Parece que Camau Espínola entendió nuestro mensaje: va por las Federaciones
El secretario de Deportes de la Nación, Camau Espínola parece haber entendido nuestro clamor. Germán Vaccaro NO ESTUVO SOLO en su execrable gestión al frente de la CABB. Hubo una Comisión Directiva, una Mesa Ejecutiva que avaló ello y ese aval estuvo consolidado desde las propias Federaciones. El correntino, que aspira a seguir desarrollándose como político y para ello debe dar pasos firmes como funcionario, admitió su preocupación por la situación que altera al básquet argentino pero la hace extensiva a todo el deporte.
“En la CABB había un problema y claramente llevó a la intervención. No sólo por las denuncias de los deportistas, sino también por toda una consecuencia de acciones. No es que estemos buscando la intervención. Nuestra política es que las federaciones funcionen mejor ¿Cómo nosotros podemos ayudar para que el sistema funcione bien y a la vez ir actualizando y acompañando a las federaciones? Muchas de ellas son pequeñas y no tienen estructura para poder crecer. Queremos que el sistema funcione mejor”, resumió Espínola.
No es más contundente pues evalúa cómo concretar el desembarco, y trata de actuar con mesura, prudencia, aunque con su dialéctica da indicios que se vienen tiempos de cambios: “Estoy tratando de simplificar los mecanismos de lo cotidiano. O trabajo con la Federación para que tenga un funcionamiento más eficiente, o lo aplico desde el Enard o la Secretaría de Deportes para garantizar que no existan esos problemas hasta que la Federación funcione mejor. Las Federaciones tienen sus tiempos, como así también sus sistemas electorales, pero yo, como Estado, no puedo lavarme las manos para garantizar que los deportistas puedan desarrollarse en el <mientras tanto>, aseveró el correntino, anticipando que es muy probable (Y SERÁ SALUDABLE…) ver en breve que la intervención CABB derivará, pronto, en una rigurosa injerencia de su Organismo en cada ente provincial.
“Con algunos se puede hablar y con otros por ahí es más difícil. Estamos trabajando para que haya mecanismos desde el Enard para que garanticen que ese sistema funcione. Hasta que se dé una renovación natural, porque si no el tiempo pasa. Si bien hay que respetar la institucionalidad de cada una de ellas, como Estado, yo impongo un sistema que funcione, con autonomía en las decisiones. Hay que pulir el sistema”, concluyó Espínola en una posición de moderada retórica, pero la cual otorga señales que HACÍA RATO esperábamos.
Ojalá que no quede todo en un discurso, en una mayéutica expositiva a la cual se recurre para deslindar PROPIAS responsabilidades.