Se acentúan las dudas por lo que declararon Kueider y su secretaria en Paraguay

La sociedad Golsur S.A., que el senador Edgardo Kueider y su secretaria, Iara Guinsel Costa habrían mencionado para justificar los 200 mil dólares ingresados de manera irregular a Paraguay, tiene una sede ficticia en un edificio de oficinas del centro de Asunción donde funciona el Consulado Argentino en esa capital.

Para los investigadores del caso, la firma, que en su web se patrocina como “una empresa constructora líder”, podría ser una firma “fantasma” o pantalla. Si bien en su página web ilustra que sus oficinas funcionan en un edificio fácilmente ubicable en Asunción, no da precisión sobre la dirección o teléfono del mismo. Pero los colegas de Clarín pudieron constatar que en la torre en cuestión, llamada Plaza Center, no tiene su sede la firma. Sí otra constructora en el octavo piso y el Consulado general argentino, en el cuarto piso.

El origen y el destino de los fondos incautados en la camioneta Chevrolet Trailblazer que conducía el senador Edgardo Kueider, acompañado por su secretaria Iara Grisel Costa sigue siendo incierto.

Las autoridades del Dirección de Ingresos Tributarios (DNIT), una suerte de AFIP en el vecino país, siguen esperando que los patrocinantes del senador entrerriano presenten la documentación correspondiente. En paralelo, los fiscales que instruyen la causa penal han pedido documentación que respalde los dichos de la joven secretaria en los que había justificado esos fondos, como parte de su vinculación a la firma Golsur S.A.

Tanto el senador entrerriano como su joven acompañante son representados por el abogado Ricardo Preda, un reconocido penalista del Paraguay que se encargó de costear “el alquiler” del departamento que ocupan en Tierra Alta del Maestro, en el exclusivo barrio de Villa Morra.

El letrado se encarga de todas las diligencias legales de los acusados. El juez que lleva la causa, Humberto Otazú, tiene su despacho en la capital paraguaya pero los fiscales intervinientes, como Edgar Benítez, revisten en Ciudad del Este, donde había sido detenido el dirigente entrerriano.

Aún las autoridades del DNIT no saben si será Preda quien represente a Kueider en el proceso administrativo que inició el organismo para determinar si hubo contrabando y que ya instruye una jueza. El sumario demandará al menos 90 días. 

Será el Ministerio Público y el juez Otazú, en última instancia, quienes definan la continuación o no del arresto domiciliario de ambos detenidos. Para las fuentes consultadas, no sería extraño que debieran permanecer en esa condición al menos durante los tres meses que duraría el sumario iniciado por el organismo recaudador.