Roxana Lizarraga es una vergüenza mundial: “Sus compañeros periodistas están haciendo denuncias falsas”
|Mientras periodistas argentinos soportaron ser violentados, intimidados, amenazados y expuestos como sediciosos por sus coberturas de la crisis en Bolivia, la ministra de Comunicación del gobierno autoproclamado, Roxana Lizárraga, protagonizó hoy un cruce con Ernesto Tenembaum y acusó a los trabajadores de prensa de “hacer denuncias totalmente falsas”. “No sé a qué juego se estarán prestando”, dijo.
En una tensa entrevista en Radio Con Vos, Lizárraga, ministra del gobierno interino de Jeanine Áñez, fue consultada sobre los violentos momentos que sufrieron periodistas argentinos y que llevaron a equipos periodísticos, como los de TN y Telefe, a pasar la noche a resguardo bajo la protección de la embajada. También debió responder sobre su amenaza, ayer, sobre eventuales causas por ” sedición” a los reporteros.
“Lo que ustedes están informando es totalmente falso”, contestó la abogada y periodista boliviana y comenzó una extensa respuesta de más de cinco minutos en los que afirmó que su gobierno interino, tras la renuncia de Evo Morales ante la presión de las Fuerzas Armadas, lleva adelante una “tarea de pacificación” y de “recuperar la democracia”. En el medio, Tenembaum fracasó en varios intentos de realizarle preguntas, lo que llevó a un primer cruce.
-Ministra, ¿usted me está escuchando?
-Te estoy respondiendo a una pregunta. Te escucho y no tengo mucho tiempo, por favor.
-Bueno, si no tiene tiempo, le pido por favor que tengamos un diálogo porque si habla siete minutos seguidos y respondiendo solo al final la pregunta que yo le hice es un poco difícil y es bastante confirmatorio de la preocupación que yo tengo. Porque no se está dialogando sino que se está imponiendo un discurso. Así que le pido por favor: si usted tiene ganas, si le parece -si no, no, tiene todo el derecho del mundo-, conversemos.
Consultada nuevamente por las agresiones sufridas por periodistas y la amenaza sobre una posible condena por sedición, Lizárraga respondió: “A mí me caracteriza en mi trayectoria de periodista la transparencia y la honestidad. Yo hablo de sedición de los grupos irregulares que han existido en mi país, que están montados y manejados por las embajadas de Cuba y de Venezuela, que están con algunas personas del régimen de Evo Morales. La sedición misma que hace Evo Morales, que llama a la confrontación, y de los guerreros digital”.
En medio de la tensión, la ministra atendió su teléfono y luego intentó terminar la entrevista abruptamente, mientras invitaba a los periodistas extranjeros a una reunión con la presidenta interina esta mañana para que “digan dónde los han hostigado y quiénes los han seguido”. Entonces pusieron al aire el audio en el que habla de sedición y la ministra respondió: “Estoy hablando de Telesur, que esté pasando información falsa. Porque todavía obedece a la dictadura de Nicolás Maduro. Nosotros no podemos permitir que periodistas que vengan del extranjero traten de causar una confrontación entre bolivianos. Tienen que someterse a la ley”.
En ese sentido, desmintió a los periodistas argentinos que sufrieron actos de violencias, algunos de ellos incluso en transmisiones en vivo. “Sus compañeros periodistas están haciendo denuncias falsas sobre este tema”, le dijo a Tenembaum. “Los hechos que están denunciando son totalmente falsos. Todo lo que están denunciando, la persecución que están denunciando es totalmente falsa. No sé a qué juego se estarán prestando”, agregó.
“Los periodistas tienen todas las garantías, nadie los ha buscado. No tengo siquiera los nombres de sus compañeros”, agregó la ministra. “Me da miedo dárselos”, le respondió el periodista argentino. “No te tiene que dar miedo. Ustedes tienen una posición y no me voy a prestar a ello. Hasta luego”, retrucó Lizárraga. Y cortó el teléfono.
Sedición
“Ya se tiene identificado a los periodistas extranjeros que están causando sedición y el Ministro de Gobierno va a tomar las acciones pertinentes en todo esto. Tienen que responder a la ley boliviana”, había dicho ayer Lizárraga sobre los “periodistas que son en algunos casos bolivianos y en otros extranjeros” y les reclamó que hagan un “periodismo de honestidad” y eviten la “convulsión social”.
En Bolivia la sedición está tipificada en el Código Penal en el artículo 123: “Serán sancionados con reclusión de uno a tres años los que sin desconocer la autoridad del Gobierno legalmente constituido, se alzaren públicamente y en abierta hostilidad, para deponer a algún funcionario o empleado público, impedir su posesión u oponerse al cumplimiento de leyes, decretos o resoluciones judiciales o administrativos, ejercer algún acto de odio o de venganza en la persona o bienes de alguna autoridad o de los particulares o trastornar o turbar de cualquier otro modo el orden público. Los funcionarios públicos que no hubieren resistido una rebelión o sedición por todos los medios a su alcance incurrirán en reclusión de uno a dos años”.