Pintadas, grafitis, agresividad… ¿Cómo mutar esta tendencia?

Escuela 25 de Mayo. Muro sobre calle Gualeguaychú. Pintadas detestables. Barreras de prevención dobladas. NADIE hace nada. Una imagen nefasta. El punto es: limpiás, y a los pocos días aparecen nuevos grafitis. Enderezás parantes, y en breve lapso, otra vez curvadas por el obrar de imbéciles. ¿Y la Policía dónde está? ¿No hace falta una Policía Municipal? Galerías de postales testimoniales.

 

Años atrás intentamos instalar el tema… Claro está… Nuestra juventud como medio, y una falta de PESO periodístico influyó para que la propuesta pase desapercibida.

Hoy, volvemos a la carga… PARANÁ NECESITA DE UNA POLICÍA METROPOLITANA. Sí. NO es descabellado.

 

Solo hay que abordar la problemática de la INSEGURIDAD en líneas generales, de los excesos y daños que se producen con obras de diverso índole, de los atropellos a los Derechos de los demás como tirar la basura en forma inapropiada y fuera de tiempo, de los atentados perpetrados contra frentes domiciliarios, colegios, escuelas, o plazas, etc., de los abusos como el derroche de agua, y así podríamos extendernos en un sinfín de actos injustos, indebidos, ILEGALES.

 

Hoy, y días atrás, hablamos respecto a la aplicación de cartelería, afiches, panfletos que generan una roña inconmensurable en la vía pública, forjando una imagen de suciedad extrema en distintos  puntos de la capital entrerriana.

Pero, con las fotos que ilustran esta columna, basta y sobra para movilizar a la ciudadanía y en especial a la clase política, sobre todo ediles y legisladores.

 

Qué el Complejo Eva Perón y tantas otras escuelas luzcan un estado de deterioro caótico, pero se señale que hay procesos licitatorios en cumplimiento para sus reparaciones, vaya y pase… Es imprescindible, imperioso, armarse de paciencia y seguir tolerando como nuestros gurises tienen que concurrir a clases en ciertos edificios mientras otros tantos han sido remodelados o inaugurados recientemente.

 

Sin embargo, una cosa es lo inherente a ejecución de obras profundas, y otra es la PREVENCIÓN. Impedir, evitar, que se cause DAÑO. Por ello, si NO BASTA con cámaras del 911, si NO ALCANZA con patrullajes en motos, camionetas o autos, si NO SE CONSIGUE amedrentar a los vándalos con custodias, es EVIDENTE que la Policía de Entre Ríos está DESBORDADA y se necesitan REFUERZOS.

 

¿Por qué no, entonces, conformar una Fuerza Especial de vecinos COMPROMETIDOS con la Comunidad, los cuales cuenten con AVAL Oficial, RESPALDO gubernamental, en pos de desarrollar una labor LOGÍSTICA de FISCALES de comportamientos, de actitudes, de conductas y DEBIDAMENTE preparados se conviertan en un brazo ejecutor de LEYES con las cuales se CASTIGUE, se SANCIONE a los infractores descubiertos en palmarias CONTRAVENCIONES?

 

¿Quiénes serán los investidos con esa RESPONSABILIDAD? Todos aquellos que presenten sus Currículum Vitae, sus antecedentes profesionales y MORALES, demuestren que NO HAY INTERÉS ESPURIO sino VERDADERA VOCACION DE SERVICIO y pasen a ser evaluados, calificados y SELECCIONADOS por el Honorable Concejo Deliberante de la Ciudad de Paraná, contándose con el asesoramiento de los Cuerpos Legislativos de la Provincia y Fiscalía de Estado.

 

NO SIRVE un Defensor del Pueblo sentado en un Despacho. SIRVE con FISCALES secundando su labor a modo de Policía de la Metrópoli.

TAMPOCO SIRVE que las cámaras legislativas entrerrianas, POR CELO POLÍTICO o vaya uno a saber por qué CONDICIONAMIENTO, NO POSEAN Ombudsman.

 

Es IMPERIOSO, INSOSLAYABLE ponerse manos a la obra. Podemos tener una ciudad más limpia, pero para ello es imprescindible que se CONTENGA, DISUADE, Y/O REPRIMA toda acción de quebrantamiento de las leyes.

 

Con ojos cerrados, bocas cerradas, brazos caídos, la Justicia está cada vez más SOMETIDA, DOMINADA, por la malicia, el delito, la PERVERSIDAD y guste o no lo que aquí decimos, HAY QUE SER PERVERSOS PARA DAÑAR TANTO A FRENTES DE ESCUELAS. Hay que estar MUY ENFERMO de la cabeza para cristalizar semejante detrimento en Peatonal, parques y paseos, plazas, como hay que ser MUY COBARDE para ignorarlo y mucho peor, ENCUBRIRLO.