Rubén Almará consolida un estrecho vínculo con el Pueblo

Rubén Almará continúa de manera incesante, su recorrida por los barrios de Paraná, recogiendo inquietudes de la ciudadanía y acumulando valiosa data sobre los pormenores que afectan a la comunidad capitalina. El precandidato a intendente no ocultó su preocupación por las problemáticas que ha atestiguado en un mero pantallazo divisado en caminatas junto a abnegados vecinalistas.

 

Completar pavimentación de las calles, profundizar el mantenimiento en la trama vial a raíz de vertientes que agudizan grietas, y continuar el mejoramiento de desagües cloacales sigue siendo hasta hoy una cuenta pendiente de la Comuna que a cuenta gotas asiste a barrios como Villa Hermosa, donde sus vecinos no ocultan su ansiedad, desasosiego, pues varias viviendas se han asentado en terrenos fiscales y desde hace varios años se viene requiriendo al municipio las soluciones tendientes a poder concretar la regularización catastral.

 

También, Almará ha constatado la compleja situación de aquellos que viven debajo de las líneas de alta tensión de energía eléctrica, siendo las mismas nocivas para la salud, como es alarmante la nebulosa legal ligada a terrenos baldíos descuidados que terminan sirviendo de refugio para los delincuentes que acechan a sus víctimas las cuales son arrebatadas o robadas a mano armada.

El actual legislador provincial caminó además por los barrios 20 de Junio y Presidente Illia donde las calles de broza ocasionan molestias respiratorias a niños y adultos mayores.

Otro débito de la presente gestión es habilitar obras de saneamiento y desagües pluviales y cloacales, como se requieren alcantarillas para favorecer el escurrimiento de agua los días que llueve profusamente.

 

De modo fundamental, la situación de abandono que perciben los vecinos del barrio Illia es angustiante. Ni siquiera los servicios esenciales se prestan de forma correcta. La trama vial es inexistente, las vertientes y los terrenos irregulares e inundables destruyen las calles permanentemente, tornándolas intransitables.

 

Han peticionado a las autoridades que realicen trabajos de nivelación y relleno pero, hasta el momento, no se han hecho presente, comprobándose que varios vecinos han perdido absolutamente todo. En su momento, reclamaron asistencia y hasta ahora, no han recibido absolutamente nada.

 

Más grave es que entre los líquidos que inundan los terrenos, se puede distinguir claramente la presencia de aguas servidas que emerge de las napas. El riesgo para la salud es preocupante. El ambiente con el que deben convivir es completamente desfavorable y genera un sinnúmero de enfermedades.

 

También la falta de recolección de residuos, ocasiona la convivencia de ciudadanos de ese sector con mini basurales que se van gestando de modo constante.

 

Por otra parte, el alumbrado del barrio es deficiente. Son pocas las luminarias para un lugar que, por sus características, demanda iluminación para poder transitar con comodidad y tranquilidad.

 

Ya en la zona este de la ciudad, Rubén Almará estuvo con los vecinos de Las Rosas y El Trébol donde constató las graves deficiencias en materia de transitabilidad como la carencia indisimulable de desagües pluviales ni alcantarillas, más una proliferación impresionante de minibasurales.

Amén de ello, se aprecia una falta absoluta de desmalezameintos y la limpieza de espacios verdes, tornándose todo más complejo con la falta de luminarias y la ausencia total de mantenimiento de las existentes.

En Los Arenales y Toma Nueva, durante las últimas las lluvias, los habitantes del lugar estuvieron aislados por días enteros, debido a que las calles se tornaron intransitables, impidiendo que automóviles de alquiler y ambulancias, entre otros, no pudieran ingresar.

 

Más delicado todavía fue el certificar que los pozos negros suelen llenarse rápidamente y desbordarse en reiteradas ocasiones. Los trámites burocráticos que deben realizar los vecinos para conseguir el desagote tienen una demora importante que los empuja a tener que convivir con los líquidos cloacales durante semanas enteras.

 

Del mismo modo, se hace sumamente necesaria la concreción de obras de contención de las barrancas porque, cada vez con mayor frecuencia, sufren las consecuencias de los derrumbes. La situación empeora cuando se registran lluvias, porque la tierra se convierte en barro que termina ingresando en las precarias viviendas.

 

Si bien en el Barrio Los Arenales, se ha delimitado un sector donde se está trabajando junto a beneficiarios del programa Argentina Trabaja en obras de mejoramiento de la trama vial, veredas, cordones cuneta y defensas contra inundaciones, el resto de la popular barriada padece la desidia y el abandono de parte del municipio.

 

De hecho que el precandidato pudo observar que los vecinos todavía sufren las consecuencias de los temporales de principio del mes de marzo. Un número importante de familias todavía padecen los resabios de las inundaciones. Tienen que arreglársela como pueden porque la asistencia de la comuna no llegó hasta el lugar.

Los terrenos donde están asentadas las precarias viviendas se anegan rápidamente cuando llueve, no sólo como producto de las precipitaciones, sino también por las aguas servidas que brotan de los pozos ciegos que colapsan, provocando severos problemas sanitarios en la población más vulnerable, principalmente, en los niños.

 

Ni las bombas que han colocado los vecinos para poder desaguar lugares es suficiente para terminar de sacar el agua de varios terrenos que, al día de la fecha, continúan convertidos en verdaderos bañados.

 

Por último, Almará anduvo por San Cayetano y ATM V donde mantuvo charlas con los vecinos que salían a su encuentro y aquellos que lo recibieron en sus viviendas.

 

Caminando por el Barrio La Palangana, Rubén Almará pudo visualizar que gran parte de la problemática de las familias que viven en la zona pasa por el Arroyo Colorado. Ninguno de los vecinos está exento de convivir con la contaminación que provoca el curso de agua. Nadie puede precisar cuándo fue la última vez que la comuna realizó una limpieza y un mantenimiento del mismo.

 

Gran parte de los pobladores tienen asentadas sus precarias viviendas en las márgenes del arroyo por lo que están muy pendientes del peligro latente del desmoronamiento de las mismas. Las gestiones municipales pasan por el gobierno y sólo dejan promesas de solución para esos vecinos que, además, carecen de varios de los servicios esenciales.

 

El barrio también presenta precariedad en el sistema de desagües y un sinfín de inconvenientes en los desagües cloacales. Muy a menudo se puede observar como el agua servida se mezcla con el paisaje y como el agua brota, generando daños en calles y pasillos. En tanto, demandan una recolección de residuos más eficaz y operativos de desmalezamiento más períodos.

 

El déficit en la recolección de residuos, la carencia de mantenimiento de espacios públicos, la ausencia de operativos integrales de limpieza y la carencia de desmalezado, se han ido profundizando con el transcurrir de los años en ATM V. Si bien, han efectuado reclamos por diversas vías, la respuesta que obtuvieron fue una sola: Nada.

 

Aprovechando la visita del precandidato a jefe comunal, manifestaron que desde hace un tiempo aguardan la llegada del pavimento para varias calles de la zona. Durante la administración de José Carlos Halle se construyeron los cordones cunetas – fueron pagados en forma íntegra por los vecinos – con el compromiso de que, a la brevedad, se asfaltarían pero, eso nunca ocurrió.

 

Con la llegada al gobierno de Blanca Osuna, la promesa se renovó pero, tampoco hubo asfalto para ese sector de la ciudad. La última noticia que tuvieron del tan ansiado pavimento fue cuando desde la comuna anunciaron que las calles estaban comprendidas entre las 500 cuadras que se asfaltarían con fondos nacionales pero, la realidad demuestra otra cosa.

 

Almará difundió los lineamientos de su propuesta de trabajo para el municipio y tomó nota, individualizó los inconvenientes específicos de los distintos sectores de la comunidad para luego analizarlos exhaustivamente junto a sus asesores técnicos y tras ello, volver a cada sector de esta capital presentando proyectos firmes de soluciones para concretar en el caso que sea ungido por el voto mayoritario.