Otro récord del dólar blue: cerró a $9,20
|La cotización del billete en el mercado paralelo saltó 26 centavos. La divisa en el circuito informal avanza 34,7% en lo que va del año. La divisa oficial operó sin variaciones, a $5,18. La brecha es de 77,6 por ciento.
La tensión que se vivió en el Parlamento se transformó en incertidumbre en la City porteña, situación que se tradujo en cierta presión sobre el dólar libre o “blue”, que se ofreció al cierre a 9,20 pesos, 26 centavos más que el cierre registrado este miércoles. Este nuevo aumento representa un 34,7% de aumento de la divisa en lo que va del año.
“Hay una mezcla de varios factores que se conjugan para que el dólar blue se dispare: un clima enrarecido desde lo institucional tras la votación esta madrugada de la reforma a la Justicia, una emisión monetaria descontrolada por parte del Banco Central y la ausencia de vendedores”, dijo a DyN un operador de la city porteña.
Los agentes del mercado cambiario coinciden en que se registra una suave pero persistente demanda de dólares físicos por parte de privados para coberturas. Los negocios evolucionan con prudencia por los controles e inspecciones vigentes y frente a la cautela de los “hacedores de mercado”, dijeron los operadores, pero estos mismos controles restringen la oferta del circuito paralelo y empujan más hacia arriba el precio de la divisa.
“Ninguna alquimia financiera será suficiente para persuadir a la demanda potencial de divisas en el marco de una percepción generalizada de atraso cambiario”, indicó la consultora Empiria en un informe.
En el mismo sentido, un estudio del Banco Ciudad refirió que “la demanda (sobre el mercado informal) se vio impulsada por exportadores que, habiendo liquidado sus ventas al exterior en el mercado de cambios oficial (obteniendo a cambio pesos), buscaron redolarizar sus posiciones en los mercados paralelos, dadas las restricciones para atesorar dólares”.
“Adicionalmente, los operadores que venían actuando bajo indicaciones oficiales, y que salieron a ofrecer dólares para enfriar la cotización del ‘blue’ a fines de marzo, parecen haber desaparecido”, agregó, para vaticinar que “esto es sólo un preludio de lo que podría ocurrir en los próximos meses, con el ingreso de los dólares de la cosecha gruesa”, indicó la entidad que preside el economista Federico Sturzenegger.
En tanto, en las casas de cambio y bancos del microcentro porteño el dólar oficial se mantuvo sin cambios a $5,12 para la compra y $5,18 para la venta. De esta forma, la brecha que separa a la cotización oficial del dólar minorista del precio que se paga por el dólar paralelo, en las cuevas de la City, llegó al 77,6 por ciento.
El economista Carlos Melconian consideró por radio El Mundo que “las restricciones de cambio vana a continuar y lo que está en tela de juicio es saber si este es un contexto en el que el Banco Central vuelve a comprar dólares o no. En el peor escenario puede precipitar algún tipo de decisión respecto de pagos en dólares que hoy todavía están vigentes y pueden ir a una restricción adicional. Ejemplo: tarjetas de crédito”.
“La suba del dólar tiene que ver directamente con la reforma judicial. Nos afecta a todos. Los que tienen la caja de seguridad saben que sin las cautelares, mañana van con un escribano y le abren la caja de seguridad. Por eso, los uruguayos y los chilenos se anticipan y abrieron más cajas de seguridad en Uruguay y Chile”, afirmó el periodista especializado Luis Beldi.
“Vos te refugiás en el dólar para huir del peso, no porque seas antipatriota, sino porque los que tienen que administrar el peso no lo defienden, emiten, pagan con reservas, dan subsidios, importan combustible porque coartan la producción de petróleo, porque no saben administrar”, comentó por FM Cultura.
El dólar “contado con liquidación”, utilizado para operaciones legales de fuga de capitales a través de la venta de bonos y acciones argentinas en el exterior para hacerse de dólares, promedia 8,99 pesos.
“Cualquier precio para el dólar es bueno, porque hoy es caro y mañana es barato. Porque no hay otro lugar dónde refugiarse de un Gobierno que va por todo. Lo que consiguen, cuando la gente se refugia, es que desaparezca de la vista de ellos todo lo que se pueden arrebatar: las inversiones – que generan puestos de trabajo- y es el crédito. No hay demanda de crédito porque nadie quiere tener plata para invertir en algo que después (Guillermo) Moreno te congele el precio o la AFIP te lo observe”, opinó Luis Beldi.