Sin feriado para el Clausura LPF
El feriado por el Día de la Soberanía no significa descanso para la competencia futbolística local. Paraná y Patronato reeditan el clásico de la ciudad, por un lugar en semifinales. Mientras que en Primera B, se juega la última fecha, donde Instituto llega con dos puntos de ventaja y una amplia diferencia de goles a favor sobre San Benito. Todo va desde las 17.
En el nivel superior, Paraná y Patronato se juegan mucho más que el orgullo en uno de los clásicos más importantes de la ciudad. Quien gane el duelo accederá a semifinales, donde ya esperan Belgrano (el rival de cualquiera de los dos), Universitario y Neuquén (se enfrentarán entre sí), vencedores de sus series el sábado pasado. En caso de igualdad habrá penales.
En la Primera B está en juego el ascenso. A la última fecha llegan en definición cabeza a cabeza Instituto y San Benito. El primero lleva dos puntos por sobre los benedictinos.
Haciendo honor a su apodo, Instituto buscará La Gloria del ascenso directo, cuando visite a Ciclón del Sur, en cancha de Sportivo Urquiza. Debe ganar o empatar para asegurarse la vuelta olímpica, aunque si su escolta no vence ya le bastará para tener el título. Si empata y gana San Benito la amplia diferencia de gol lo ascenderá a Instituto.
En su ciudad, San Benito hará las veces de visitante ante Aufi (que no posee estadio propio). Tal cual lo mencionado en el párrafo anterior, sólo le sirve un triunfo para mantener posibilidades y esperar el milagro de que el puntero actual pierda para dar la vuelta olímpica.
Los otros dos juegos de la segunda categoría también tendrán algo en juego. En la Ciudad Universitaria, Oro Verde recibirá a Don Bosco.
El local debe ganar para alcanzar en puntos a su rival y esperar que los cálculos sean favorables en diferencia de gol. El Salesiano, en tanto, con un empate se asegura un lugar en el cuadrangular que definirá con el penúltimo de la A quién juega el próximo año en la máxima categoría del fútbol paranaense.
En Crespo, Cultural y Argentino Juniors jugarán también lo suyo. El Celeste pretende cerrar bien un año para el olvido (marcha último) y el Albiceleste prepararse para el cuadrangular, donde ya tiene su lugar asegurado.