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Rivadavia Básquet de Mendoza evalúa continuidad en Liga Argentina

Mauricio Francese, titular de Rivadavia Básquet, puso en estado de alerta el futuro del club. que sin el aporte gubernamental, no jugaría a nivel nacional. Las estructuras deportivas en muchas instituciones del país continúan tambaleando producto de la crisis económica que se originara por la cancelación de ligas y competencias, a raíz de la pandemia del Covid-19. Y Rivadavia Básquet no es la excepción, analizándose -a futuro- bajarse de la Segunda Categoría del Básquetbol profesional argentino.

“Nadie puede saber como van a quedar los estados gubernamentales después del coronavirus. Es lógico que no den los aportes que brindan generalmente, porque hay cosas mucho más importantes que atender, que hacerle frente a compromisos deportivos. Por eso, nosotros no sabemos qué vamos a hacer. Rivadavia tiene un presupuesto que se basa mucho en la contribución estatal, por lo que no poder contar con eso a futuri, se hará dificultoso poder seguir participando de la Liga. Igual es prematuro hablar de ese tema, porque aún estamos en una competencia de la que no sabemos cómo se resolverá”, expresó el dirigente.

“Tuvimos comunicaciones vía teleconferencias tanto con la Confederación Argentina (CABB), como con la Asociación de Clubes (ADC), y con todas las instituciones que conformamos la Liga Argentina. Había un número de 23 equipos, entre los que estábamos nosotros, que queríamos dar por terminada la temporada, pero otros cinco, los de presupuestos importantes, quieren seguir. Entonces se analiza que los mejores cuatro de cada Conferencia hagan un mini torneo entre ellos y que de ahí salga el campeón y quien ascienda a la Liga Nacional”, consignó.

-¿Rivadavia debe mucho dinero?

-Nosotros no somos ajeno a la realidad del país. Tenemos licenciado al plantel y acordamos con los jugadores que la próxima semana cancelaremos la deuda que tenemos con ellos. Es que se acordó con la ADC que los contratos se respetaban hasta el 15 de marzo, por lo que en Rivadavia estamos tratando de ponernos al día con los chicos._Después, todo está por verse. Esto es dinámico y cambia todos los días. Igual creo que es una utopía pensar que el básquetbol argentino se pueda jugar este año.

-¿Hubo predisposición de los jugadores?

-Por supuesto. El viernes tuvimos teleconferencias con los chicos y les comunicamos los pasos a seguir. Completaremos los sueldos hasta el 15 y no les deberemos nada. Nos encantaría no dejarlos en banda como se dice, pero bueno, hay que entender también que no estamos contando con el convenio firmado con el Gobierno de Mendoza, y que desde la parte municipal solamente nos brindarán una parte de su colaboración. El resto de los esponsores se nos cayeron todos y de los 250 socios que tenemos, creo que pagaron su cuota unos diez.

-¿Qué van a hacer si deciden que regrese la actividad?

-Jugaremos con lo que tengamos y si es que podemos. Se habló de esa posibilidad también, pero no hay nada definido. Sería a puertas cerradas, por lo que el inconveniente que originaría eso sería de un daño colateral irreparable.

-¿Por qué motivo lo dice?

-Es que imaginate, a nosotros nos quedan 8 partidos como locales en la Liga, lo que genera un gasto no menor a los 30 mil pesos (planillas, apertura de estadio y árbitros), por lo que no poder jugar con gente deberíamos poner la plata de nuestro bolsillo. Eso quizás se pueda hacer una o dos veces, pero no ocho. Sumado a ello, los viajes y pagarle el resto de la campaña a los jugadores. Sería imposible.

-De acuerdo a sus palabras, el futuro de Rivadavia en la Liga es incierto.

-Pero no somos los únicos. Deberíamos conseguir que el sector privado nos ayude como nunca para no depender de la Municipalidad o del Gobierno provincial. Y no es lo que queremos, porque con esta pandemia, las arcas de los estados van a quedar saqueadas. Nosotros habíamos manejado un presupuesto austero a pesar de la inflación, pero todo se nos fue de las manos. Igual, la intención es de continuar en la Liga, pero sin hipotecar el futuro de la institución.