antes del acceso al último minuto, Carnovale y Ruiz Moreno no acertaron de Tres. Ambos lanzamientos lejos de ser ideales, en especial el del guardia que no tocó el aro, en una jugada muy sucia, con demasiado pique de bola.

Ruiz permitía que Sarmiento esté al frente por 2. En verdad, Ruiz y una notable faena del grandote Luna, rústico, pero ficha interesante como para seguir observando.

 

Stival fue a la línea en una rara acción donde, creemos, Ruiz le había robado la pelota con legalidad, pero uno de los jueces vio falta.

El base metió 2/2 y todo empardado.

 

En el otro costado Murray le cometió foul a Luna, pero esta vez el “Gigante” desentonó convirtiendo 1 de 2.

En la respuesta, Murray procuró penetrar con una bandeja poco clara, aunque un rebote lo benefició y bola para Echagüe. 66-65. 29 segundos para caer el telón.

 

Minuto Barsanti. Repone Echagüe. Otra vez Murray intenta penetrar y Ruiz le pone un tapón extraordinario. Sale Rupil en contragolpe y lo corta Carnovale, en una situación que dejó inicialmente dudas sobre si no fue una falta antideportiva.

En realidad, es lo que todo el estadio pidió y por TNA Contenidos se aprecia una caída aparatosa del jugador de Sarmiento como si lo hubiesen ametrallado o fulminado por un rayo, quizás trastabillando por el estado del parqué.

 

Luego de una y mil secadas de cancha se repuso el juego y Stival cortó rápido a Ferreyra. Otra reposición desde centro de Campo.

Tras la misma, buena defensa de Echagüe y Murray intercepta una pelota por mala opción de Serantes y en la transición termina el propio Murray buscando el doble de modo ultra incómodo.

 

Rebote de Luna. Corte de Carnovale. Primero adentro. Segundo afuera. González bloquea el ingreso al rebote ofensivo de Ruiz, y el venezolano por arriba de las manos del centro de Echagüe trata de recuperar el balón pero lo hace salir por línea final.

Era bola para Echagüe, aunque el juez ubicado justo allí, vio otra cosa. Sentenció que la pelota había tocado en la punta de las cutículas de González. Inconcebible.

 

Lógicamente, estalló González y luego de una y otra increpación hacia el árbitro, fue penado con Técnicas y descalificado.

Tiempo muerto de Barsanti. 67-65. 5 segundos. Protestas a granel de Echagüe que no pensaba lúcidamente en lo que aún restaba desarrollarse. Y así salieron los 5 a ver qué pasaba con los Libres de Serantes. Sin haber hablado con el técnico. Desconsolados, tensos, nerviosos sin la más mínima idea de qué podía hacerse y hasta con signos de no entender qué pasó con González, quien debió abandonar la cancha.

Serantes lanzó el primero y falló. Tiró el 2° y adentro. 68-65. Reposición desde mitad del rectángulo para Sarmiento.

 

Solo, sí… solo se fue Ferreyra para el aro y definió el partido por 5. 70-65. Ni siquiera eso contempló Echagüe. Bajó los brazos por completo. Se quedó vacío inexplicablemente. Como si algo íntimo se hubiese roto en el seno del grupo y hasta en la dirección.

Difícil poder interpretar que hayan declinado tanto. O que una calentura momentánea (e inoportuna) pueda ocasionar tanto daño.

 

Una derrota que duele por el cómo. Echagüe sigue extrañando (o necesitando…) horrores un cable a tierra. Un CEREBRO. Adentro, no lo tiene, y afuera, anoche Barsanti demostró que su juventud le puede jugar una mala pasada y dejar huérfano a sus orientados nada menos que en un final.

Pero aparte hubo otros rasgos que se disimulan en el triunfo y afloran en los malos ratos o en el revés.

 

Peor todavía… Murray dio signos como que ALGO en él se quebró en lo atlético respecto al debut. Tiene el salvoconducto, la justificación plena que recién llegó y enseguida se puso el traje para trabajar con un grupo y un técnico a los cuales no conoce.

Aunque ojo… Nos parece que algo en él mutó respecto a su explosión física. Como si el golpe en el tercer cuarto ante Hindú significó una bisagra y este martes no rindió de acuerdo a lo que PUEDE rendir.

Habrá jugado al 100 % de sus posibilidades? Solo lo sabe él, cuerpo técnico y jefe de Equipo. Lamentablemente, desde el área Prensa ni se mencionó su golpe y nuestros colegas tampoco aludieron a ello.

 

¿Habrá estado a full luego de semejante caída? Tuvo minutos bárbaros pero después, poco a poco, decayó rotundamente. Y sin un Murray más potente en lo físico y certero en sus definiciones, se lo extrañará demasiado a Kirkland.

Todo esto no lo diríamos si hubiese una comunicación clara. Y sí… tristemente, no podemos exigirle eso a Echagüe cuando tampoco ocurre en Liga con Sionista y la mayoría de los elencos.

 

Es como que periodismo y público debe enterarse que un jugador está lesionado cuando no se lo ve en la cancha, o juega horrible. Así, complejo hablar con la imprescindible propiedad. Y estamos seguros, convencidos, en que no es una cuestión de falta de capacidad de los responsables de esa función, sino que son órdenes desde arriba en lo relativo a de qué se puede o no hablar en los partes. De lo contrario, estamos a tiempo para plasmar un cambio sensible en lo informativo. Sin hesitar, sería fundamental un replanteo. La afición y los comunicadores, nos merecemos que se hable lo más transparente posible para difundir con las certezas ineludibles.

 

La síntesis

 

SARMIENTO (Resistencia) (8-19) 70-ECHAGÜE CLUB (Paraná) (12-18) 65

 

Sarmiento (70): Agustín Insaurralde 0, Lautaro Toranzo 0, Néstor Serantes 17, Sebastián Acevedo 11, Miguel Ruiz 15 (fi); Santiago Ferreyra 4, Sergio Rupil 17, Ignacio Luna 6. DT: Gastón Castro. Atl.

Echagüe (65): Matías Stival 9, Lisandro Ruiz Moreno 17, Agustín Carnovale 8, Michael Murray 16, Santiago González (descalificado) 12 (fi); Eugenio Zustovich 3, Sebastián Cabello 0, Julián Morales 0, Eliseo Cassano 0. DT: Ignacio Barsanti.

Árbitros: Alejandro Trías y Alberto Ponzo. Parciales: 14-24, 36-33 y 48-55. Estadio: Sarmiento.