Otra vez Paraná sin agua

Uno puede entender, comprender, que tras el gravísimo temporal del pasado 19 de febrero Paraná haya sufrido innumerables coyunturas en los servicios diversos de uso público. Fue simple discernir que NO estábamos preparados, ni como Comunidad ni a nivel Estado. No hubo prevención y así el efecto fue doblemente devastador y del cual aún no nos recuperamos integralmente. Sin embargo, en una semana, no se tomaron previsiones a futuro, tras otra tormenta, -hasta la madrugada de hoy de distintas connotaciones que la de 7 días atrás-, tampoco hay agua.

 

El 19 de febrero se informó desde la propia Comuna que “por primera vez en la historia la planta de agua estuvo sin energía eléctrica durante 9 horas, este hecho hizo que se las reservas diarias de agua se agotaran”.

Y se  comunicó “Hace minutos comenzó a funcionar el sistema de bombeo y se estima que para la madrugada se normalizará el servicio”, sugiriéndose “ahorrar el agua que tienen en los tanques domiciliarios hasta que el servicio funcione con normalidad”.

 

En verdad, no fue un día de interrupción pues en varios barrios se reclamó que la demora en el retorno de flujo normal fue mayor.

Lo peor es que hoy, tras un temporal de inferiores características, se vuelve a mencionar “un corte de luz”, por lo cual “se dejó de bombear agua hacia la planta potabilizadora, lo cual hizo que se redujeran las reservas del vital suministro”.

 

Así, hasta el cierre de este reporte, gran parte de la ciudad está sin agua desde aproximadamente las 8, indicándose que alrededor de las 12 comenzaría a normalizarse la provisión.

 

Reflexión…

 

No está bueno que personal experto de Obras Sanitarias, intendente y responsable del área salgan a la palestra y hablen con CLARIDAD de lo que está ocurriendo. ¿O ahora ya será habitual, cotidiano, que ante el menor temporal se corte la luz y no haya flujo de tan vital elemento para las redes capitalinas?

¿No hay forma de contrarrestar esta problemática? ¿No hay modo de tomar previsiones adecuadas? ¿No hay manera de adoptar una postura precautoria? ¿De ser precavidos?

 

Invitamos a Sergio Varisco a expedirse, a dirigirse a la ciudadanía, y si se trata de un problema “heredado”, exponerlo como tal y si no hay soluciones espontáneas que surjan desde la Gestión, abrir un plebiscito para que la ciudadanía PROPONGA la corrección imprescindible.