Maran Suites & Towers

Se habla de ajuste, pero… Organizar la previa del G20 costará al país más de $ 430 millones

La Argentina asumirá el 1° de diciembre la presidencia del G20, el mecanismo de cooperación económica y financiera que reúne a 20 gobiernos de naciones industrializadas y en desarrollo. Ese día echará a rodar una trabajosa maquinaria que implica la organización integral de al menos 43 eventos preparatorios a la cumbre de los presidentes, por celebrarse a fines de 2018, y que motivó la contratación de una compañía alemana y otra de origen suizo para ejecutar el detalle de cada cita.

 

Messe Frankfurt, aliada a MCI, resultó adjudicataria de un contrato por $ 436.942.920 con el Estado, gestionado por la Unidad Ejecutora G20, a cargo de la abogada Natalia Zang, quien responde al secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, y al vicejefe de gabinete Mario Quintana.

 

En septiembre, la compañía de capitales alemanes presentó una oferta por $ 483 millones, muy por encima de los $ 372 millones ofertados por la única competencia que tuvo en la compulsa, Dialal, una SRL argentina dedicada a los servicios de agencias de viaje que fue descartada por incumplir los requisitos mínimos del contrato, que tuvo formato de licitación.

 

Messe Argentina pertenece en un 15% a la firma Indexport, y en un 85% a Messe Frankfurt GmbH, cuyo control accionario está en manos de la ciudad de Fráncfort y del Estado de Hess. Dicha compañía participó de los eventos preparatorios del G20 en Alemania, y cuya postal final resultó dañada por el virtual estado de sitio en el que se sumió Hamburgo, en julio pasado, con ocasión del encuentro de presidentes, como producto de las protestas de grupos anticapitalistas y globalófilos.

 

Los eventos ocurridos en Alemania tuvieron como responsable mayor a Jürgen Christian Mertens, por entonces jefe de protocolo del ministerio de Relaciones Exteriores del gobierno federal, hoy a cargo de la embajada en Buenos Aires. La llegada de Mertens al país, dicen en Cancillería, fue parte de un acuerdo sellado entre Merkel y Macri, en la visita que la canciller hizo en junio al país. En la embajada no dan crédito a esa versión. Sin embargo, el diplomático es fuente de consulta habitual para los diversos funcionarios involucrados en los preparativos, a los que el Gobierno les ha otorgado suma importancia.

 

De acuerdo a los detalles del contrato, confirmado en el Boletín Oficial del 25 de octubre, Messe tendrá a su cargo el evento disparador de la cumbre, la reunión de viceministros de Finanzas y segundas líneas de bancos centrales, en Bariloche, el 1´ de diciembre.

 

Se calcula que unas 12.000 personas pasarán por las citas preparatorias a la cumbre de líderes, por celebrarse en Buenos Aires en fecha incierta. Siendo así, el Estado desembolsará alrededor de u$s 2000 por persona, sin contar aéreos ni estadía.

 

¿Por qué una única empresa estará encargada de toda la operativa? Para el Gobierno, la “multiplicidad de componentes” involucrados en los servicios a prestar “hace indispensable unificar en un único proveedor la responsabilidad”. No obstante, Messe y MCI recurrirán, al menos, a unos 150 proveedores de distintas partes del país, dada la intención del Gobierno de esparcir los encuentros en varias provincias. Se estima, además, que entre el 32% y el 35% del valor del contrato volverá al Estado a través de impuestos nacionales, provinciales y municipales.

 

Un tema pendiente entre los costos tiene que ver con la seguridad, cuya responsabilidad depende en una mesa coordinada por el ministerio de Patricia Bullrich, y con participación de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) y Defensa. En la Casa Rosada evitan dar precisiones sobre el gasto operativo, que podría acercarse al costo de la organización integral de estos eventos preparatorios.