Patronato con pólvora mojada, yeta y desarticulado en defensa

Patronato sumó ante Atlético Rafaela otra decepción en la cual se entremezclaron la ineficacia ofensiva, la adversidad y elocuentes desinteligencias defensivas. El equipo de Zielinsky no gana desde aquel debut ante Belgrano cosechando luego tres empates y tres derrotas con 2 goles a favor y 6 en contra.

Si no se dice desde el seno del campamento “Santo” no vale la pena analizar eventuales posturas necias, soberbias u obtusas. Más vale creer que la autocrítica es profunda y que esta semana habrá novedades de relieve en cuanto a la futura conformación del equipo para visitar a los “Tatengues”.

Las lesiones y/o suspensión de Moreyra reducen campo de determinaciones en cuanto a variables para el “Ruso”, sin embargo el transitar por la 7ª fecha con un arranque poco halagüeño, con récord muy adverso en las últimas cuatro jornadas, implica que insoslayablemente uno imagine la búsqueda irreversible de variables.

De lo contrario deberíamos entender que se cuenta con un plantel demasiado corto y que el armado del mismo no haya cubierto debidamente todas las posiciones justamente para estar listos ante cualquier coyuntura adversa.

Lo que está en claro es el bajón sensible en algunas singularidades. Obvio que ello sucede con éste tipo de rachas. Ante ciclos victoriosos suelen “taparse” diversas vicisitudes, carencias o hasta problemas internos.

Pero las series negativas concluyen en micro-climas para nada constructivos de los cuales generalmente se hace leña para agregarle al fuego.

No es nuestra intención producir más combustión. De hecho que hemos sido clarísimos acerca de la mala suerte que sobrevuela o ya está instalada en la “Comarca Rojinegra”, pero al infortunio también se lo deja atrás con decisiones propendientes a cambiar, a torcer, un destino desfavorable.

Por eso es que consideramos como URGENTE que Zielinsky haga enroques, otorgue nuevos aires a distintos sectores y es muy notable la merma de determinados valores que, NO TIENEN LA CULPA EXCLUSIVA de ésta involución y LÓGICAMENTE cuando demuestren su indudable jerarquía volverían a insertarse entre los titulares.

Uno x uno

Sebastián Bértoli (5): está claro que las desinteligencias de sus compañeros lo vienen perjudicando y el Sebas va tirando síntomas de incomodidad por los movimientos de la zaga. Ello provoca que sus decisiones no sean siempre tan acertadas como en el Patronato de los ascensos y el de la última pretemporada como arranque de éste certamen. En el gol de Carignano dudó demasiado. Lejos de su nivel verdadero.

Víctor Soto (5): actitud le sobró y tuvo que cambiar a escasos minutos de arrancar la brega, del lateral derecho a la zaga central donde se vio inconexo con Fayart.

Walter Andrade (-): se lesionó a los 10 minutos de iniciado el partido.

Fernando Fayart (4): no se recupera. Irresoluto, inconsistente y hasta lento en el timming que debería tener un zaguero central. Evidentemente él mismo sabe que atraviesa por un lapso alejado de su real potencial.

Mauricio Mansilla (4): González lo volvió loco. Concedió mucho handicap  cuando le pusieron la pelota a sus espaldas y no dio alternativas en la proyección.

Cristian Devallis (8): el mejor de Patronato. Las pelotas que les puso a Jara, Sánchez Sotelo, Echagüe y Herrera fueron “Maradonianas”.

Mariano Echagüe (6): como siempre dio todo y al igual que Devallis toda vez que trasladó la pelota aportó buenas decisiones, pero cuando tuvo que definir fue horrible.

Marcelo Guzmán (6): un duelo particular con Walter Serrano que terminó empatado. El volante de contención “Rojinegro” ofrece una entrega admirable.

Fabián Espínola (-): se lesionó prematuramente y no pudo ser calificado.

Juan Sánchez Sotelo (4): toda la ilusión que generó su inserción como titular terminó siendo una decepción enorme. Muy flojo.

Diego Jara (5): le está costando adaptarse a la categoría, pero al menos intenta, mete y mete. Su coraje le permite un punto más que el intrascendente Sánchez Sotelo.

Claudio Weinzettel (4): dubitativo, nervioso, tenso. Como si el nivel de la división le esté jugando una mala pasada en cuanto a tener que enfrentar a delanteros de mayor categoría que el Argentino A.

Fernando Cravero (4): sin atributos de contención y sin claridad en la concepción. Impreciso en extremo.

Emanuel Herrera (-): jugó pocos minutos pero al menos puso un fervor elogiable.

Unión ganó y entró al podio

Unión de Santa Fe hilvanó esta noche su tercer triunfo consecutivo y se ubicó en el tercer puesto, a dos puntos del líder San Martín de San Juan, después de golear a Tiro Federal de Rosario 3-0, de local.

Unión de Santa Fe hilvanó su tercer triunfo consecutivo y se ubicó en el tercer puesto, a dos puntos del líder San Martín de San Juan,

después de golear a Tiro Federal de Rosario 3-0, de local, por la séptima fecha de la Primera B Nacional.

El delantero Matías Quiroga marcó los dos primeros tantos del conjunto dirigido por Frank Kudelka, a los 22 minutos del período inicial y a los 11m. del segundo período.

Así, el atacante puntano, de 24 años, totalizó cinco conquistas en la temporada y alcanzó a Javier Velázquez, de Independiente Rivadavia Mendoza, en el tope de la tabla de máximos anotadores.

El defensor Mariano Viola, en contra y en tiempo agregado, decoró la goleada.

Unión, que llegaba de vencer por 1-0 a Instituto de Córdoba y Atlético Tucumán, llegó a las 12 unidades y quedó provisoriamente en el tercer puesto, aunque deberá aguardar al cierre de la fecha para conocer su posición final.

En contraste, Tiro Federal perdió por cuarta vez en el torneo y quedó en el último puesto con cinco unidades.

Rumores por tantos empates

Quedaron sensaciones encontradas en el “Minella” tras la igualdad sin goles entre Aldosivi e Instituto. Porque hace rato que no pierde el equipo de Salvador Daniele y por momentos -como contra Independiente Rivadavia dos semanas atrás- muestra cosas interesantes del medio hacia arriba. Pero su cuarto empate consecutivo no le permite escalar en la tabla de posiciones.

Y así, si bien es importante haber salido del mal momento del arranque del torneo (con dos derrotas consecutivas) cuesta mucho despegar de los últimos cinco puestos de la tabla de posiciones y engrosar de una vez por todas un promedio que ya comienza a generar cierta preocupación.

Ayer empezó mal la tarde frente a los cordobeses. Es que el visitante, favorecido por un viento que sopló fuerte en su favor durante el primer tiempo, arrinconó contra su área a Aldosivi en el primer cuarto de hora y dispuso de algunas situaciones para abrir el marcador, incluido un remate desde afuera del área de Franco Canever que dio en el travesaño.

En realidad, durante ese lapso, la peligrosidad de Instituto estuvo basada más en los errores defensivos local a la hora de salir que una búsqueda profunda de la visita.

Igual Leandro Lázzaro generó preocupación con su presencia física e incomodó a la defensa local.

Pero pasado el cuarto de hora Aldosivi se acomodó mejor en el terreno. Las fallas en la salida local fueron quedando en el pasado y el mediocampo marplatense comenzó a tomar mayor protagonismo en el juego. Sobre todo cuando la pelota pasó por los pies de Enrique Seccafién, el más claro siempre (aunque a veces aparece de a ratos) en Aldosivi.

Por eso, en la media hora final de la etapa inicial, el conjunto de Daniele tuvo opciones para abrir el marcador. Facundo Nasif estrelló un cabezazo en el travesaño, Juan Pablo Presentadó exigió a Jorge Carranza con un violento derechazo desde fuera del área, Seccafién contó un par más de chances claras dentro del área y Martín Cabrera dispuso de otras dos. Faltó puntería y por eso el cero no se modificó.

El complemento fue menos electrizante, sin tanto dominio claro de ninguno de los dos, aunque Aldosivi impresionó, en líneas generales, un poco más que su rival.

Instituto dispuso de una situación muy clara tras un rebote largo que dio Pablo Campodónico luego de un remate de Martín Zapata, aunque Ramón Lentini, desde el punto penal, la despilfarró rematando por sobre el travesaño.

Y Nasif otra vez tuvo dos chances muy claras para romper el cero. Pero su cabezazo, primero, y el derechazo de volea de frente al arco, después, encontraron en ambos casos bien parado a Carranza. Matías Gigli dispuso alguna chance más que no pudo concretar. Casi todas esas ocasiones se generaron a través del juego aéreo, uno de los puntos fuertes de los portuenses.

En definitiva, la puntería faltó a la cita y el cero no se quebró. Aldosivi sumó su quinto partido sin perder pero no puede anotarse puntos “gordos”. Por eso ayer, a la salida de la cancha, algunos vieron la mitad del vaso lleno y otros no fueron tan optimistas…

No le sobró nada a los “Piratas”

Belgrano consiguió su primera victoria del torneo ganándole ayer 1-0 a Deportivo Merlo en el Gigante de Alberdi, con gol del colombiano Mauricio Casierra a los 9 minutos del segundo tiempo, después de pelearle y robarle la pelota al arquero rival Darío Capogrosso, cómplice involuntario de la alegría celeste.

Pero lo de Casierra fue mucho más que un gol. Desde su ingreso por el lesionado Juan Maldonado a los 25 minutos del primer tiempo le marcó el camino a un equipo tildado, empantanado en un partido que tampoco terminaba de armarse por las limitaciones tácticas y futbolísticas del rival.

Un desborde de Maldonado por izquierda y un tiro de Franco Vázquez que Capogrosso sacó al córner fueron las postales de la escasez de un primer tiempo en el que Merlo llegó sólo con un cabezazo de Diego Ceballos.

Desde el inició quedó en claro que Belgrano no hacía pie. Su línea de tres no lucía sólida, Loeschbor no era garantía y por el sector derecho Lollo se complicaba y no encontraba respaldo en Aldecoa, parado más arriba. En la zona de volantes centrales el tema mejoraba, pero de ahí para arriba surgía otro problema: por la falta de contacto de Vázquez con la pelota, la ofensiva celeste se limitaba al trajinar de Mariano Campodónico.

El ingreso del colombiano en el carril izquierdo no aportó precisamente claridad, pero sí lucha, pelea, entrega, hambre de llegar al arco contrario, condimentos que cuando el fútbol no aparece algunas veces sirven, como ayer en el Gigante. Y hubo efecto contagio. Ya en el comienzo del segundo tiempo, un tiro en el travesaño del arco de Capogrosso después de un tiro libre (fue de uno de sus propios compañeros), fue el preanuncio de que algo iba a pasar.

Ocho minutos después, Casierra no dio por perdida una pelota que venía corriendo desde su campo, se la peleó Capogrosso y la mandó adentro. Belgrano se mostraba peligroso pero subsistían las desprolijidades en defensa que empezaron a agigantar la figura de Juan Carlos Olave, en cuyas manos se consolidó finalmente el triunfo celeste: tuvo que sacar dos tiros al córner y a los 26 minutos ejecutó la atajada de la tarde al contener un rebote de un mal rechazo de Aldecoa que pegó en Ceballos.

Belgrano pudo definir de contra, pero sus inseguridades lo llevaron a abusar del pelotazo que impidieron a sus hombres de ofensiva tomar contacto con algo tan esencial como es el balón. No fue extraño que terminara sufriendo contra su arco.

Agenda dominguera

Hoy proseguirá la séptima fecha con cuatro partidos: Defensa y Justicia vs. Boca Unidos (a las 15), San Martín (T) vs. Ferro (15.30), Gimnasia (J) vs. Atlético Tucumán (16.30) y Almirante Brown vs. Independiente Rivadavia (20).