Para Echagüe es la última chance de creer… Para Atenas, una cuestión de honor
|Desde las 21, Echagüe (6 triunfos-31 victorias, 10° en la Conferencia Norte), enfrenta a Atenas de Córdoba (12-22, 9° de la División Norte). Fabricio Vito y Leandro Lezcano tendrán la enorme responsabilidad de dejar conforme a todos en el “Luis Butta”.
La historia de este cruce en la temporada dice que ambos ganaron un partido: Echagüe 90-84 (L) y Atenas 90-77 (L).
El 30 de septiembre, en aquel arranque inesperado de los entrerrianos, los dirigidos en ese momento por Daniel Maffei dieron la nota con Kodi Augustus (20), Matías Nocedal (18), Sebastián Uranga (14), Brandon Davis (14), y Franco Barroso (12) como baluartes esenciales. Estando ausente Dallin Bachynski.
Hoy ya no está Augustus, Barroso seguirá afuera absurdamente sin recambio temporario y sin que Echagüe misteriosamente NO PATALEE contra Diego Grippo, jefe médico de la AdC en una situación MUY confusa, digamos que… hasta turbia.
También se duda de la presencia de Matías Nocedal (desgarro) pues desde calle 25 de Mayo se sigue con la patética postura de no brindar partes médicos oportunos, en una conducta comunicacional plenamente repudiable.
En otro orden… En el banco seguirá estando como asistente Ignacio Barsanti, pero el head coach ahora es Iván Najnudel, quien poco ha modificado la estructura y modo de juego de un Echagüe contradictorio.
Respecto a aquel partido, Atenas ya no cuenta con Adrián Capelli. Y el que tiene la responsabilidad de guiar el barco es Osvaldo Arduh.
Por el lado del plantel “Griego”, no está más Dwayne Jones (un gran fracaso su retorno a la Argentina…) y por él quedó Roquez Johnson, el campeón con San Lorenzo que había recambiado temporariamente al Gabo Mikulas.
A la vez, en comparación con ese partido, a mediados de octubre el “Griego” prescindió de los servicios de Juan Manuel Torres y por él llegó Lisandro Rasio.
El 5 de noviembre llegó la revancha para Atenas con un 90 a 77 en el “Carlos Cerutti” con Gustavo Miravet de DT. Pete Mickeal (12) fue el verdugo de Echagüe con 20. Otras piezas vitales: Johnson 17, Baxley 16, Lo Grippo 11 y Rasio 10.
En el “Negro” jugó Xavier Keeling (otro de los que ya no están…), y pudo presentarse Bachynski. Solano (26), Nocedal (16) y Davis (12) fueron lo mejor del conjunto de Entre Ríos.
De Echagüe ya sabemos que no están más ni Keeling, ni Bachynski; mientras que, a fines de enero, Atenas también cortó a Walter Baxley.
Al mismo tiempo, Atenas sufrió, entre varias lesiones, la baja por 45 días de Diego Gerbaudo, que por esos días se lesionó el quinto metacarpiano de su mano derecha.
Jezreel De Jesús había sido un refuerzo temporal y Osvaldo Arduh, quien sucedió al “Zurdo” Miravet escogió a Muhammad El-Amin, un guardia con excelentes antecedentes en el Kymis B.C. de Grecia.
Hoy, se anuncia que cada club tendrá las siguientes formaciones a las órdenes de Iván Najnudel y Osvaldo Arduh:
Echagüe: Joaquín Baeza, Gelvis Solano, John Millsap, Sebastián Uranga, Derrick Carácter; Emilio Stucky, Brandon Davis, Eugenio Zustovich, Carlos Buemo, Gerónimo Rosso, y Ramiro Rattero. La duda (reiteramos…) Matías Nocedal.
Atenas: Bruno Lábaque, Muhammad El Amin, Lisandro Rasio, Diego Logrippo, Gabriel Mikulas; Pete Mickeal, Roquez Johnson, Diego Gerbaudo, Leonardo Lema, Franco Baralle, Mateo Chiarini, y Juan Cruz Oberto.
Tras superar a Peñarol por 71-69 el pasado 20 de febrero, Echagüe sumó tres derrotas en fila: Quimsa (-25), Olímpico (-37) y San Martín (-5).
La exigua brecha con los correntinos no se dio por una consistente mejoría paranaense sino por una involución ostensible de San Martín que luego viajó a Concordia y perdió con Estudiantes.
Para elogiar de Echagüe: John Millsap dejó una estupenda imagen en su estreno. Como equipo sigue exhibiendo más de lo mismo. Dependencia absoluta de la inspiración individual, pocos pases, nada de sistemas salvo algunas cortinas a la bola, pick and roll o pick and pop, una interesante transición cuando se le es permitida esa defensa a medio foul (o tres cuarto…) y/o se hace fuerte en el rebote defensivo.
También el jugar con plantilla incompleta perjudica, no hay dudas, ya que a Echagüe nada le sobra.
Ya si partimos de la diferencia de presupuestos con los demás intervinientes, está claro que a Echagüe le falta demasiado.
Peor aún… el arribo de Najnudel fue casi imperceptible. Salvo sus declaraciones insípidas, casi inexpresivas respecto a la realidad cruda de su equipo, no ha modificado nada respecto a los primarios errores y vitales carencias.
La poco coherente administración de minutos ha sido su Talón de Aquiles y ante San Martín de Corrientes fue objeto de una lluvia de insultos que no terminó peor por los horrores de los orientados por González que parecieron subestimar a los de la capital entrerriana.
Sin embargo… en defensa de Najnudel, uno lee las declaraciones de un crack histórico como Gabriel Mikulas, hablando que el juego de esta noche lo rotula como una final de Serie Regular y, le da crédito a la posición del hijo de León David.
Es que si antes de enfrentarse por tercera vez, un hombre de los kilates de Mikulas, figura notable de la Liga, y tasado cinco veces más que cualquier jugador de Echagüe, dice “tendremos al frente a un equipo muy necesitado. Nosotros somos el equipo más cercano que tienen, por eso será una final de temporada regular…”. ¡Caramba!
Es un mensaje doblemente estimulante para los locales que, repetimos, no tendrán a Barroso (el eterno lesionado sin recambio…) y Nocedal es poco posible que gane minutos.
Echagüe es el peor equipo de la temporada y es el claro candidato a pelear la Permanencia salvo un caos, o caída estrepitosa de Atenas.
Los de Córdoba han jugado TRES partidos menos que los de Paraná y le llevan SEIS victorias. Por lo tanto, debería darse una CATÁSTROFE para los hoy conducidos por Arduh, de aquí a mediados de mayo.
Y ya que estamos… Inevitable recordar que el 9 de mayo jugarán de nuevo pero en suelo mediterráneo. Por lo tanto, calificar hoy de “final” a este choque es muy loco…
Tal vez, Mikulas con su responsabilidad ejemplar, busca acicatear a sus compañeros para que comprendan que no se puede regalar nada y que sería contraproducente perder ante uno de los equipos más mediocres que ha tenido la historia de la Liga en cuanto a estadísticas.
Lo de Echagüe es paradójico… cuenta con singularidades que darían una mano en cualquier plantel, pero ni Maffei, ni Barsanti, ni Najnudel han dado en la tecla respecto a la orientación táctica-estratégica.
Solo hubo pequeñas innovaciones motivacionales. Pero el EQUIPO sigue SIN ESTAR. De hecho, pareciera que EL GRUPO NO ESTÁ. Y todo se complica con la elección del último recambio donde el entrenador deberá aplicar su mayor sagacidad, siendo Brandon Davis el hipotético elegido para el corte.
Echagüe sabe que hoy es una “FINAL” porque La Unión está 11 triunfos arriba y quedan 19 jornadas. O sea, UTÓPICO, QUIMÉRICO pretender alcanzar a los formoseños.
En cambio, vencer hoy a Atenas podría robustecer las ansias en cuanto a que suceda un milagro y el histórico multi-campeón caiga en un proceso de deterioro psicofísico insondable.
Por ello Echagüe hoy “tirará toda la carne en el asador” y saldrá resuelto a ensuciar el partido, a ganarlo sea como sea.
Los límites serán la jerarquía de Atenas con hombres de enorme talento y calificados entre los vip’s en la historia liguista (Brunito Lábaque, Diego Lo Grippo y Gabo Mikulas), la indudable capacidad de estratega del “Turco” Arduh y la autoridad que impongan los jueces, siendo fundamental la personalidad que esgrima Fabricio Vito, uno de los mejores jueces de la Liga.
Si Echagüe cree que puede ganar a las piñas se equivoca feo. Si Echagüe cree que puede ganar con la presión de la gente, se equivoca más horrible aún.
Echagüe tiene que JUGAR EN EQUIPO, dejar de cometer tantos errores infantiles por caprichos particulares, no incurrir en faltas evidentes innecesarias en cada costado (sobresalen los chequeos ilegales de Solano y Baeza, las cortinas, los empujones y las embestidas de Caracter, el entusiasmo oscilante con el fragor/rigor de Stucky…), y de modo neurálgico elegir las mejores opciones de lanzamiento en cuanto a espacios y ángulos como tiempos de resolución.
Echagüe debe dejar de ser un humilde mosaico de singularidades y pasar a ser un CONJUNTO.
Atenas, que está alojado confortablemente en el Maran Suites & Towers, viene de conseguir algo de aire con un contundente 90-71 sobre Obras, aunque arrastra seis caídas seguidas como visitante. No gana desde el 11 de diciembre (Quilmes 62-69).
La incertidumbre para Arduh es cómo reaccionarán físicamente Lábaque (contractura en gemelo) y Mickeal (viene de un desgarro).
Para los de Córdoba NO ES UNA FINAL. Sí, es ver si de aquí en más pueden aspirar a meterse en Playoffs por el título y no terminar anticipadamente la temporada.
Es un desafío con el HONOR, con el ORGULLO, pero NO CREEMOS que sea una FINAL inherente a la trivial lucha por PERMANECER en Primera. Respetuosamente, y con enorme aprecio, disentimos con el querido Gabo Mikulas.
Resto de agenda
– Peñarol (Mar del Plata) (15-24, 8° Sur) vs Olímpico (La Banda) (20-18, 6° Norte)
. Hora: 20:00. Dónde verlo: La Liga Contenidos.
. Árbitros: Pablo Estévez y Pedro Hoyo.
. Estadio: Islas Malvinas.
– San Martín (Corrientes) (26-10, 1° Norte) vs Gimnasia (Comodoro) (19-19, 4° Sur)
. Hora: 21:30. Dónde verlo: La Liga Contenidos.
. Árbitros: Juan Fernández y Javier Mendoza.
. Estadio: El Gigante Rojinegro.
Regatas dejó mudo a Obras
Regatas Corrientes se mantuvo tercero en la Conferencia Norte (a 4 puntos del líder San Martín). En esta oportunidad sacó rédito de la irregularidad de Obras Sanitarias y volvió a ganar afuera de Parque Mitre tras cinco partidos venciéndolo por 79 a 74 a partir de la tarea protagónica del colonense Paolo Quinteros (33+3+6, 4/7 triples). Con este resultado Obras cayó al séptimo lugar de la Conferencia Sur y provisoriamente quedó afuera de los playoffs.
Regatas Corrientes además de romper la sequía tuvo otros motivos para festejar dado que al reciente abultado revés ante el colista Hispano Americano se presentaba con las bajas de Pablo Espinoza (lesionado) y de Kejuan Johnson, quien aún no pudo debutar porque a su tardía habilitación le sumó una intoxicación estomacal que le impidió estar presente.
Obras sólo pudo prevalecer en el inicio, en varios pasajes del primer cuarto alcanzó a ganar por cuatro, pero en la medida que empezó a rotar se fue quedando sin respuestas y esa circunstancia a Regatas Corrientes le permitió quedarse con el primer cuarto (16-18).
A partir de ese momento y por los siguientes treinta minutos el trámite fue una constante. Regatas Corrientes casi siempre corrió adelante alimentándose de Quinteros principalmente frente a un Obras que lo persiguía de cerca pero le faltaba consistencia para poder revertir.
En el segundo y tercer cuartos Regatas Corrientes un par de veces se escapó a siete (25-32, 36-43) y cuando restaban 7′ para concluir maximizó a ocho (57-65). En contraposición Obras Sanitarias le respondió con el recurso que tenía a su alcance (34-34, 52-52 y 65-65).
Y esa misma postal se repitió en el desenlace con el agregado de que a falta de un minuto Obras vía Barral se adelantó tras varios minutos (72-71). ¿Y quién apareció? Quinteros. Metió un doble y seis de seis libres y le bajó la cortina al partido ratificando toda su vigencia.
La síntesis
OBRAS SANITARIAS (CABA) (18-21) 74-REGATAS CORRIENTES (21-13) 79
Obras Sanitarias (74): Pedro Barral 11, Tomás Zanzottera 17, Walter Herrmann 19, Dennis Horner 15, Martín Leiva 5 (fi); Matías Bortolín 4, Jordan Smith 1, Federico Mariani 2, Andre Barrett 0. DT: Nicolás Casalánguida.
Regatas Corrientes (79): Donald Sims 15, Paolo Quinteros 33, Fabián Ramírez Barrios 8, Javier Saiz 6, Chevon Troutman 2 (fi); Fernando Martina (x) 8, Juan P. Arengo 3, Santiago Vidal 4. DT: Gabriel Piccato.
Árbitros: Fabricio Vito y Silvio Guzmán. Parciales: 16-18, 34-38 y 54-59. Estadio: Obras Sanitarias. Final LDD: Obras Sanitarias 90-Regatas Corrientes 43.
Foto: Gentileza Prensa AEC – Bernardo Albisu.-