Preselección para Danzas Litoraleñas: soñando por representar a Entre Ríos
Un grupo de 20 parejas de jóvenes bailarines que intentan formar parte del Elenco Joven de Danzas Litoraleñas, se reunió este sábado en Crespo para realizar su segundo ensayo. El programa es impulsado por el Ministerio de Cultura y Comunicación de la Provincia y cuenta con la colaboración de distintos municipios. El coordinador de la propuesta, Albino “Pocho” Siviero, dijo que los bailarines “son los intérpretes, uno les vuelca la idea. A ellos los unió el baile, hay hermandad e inclusión, está todo. Tienen la oportunidad de llevar Entre Ríos al mundo”, afirmó.
Este sábado el salón Virgen de Luján de Crespo recibió a un grupo de jóvenes preseleccionados para formar parte del Elenco Joven de Danzas Litoraleñas, quienes realizaron allí el segundo ensayo del grupo. El proyecto, impulsado por el Ministerio de Cultura y Comunicación, tiene por finalidad crear un elenco de danzas folclórico integrado por jóvenes y que rescate las tradiciones asociadas a la música entrerriana y litoraleña. Se intenta de esta forma, fortalecer todos los estilos musicales de las orillas del Paraná, el Uruguay, el este y oeste de la provincia.
La preselección de los bailarines se realizó recorriendo los 17 departamentos de la provincia, a fin de que todos tuvieran la oportunidad de participar y conformar un espacio federal. Se eligieron de esta forma 40 parejas de bailarines, que ensayan dos veces por mes, una vez todos juntos y otra divididos en dos grupos de 20; actividad que continuará a lo largo del año y mediante la cual se seleccionarán las 20 parejas titulares y 20 suplentes. La colaboración de las áreas de Cultura de los Municipios, es la que vuelve posible los ensayos de los grupos en diferentes lugares de la provincia.
Saludos, movimientos, música, alpargatas, flores en el pelo, bombachas y volados, eran algunos de los condimentos que sobresalían en la práctica del baile. “No corran, bailen”, se escuchaba decir al coordinador de la propuesta Albino “Pocho” Siviero, quién mate en mano daba indicaciones y mostraba los movimientos a los jóvenes bailarines. “El bailarín tiene que dominar el cuerpo. Escucha, siente y baila”, les recomendaba.
El auténtico tagüé
En una pausa del ensayo, Siviero indicó que solo dos departamentos no tienen representantes en el grupo y señaló que durante el proceso de preselección “se notó un desconocimiento de nuestras danzas. Son las que han bailado nuestros abuelos, es nuestra identidad y es la llave que tenemos para ir a otros lugares a mostrar los nuestro. En otras provincias, no se ve la chamarrita como la bailamos nosotros. Tenemos mucha historia y tradición en pasos y aún en nuestra propia provincia se desconoce lo que es la chamarrita de paso, que es de la costa del río Uruguay”.
Afirmó a su vez, que Entre Ríos “tiene dos orillas y también se divide en norte y sur. La influencia correntina en el norte es inevitable, pero no es que bailamos a lo correntino, ¿no será que los correntinos del sur bailan a lo entrerriano? Es un juego de palabras, pero son distintas las formas de baile en un lugar que en otro”. Subrayó que si bien hay matices “sumándolos saldrá el auténtico tagüé, el entrerriano. Tenemos para salir a contar y decir: Esto es Entre Ríos. No es mejor ni peor, tenemos esto. La idea del elenco es llevar la auténtica identidad entrerriana por donde vaya”.
Sueños entrerrianos
María de los Ángeles, tiene 21 años y viajó desde Victoria para participar del ensayo. Comentó que hace 12 años integra un ballet de su ciudad y que siempre contó con el apoyo de su familia para dedicarse a la danza, “que es lo que me gusta”. Respecto a su incorporación al grupo preseleccionado para formar parte del elenco, manifestó que “es una experiencia hermosa. Conocer gente nueva te permite aprender cosas, es muy bueno compartir”.
“Es un sueño a alcanzar”, subrayó al ser consultada si se imaginaba representando a su provincia mediante el baile. “Poniendo todas las ganas creo que podré. Esa es la meta y tengo grandes expectativas”, agregó.
Por su parte, Ignacio de Nogoyá, con sus 24 años, asumió que está “tratando de aprender estilos nuevos. Somos de escuela y los chicos de la costa del Uruguay tienen un estilo totalmente diferente al nuestro”. En ese sentido, resaltó que “sus cadencias son las de las personas que van en una canoa. Se nota por ejemplo en el chamamé. Nosotros no lo bailamos así, pero todos tenemos un lenguaje y la buena voluntad en común, que es lo que nos aúna”.
Sostuvo que estaba “orgulloso de estar acá. Estoy aprendiendo cosas nuevas, con la oportunidad de representar a la provincia”. Señaló además, que “Pocho es como un padre, nos apoya, enseña, se brinda a nosotros. Es de esas personas que tienen conocimientos y no tienen problemas en darlo, así que podemos sacar el mayor jugo de él”.